CAPITULO 11

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Lauren POV

—Más!— Ordenó Camila en un suspiro sobre mis labios. Y no pensaba hacer otra cosa más que obedecer. Pero primero tenía que explicarme algo.
—Camila, mírame y dime qué carajos hacías con esa tal Ariana en una puta cita.— dije tomándola de la barbilla para que me mirara a los ojos.
—!Basta Lauren, no comencemos de nuevo con esto! Si salí con ella pero no en una cita.— dijo levantándose de mi regazo dejándome sentada en el suelo.
—!Asi, si no era una cita entonces que era! ¡Crees que si se lo preguntamos a ella responderá que solo fue una comida entre colegas por favor! Por quien me tomas! Crees que soy idiota!.
—¡Ahora que lo dices no puedo pensar en otra palabra que te describa!— La forma en que lo dijo hizo que me hirviera la sangre aún más. Se estaba burlando de mi.
—Te estas burlando de mi. Y eso no lo voy a permitir Camila.—Dije levantándome para comenzar a acercarme a ella hasta estar de frente.—Deberías ir aprendiendo que de Lauren Jauregui nadie se burla.
—Así pues tu deberías aprender que a Camila Cabello nadie le da órdenes.— dijo desafiándome con la mirada. Acercándose más a mi quedando a solo centímetros.

Ninguna quito la mirada de la otra. Ninguna estaba dispuesta a ceder.
Yo no cedía jamás y mucho menos cuando yo tenía razón.
—Tienes razón Camila, nadie te puede dar órdenes.—dije susurrando sobre sus labios, sin dejar de verla a los ojos.—Pero yo no soy ese nadie. Para ti yo soy todo. Para ti yo soy tu mujer. Y tu debes obedecer a tu mujer.—tome su mano llevándola hasta mi polla que ya estaba dura de nuevo.
—Aaah!—Jadeo al sentir mi polla en su mano. Comencé a mover su mano para que empezara a pajearme.
—Eres mía Camila— dije sobre sobre sus labios. Me separé de ella empujándola para que quedara sentada sobre el sofá que estaba detrás de ella. Tome un puño de su cabello y lleve su cabeza hasta quedar frente a mi polla.— Abre la boca— Estaba a punto de meter mi polla en su boca.

—Camila, donde no estés lista ya are que pagues los... !Grande!.—salte del susto al escuchar el grito de la chica rubia que estaba parada junto a la puerta de Camila. Tenía los ojos bien abiertos viendo directamente a mi polla que estaba solo centimetros de la cara de Camila.
—¡Dinah!—gritó Camila tomando un cojín del sofá para tapar mi polla— !Dinah!—Volvió a decir, ya que la chica no dejaba de ver mi entre pierna— Dinah deja de babear y voltéate.
Aunque ambas seguíamos con ropa no pude evitar sentir como la sangre en mis mejillas se hacia más notoria.
—Dinah qué haces aquí— dijo Camila parándose enfrente de mi para taparme de la vista de su amiga.
—Camila se supone que iríamos con Louis y Harry a tomar unos tragos— me puse rígida al oír los nombres de esos tipos, no pude evitar ponerme celosa de ellos por qué no se que intenciones tienen con Camila. Mi Camila.—Pero como veo que estás muy ocupada será mejor que lo dejamos para la otra, disfruten su noche.
—No! Espera Dinah dame 5 minutos—dijo Camila antes de que su amiga saliera por completo del apartamento de Camila.
—Camila espera que? A donde crees que vas— Dije entrando a la habitación de Camila mientras ella estaba se estaba probando un vestido muy corto para mi gusto.
—Lo siento olvide que venia. Y no puedo cancelar ahora tengo que ir.—
—¿Y que?, esperas que me quede sentada viendo como sales a quien sabe donde con dos tipos a los que no conozco vistiendo eso— explique refiriéndome al absurdo pedazo de tela, que dejaba claramente a la vista su culo.
—Lauren eso no es de tu interés, si yo salgo con uno o dos chicos no es de tu incumbencia, !estupida arrogante¡.
—¡Estupida arrogante!, pues está estupida arrogante no dejará que salgas así vestida.
—Así? Y qué vas a hacer para impedir que yo salga, me vas a encerrar, !ja estupida esta es mi casa¡—
—Bien tú lo pediste Camila— dije mientras la tomaba y la arrojaba a la cama. Tome la parte delantera de absurdo vestido y lo rompí sin problemas.
—Tarada que te pasa era mi vestido favorito—
—No el mío Camila. Ahora cállate y escúchame, vas a llamar a Dinah y decirle que no podrás salir hoy con ella ni con ningún otro estupido por qué tienes que atender a tu mujer— estaba a punto de protestar antes de que la interrumpiera— oh de lo contrario voy a amarrarte a esta cama y saldré a decirle yo personalmente a tu amiga que no saldrás con ella, y después vendré y terminaré lo que dejamos en la sala y después me iré y te dejaré aquí. Necesitada y caliente por mi. Y solo vendré hasta mañana para revisar si sigues con esos jodidos arranques de terquedad—
—No te atreverías— dijo desafiante eh incrédula.
Quería demostrar que ella podía conmigo, oh hermosa claro que puedes conmigo, pero cuando debo cuidar de lo mío no tengo límites. Tome mi corbata para amárrala a ambas muñecas de Camila mientras ella protestaba.
—Basta Lauren no te atrevas, de verdad crees que Dinah se irá así tan fácil sin cuestionar—
—No lo se Camila, pero tú no quisiste hacerlo por las buenas.— dije terminando el último nudo.
Me coloqué a su altura y le di un corto beso para después salir de su habitación. Fui directamente a la sala de Camila para encontrar a su amiga revisando algo en su teléfono.
—Hola— dije tratando de llamar su atención, lo cual funcionó por qué dejó su teléfono para prestarme atención.
—Si lo se, lo se dile a Mila que la veo luego y que me la debe.— se levanto y tomo su bolso para ir directo a la puerta. — Adiós chica linda, cuida bien de Mila.— dijo giñandome antes de salir.

Regrese a la habitación de Camila, y como era de esperar estaba tratando de liberarse. Me quede parada en el marco de la puerta observándola por un momento. Diablos debo tener cuidado si no quiero que nadie me la quite, ella es jodidamente hermosa.
—Ni lo intentes, no podrás liberarte y menos ahora que estamos solas.

She Is Mine (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora