WITHOUT YOU | kth.jjk [EDITANDO]

16

Estaba poniéndose su pijama una hora después de haber terminado de hablar con Taehyung, pues a pesar de no tener sueño quería estar en cama un poco.
Se recostó un rato mirando al techo, hacia la pared y a través de su ventana, pero no podía conciliar el sueño.

Escuchó unos ruidos de afuera, pues alguien tocaba su ventana con pequeñas piedritas.
Quitó su cobija de encima y salió a ver qué pasaba.
Un camisón gris cubría su torso y sus piernas estaban descubiertas a la mitad, protegidas por la tela de su bóxer.

Sonrió al encontrarse con esos ojos que tanto amaba y ese cabello rojo que se veía hermoso de noche.
Se sorprendió un poco al ver la hora, era cerca de media noche, ¿qué hacía su novio a esa hora fuera de casa? Lo sabría pronto.

—Hola, mi amor— dijo el mayor mirándolo desde abajo— te ves hermoso, pero creo que tienes que cambiarte

—¿Y eso para qué?— dijo mientras reposaba su codo en el barandal de su balcón

—Cita de noche, no planeé nada, así que será genial— esbozó una linda sonrisa y lo convenció— te espero acá en cinco minutos

Jungkook estaba curiosamente interesado en lo que Taehyung tramaba, así que obedeció y se puso un par de jeans y un suéter que encontró por ahí.
Trató de bajar y por fin aterrizó con la ayuda de su novio.

Taehyung lo recibió en sus brazos y le dio un lindo abrazo.

—Siendo sincero, estoy un poco asustado, ¿vas a secuestrarme?

—Algo así, pasaremos la noche juntos, iremos por ahí irrumpiendo en la calle sin autos, haciendo lo que queramos, es de noche y la ciudad nos pertenece, ¿qué dices?

Jungkook sonrió. Le gustaba este tipo de ideas que se le ocurrían de vez en cuando, locas, atrevidas, divertidas, justo como él.

Salieron por el portón de su casa y caminaron calle abajo.

—¿Sabías que las estrellas pueden comer planetas?

—¿Qué— Jungkook a veces se sorprendía de las cosas que decía su novio de repente.

—Así es, no sé cómo, solo lo leí en una revista, es escalofriante y extraño.

—¿A dónde iremos?

—¿ A dónde quieres ir? Podemos ir literalmente a donde tú quieras, mira— había un parque cerca de ahí— podemos ir ahí, nadie nos verá raro por no ser niños.

Lo tomó de la mano y lo guió a los columpios de ahí.

—Anda subete.

Ambos comenzaron a balancearse disparejos pero aún así era genial.
Jungkook miró a un gato pasar por ahí y le pareció bastante lindo por lo que decidió seguirlo.

Taehyung sonrió, pues le gustaba ver a su chico como un bebé conociendo nuevas cosas o simplemente emocionarse por pequeños detalles.

El gato siguió calle abajo y llegaron a la calle principal, donde siempre pasaban grandes autos a todas horas, pero ahora sólo estaban ellos y un semáforo en rojo.
El menor perdió de vista al gato y Taehyung río.

—Mira el semáforo cambió a verde— dijo el pelirrojo caminando al centro de la calle.

Corrió después y se colocó en medio para después acostarse a la mitad de la calle vacía.
El peli negro entró en pánico pero recordó que era demasiado tarde como para que un auto pasara.

Corrió al lado de él y se recostaron con los brazos abiertos mirándose el uno al otro.

—Sabes que esto podría ser peligroso, ¿cierto?— dijo Jungkook sin despegar su mirada de aquellos ojos almendrados.

—Sip.

—Y sabes que podríamos morir.

—También lo sé, pero lo haríamos juntos, además estaría feliz de que mis últimos momentos fueran contigo.

