A veces la premisa de tenerme no es suficiente.
A veces la premura de perderme hace que mire sin juzgar, y que juzgue sin mirar, cuando miro sin realmente ver.
Porque a veces la soledad es la mejor compañía, y el silencio el mejor sonido.
Al igual que es un abrazo el mejor apoyo, y una mirada el mejor consejo. Y es que aveces, soy la única que se entiende, la única que se escucha, la única que no habla, la única que no se explica.
Y aún así, sigo buscando la razón de que mis recuerdos sigan atados a tus pupilas, de que mis retinas sigan encadenadas a tus labios, de que mis oídos siguen abiertos a tu voz, y de que mis lágrimas sigan marcadas con tu nombre.
Hablo en serio cuando te digo que no es como que me importe, que el sentimiento de amor ya no está contigo, y que lo único que puedo sentir hacia ti es tedio y decepción, no me molesta, acepto mis sentimientos sin realmente sentirlos, y sobre todo sin realmente juzgarlos.No me digas que no estamos hablando de roturas, que estamos hablando de sentires, o de pérdidas, porque si te digo que estoy perdidamente rota por sentir ¿qué me dices?
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No le pidas calor a la luna |Cartas para mi luna de hielo #1 (en edición) ©
PoesiaToma un rayo lunar, un papel de sonrisas y un cielo de curiosidad.