Nunca confíes en un gato

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-¡Oh! Eres tú, la persona que me faltó el respeto ayer-.

-Lo siento mucho, no me hagas daño-.

-Eso ya está en el pasado, no te haré nada-

-Qué alivio-.


-Dime ¿A dónde te diriges?-.

-¿Por qué quieres saber eso?-.

-Bueno, ¿Acaso no has escuchado que los gatos son curiosos?-.


-Voy a mi primera clase de Antimagia-.


-¿Anti magia? Qué interesante, sin embargo creo que te decepcionarás. Aquí no enseñan más que la teoría, no aprenderás nada práctico-.

-¿Es en serio?-.

-Si definitivamente-.


-En ese caso debo pensar bien si voy a tomar la materia o no-.


-Si te interesa yo te puedo enseñar anti magia, he visto muchas cosas en mi vida-.


Seni empezó a evaluar la proposición del gato negro.


"Mmmm, No creo que un gato del que no conozco nada me pueda enseñar algo, probablemente me está mintiendo y solo quiere tomarme el pelo"

-De seguro estás pensando que te estoy mintiendo, ¿No es así?-.

-¡Eh! ¡No! No estoy pensando eso-.

-No estoy seguro, mejor retiro mi oferta-.

-No espera, lo siento mucho por dudar. ¿Podrías enseñarme?-.


-Está bien. Ahora agáchate para que yo te diga algunos secretos de la anti magia-.

El joven se agachó como se le pidió y cuando estuvo al mismo nivel que el felino este le arañó la cara con un perfecto zarpazo, inmediatamente Seni se cubrió el rostro y se arrojó al suelo girando de un lado a otro.

-¡Mi rostro! ¡¿Por qué hiciste eso?! ¡Qué idiota fui al confiar en ti! ¡Esto arde!-.

-Bueno, ya tienes la mejor anti magia de todas, así que nos vemos-.

-¡Eres horrible!-.

-Sí, soy horrible. Gracias-.

Sin sentirse culpable el gato negro desapareció. Mientras Seni seguía lamentándose, una de sus compañeras le encontró y le habló.

-¿Estas bien?-.

Por entre las rendijas de sus dedos Seni observó a la señorita, se trataba de Vanessa Wartell.

-No, la verdad no. Un gato me arañó la cara-.

-Lo sé, lo vi hacerlo. Permíteme ayudarte- La señorita colocó su varita mágica frente al rostro de Seni y usó un conjuro- Curación menor-.Con la luz cálida que bañaba el rostro las heridas de Seni se cerraron inmediatamente y él sintió alivio.

-Muchas gracias-.

-De nada. Si estás por aquí probablemente estás dirigiendo a alguna clase ¿No es así?-.

-Estaba yendo a las clases de Anti magia-.

-Qué casualidad, yo también. ¿Te molesto si vamos juntas?-.

Walpurgisnacht ¿Por qué  se travistió para entrar a un colegio de magia?Where stories live. Discover now