El menor sé ruborizó y se acercó tomando el rostro de su novio, lo miró a los ojos y acarició sus mejillas que estaban siendo aplastadas por sus pulgares.
Se acercó y lo besó repetidamente hasta que ambos comenzaron a reír.

Taehyung se levantó de repente y comenzó a gritar por toda la calle.

—Tae shhh— decía mientras reía por el acto de su novio.

—¿Por qué? No estoy haciendo nada malo. Deberías intentarlo es genial— dijo para volver a gritar.

Jungkook sonrió y estaba un poco preocupado pero que más da, había estado tenso estos últimos días y tal vez esto ayude un poco.

Después de un rato ambos se encontraban corriendo y dando vueltas por la calle mientras gritaban como locos. Al cabo de unos minutos una señora abrió la puerta de su departamento y salió despavorida.
Taehyung tomó la mano de Jungkook y ambos corrieron juntos mientras reían.

La brisa fría penetraba en sus rostros haciendo que su cara y nariz estuvieran heladas, el viento pegaba fuerte, pero era soportable, sus pasos resonando por las calles cual tambores mientras corrían y sus sonrisas y carcajadas nerviosas hacían eco por todo el lugar.

Nunca había tenido una aventura de noche con alguien y que fuera tan especial.
Taehyung simplemente hacía todo mucho mejor, hasta el más mínimo detalle.

Siguieron caminando y llegaron cerca de una colina, donde había pasto remojado que hacía más frío el ambiente.
Subieron y ambos se sentaron al lado del otro.

La ciudad se veía hermosa, las luces de todos colores alumbraban todo y el cielo despejado resaltaba todos aquellos detalles.

Taehyung miró el rostro de su pequeño, estaba fascinado con lo que veía, sus labios entre abiertos y su nariz rosada resaltaban sus hermosos ojos enormes que solamente él poseía.
Verlo así, tan tierno y puro, hacía que quisiera llenarlo de besos todo el tiempo, pero se contuvo esta vez y solo sonrió mientras lo seguía observando.

—Jungkook... — cada vez que escuchaba su nombre salir de su voz grave le daba un escalofrío.

—¿Si?— lo hizo salir de su trance.

Taehyung dio un suspiro antes de hablar.

—Yo... He pensando bastante, qué será de nosotros en un futuro, digo, somos jóvenes, pero, sería genial envejecer juntos...

Jungkook no supo por qué ni como pero sus ojos se llenaron de agua, su novio no lo notó, pues él observaba la ciudad.

—... creo que yo no podría vivir sin ti, es más— río— no imagino un futuro en el que no estés... — y esa fue la gota que derramó el vaso.

Las lágrimas comenzaron a caer una por una en las mejillas del menor, no era tristeza ni mucho menos enojo, era felicidad lo que sentía, aquellas palabras pronunciadas hace segundos hicieron que su corazón diera vueltas y que se sintiera tibio y amado.

El mayor siguió hablando y no se había percatado de que su novio estaba llorando hasta que giró su cabeza un poco y lo vio, sonriendo.

—Ay bebé, ¿dije algo malo?, lo siento— dijo mientras lo acercaba a él y lo rodeaba con sus brazos.

—No, no, es solo que...— sorbió su nariz mientras estaba en su pecho—... me haces tan feliz, eres realmente mi felicidad Taehyung, no sé qué haría yo sin tí...

El peli rojo lo miró y sus lágrimas cayeron igual.

Se amaban. Se amaban como nadie lo ha hecho, y es que ambos ya estaban destinados el uno para el otro.

El mayor acariciaba el cabello de su pequeño y miraron las estrellas juntos, se recordaban cuánto se aman y siempre lo harían por el resto de sus vidas.

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Este capítulo va dedicado a kim_suga93 muchísimas gracias por leer linda💜

Y también agradezco a Tae por volverse a teñir el cabello de rojo, se ve asdjsjjdjdkskiqytssunsnd creo que eso lo explica todo.
Sin más que decir, muchas gracias por leer.
Y~💜