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Desperté, el libro había caído en el suelo, estaba algo aturdida, ya que desperté por culpa del despertador, me levante y fui directamente al baño, me mire en el espejo y efectivamente mi cabello estaba echo un desastre y tenia la marca de la almohada en la cara, me metí a la ducha y el agua estaba helada, pero tenia prisa así que me bañe rápidamente, y me cepille, me coloque unos jeans negros rasgados, un Top rojo que nunca usaba y unas sandalias color beige, me hice una coleta y baje a desayunar, apenas llegue a la cocina pude ver la cara de sorpresa de mi madre, yo simplemente le dedique una sonrisa, raramente hoy había amanecido de un excelente humor, no se a que se debía, comí mi desayuno tranquilamente y al terminar fui al fregadero y lo lave, salí y para mi sorpresa Spencer no estaba afuera, como comúnmente estaba, decidí que era hora de tomar el bus, camine hasta la parada y me senté en el banco de la parada, esperando al próximo bus que venia, me sentía realmente extraña, pero por fin llego el bus, me senté y espere hasta que el bus me llevara hasta el instituto, por mas que le dijera a mis padres que necesitaba un carro, ellos se negaban a comprármelo, pero no importa ahora, hasta que por fin llegue al instituto, pague y me baje, y camine directamente hasta el salón y ahí estaba mi amiga sentada hablando con una de sus amigas porristas, yo solo me pare a su lado, ella se volteo al sentir que alguien estaba a su lado.
-Hola Spens -dije, ella se quedo mirándome atónita, yo me senté a su lado y me miro con mucha pena.
-Disculpa se me olvido, se que te dije que desde que tuviera carro no tenias que preocuparte de tomar el estúpido bus -dijo, yo me quede callada y ella me miro ansiosa esperando mi respuesta.
-Descuida, pero si te digo que tenia demasiado tiempo que mi trasero no tocaba, uno de esos incómodos asientos de bus -reí, y saque mi cuaderno, al mirar unos asientos mas adelante estaba Dylan, ¿sera que por eso estaba tan de buen humor?
-Ok¿que paso, con Danielle Hudson?, que me fuera dicho mil y una cosas por dejarla plantada -dijo mi amiga, me miraba como si fuera un bicho raro.
-No se pero ando extrañamente feliz -reí y mi mirada automáticamente se desvió a donde estaba Dylan, por mala suerte mi amiga se dio cuenta, parecía que su sonrisa ocupaba toda su cara -¡Cállate! no es lo que crees.
-Aja, se que te escribo ayer, duro como un milenium en pedirme tu numero, ahora tengo sus secretito guardo, sera que podre usarlo a mi antojo -dijo empezando a susurrar, levanto su ceja como acusadoramente- no se porque aceptaste, que fuera todo a escondidas.
-En realidad, no me importa en lo absoluto -dije, encogiéndome de hombros, dedicándome a mirar el pizarron por había comenzado la clase, ella también se callo y nos dedicamos a mirar la clase de historia.
La clase fue transcurriendo algo rápido, salí de historia y fui directamente a geografía, me sentía mas sola que la una, estuve muy atenta a mis clases, odiaba que todos los chicos que conocía fueran de años mayores que yo, y ya están en la universidad, la clase de Geografía por fin había terminado, y ya me estaba empezando a sentir incomoda con el top, fui directamente a el comedor y me encontré a Vanessa, fuimos a comprar nuestra comida, nos sentamos.
-Geografía es horriblemente aburrida -dije, ella asintió mientras metía un bocado de su comida, en eso me llego un mensaje.
"Te espero afuera, cuando termines de comer, avísame cuando vallas saliendo"
- ¿como te fue hoy? -pregunto mi nueva amiga, yo prácticamente la ignoraba, hasta que sentí su mirada desconcertada encima.
-¿ah? si bien, bien y ¿a ti? -pregunte estaba realmente distraída, no era que me gustara Dylan, pero debía admitir que esto de verse a escondidas era un juego gracioso.
