Fight me!

...and surrender me.

- Buenos días – dijo Taemin con una gran sonrisa al entrar a la sala de descanso de los médicos donde Kibum estaba sentado con una taza de café y un periódico –

- Así que la cita fue bien – dijo el mayor bajando el periódico, Taemin asintió con una sonrisa tímida - ¿Lo invitaste a tu departamento? – Kibum soltó una sonora carcajada cuando su amigo se atraganto con el café que acababa de beber - ¿Entonces? –

- Si – admitió Taemin entre dientes –

- Te dije que no necesitarías el abrigo para entrar en calor – dijo guiñándole un ojo –

- ¡Solo nos besamos! – exclamo Taemin para después maldecirse internamente ya que había caído en la trampa que Kibum le había tendido para sacarle más detalles –

- Puedo verlo – respondió Kibum burlón señalando un lugar en su cuello con lo cual Taemin cubrió dicho punto con la cara roja –

- Estúpido Minho... - susurro para si no lo suficientemente baja para que el otro no lo escuchara –

- Supongo que entonces cambiaras tu política de "Jamás me casare con un militar" – dijo Kibum cambiando su tono burlón por uno precavido y no le pasó desapercibida la forma en la que Taemin se tensó de pronto –

- No me estoy casando con él – fue la respuesta del menor antes de salir de la sala rumbo a su consultorio, Kibum no pudo más que soltar un suspiro –

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Taemin tenía una complicada relación con el ejército desde que su padre había sido militar y contrario a lo que muchos pudieran pensar no era la disciplina que su padre había puesto en el de niño lo que causaba esa aversión. Muy por el contrario Taemin estaba orgulloso de la forma en que había sido educado pues estaba seguro que su fuerte sentido del deber y de hacer lo correcto provenía de ello. Recordaba con cariño las veces que había visto a su padre con su uniforme llegando a casa después de un tiempo siempre con algún regalo, e incluso aquel sentimiento estaba presente al recordar como al lado de su padre limpiaba sus zapatos escolares mientras este hacia lo mismo con sus botas militares indicándole la forma correcta de hacerlo para que quedaran deslumbrantes.

Pero... un militar pasa poco tiempo en casa y está comprometido con su país antes que cualquier otra cosa.

Siendo niño era extraño que su padre asistiera a sus festivales escolares o graduaciones, a pesar de la fuerte figura paterna y de autoridad que era el hombre Taemin sentía que su madre era realmente quien lo había criado. No era que su padre los descuidara pero a veces no sabía equilibrar su vida militar con la familiar y aquello los afecto sobre todo cuando él llego a la edad en la que pudo notar lo terriblemente sola que a veces se sentía su madre. No quería decir de ninguna manera que su niñez no hubiera sido feliz pero la constante ausencia de su padre siempre estuvo ahí.

Con el paso de los años y después del retiro de su padre este supo compensarlo tanto a su madre como a él pero todo aquello había dejado una enseñanza a Taemin, jamás se casaría con un militar. Decisión algo extraña considerando que el mismo había entrado al ejército como médico pero pesar de ello se había mantenido fiel a esa resolución pese al tiempo que llevaba sirviendo en bases y las ocasionales citas que tenía con alguno que otro militar, nunca había salido con uno más que a un par de salidas pero algo dentro de sí le decía que Minho no sería igual, y eso lo aterraba más de lo que le gustaría admitir.

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- Adelante – dijo Taemin cuando escucho que tocaban a la puerta de su consultorio -