Sovereign Of The Three Realms - Parte 1

CAP. 1 HIJO DEL EMPERADOR CELESTIAL, REENCARNACIÓN Y RENACIMIENTO

Jiang Chen sintió que su cerebro estaba hechos de papilla, como si estuviera en un sueño, pero esto se sintió mucho más real que eso. Cada centímetro de piel, cada hueso de su cuerpo gritaba en agonía.

“¿Estoy muerto? ¿Estoy sufriendo a través de los fuegos del purgatorio que arden en el infierno?” El primer instinto de Jiang Chen fue que estaba muerto, pero el tenue aliento en su cuerpo parecía recordarle lo contrario: que aún estaba vivo.

Después de saber quién, cuánto tiempo, Jiang Chen de repente forzó la vista, luchando, pero se encontró en un ataúd.

¿En un ataúd? Entonces, ¿estoy realmente muerto? Jiang Chen se deprimió.

“Qué risible. Yo, Jiang Chen, hijo del Emperador Celestial, nací con una constitución yin y, por lo tanto, no podía practicar el dao marcial. Incluso cuando el padre refinó la píldora Sol y Luna para que pudiera disfrutar de la vida mientras existan los cielos, todavía me convertí en la carga del padre y sucumbí a mi muerte cuando el cataclismo descendió de los cielos…”

“¿Eh? ¿Qué está pasando con mis meridianos? ¡¿Hay cierto qi fluyendo a través de ellos?! Es bastante débil… espera! ¡Esté… esté no es mi cuerpo, esté definitivamente no es mi cuerpo! Nací con una constitución yin, entonces, ¿cómo podría tener verdadero qi presente en mi cuerpo?”

“Y, si realmente estuviera muerto, ¿cómo podría haber verdadero qi fluyendo a través de mi cuerpo?” Era como si una sacudida eléctrica pasara por el cerebro de Jiang Chen mientras estaba en el ataúd. Al mismo tiempo, se dio cuenta de que el cuerpo que yacía en el ataúd no le pertenecía.

“Esto… ¿qué es esto? ¿De quién es este cuerpo?” Este descubrimiento inesperado le trajo sorpresa y alegría. Rápidamente descubrió algunos fragmentos de memoria en el cuerpo.

“¿El dueño de este cuerpo también fue nombrado Jiang Chen? ¿El hijo del duque de la provincia de Jiang Han en el Reino del Este? El nombre es correcto, ¡pero obviamente no soy yo! Soy el hijo del Todopoderoso Emperador Celestial. ¿Cómo me convertí en el descendiente de un reino tan mundano?” La mente de Jiang Chen estaba llena de preguntas.

“¿Realmente morí en el cataclismo? ¿Es esta la reencarnación referida en las leyendas? Los cielos fueron destrozados y la rueda de la vida destrozada… ¡Debí haber sido aniquilado en el cataclismo sin ninguna esperanza de viajar a lo largo de la rueda de la vida! Así que esto significa… ¿Realmente me he reencarnado?” Jiang Chen finalmente confirmó esta nueva realidad después de examinar los fragmentos de la conciencia pasada de Jiang Chen.

“Pensar que fui el exaltado hijo del Emperador Celestial en mi vida pasada, sin embargo, se me prohibió cultivar debido a mi constitución yin. Sin embargo, ahora que he reencarnado en el hijo del duque de un reino tan monótono, he ganado el potencial para entrenar… ¡Oh, la ironía!”

“Los cielos fueron destrozados y el orden se derrumbó… Yo, Jiang Chen, viví un millón de años en vano en mi vida pasada. Aunque morí con el sol y la luna, no pude ofrecer ninguna ayuda cuando llegó el cataclismo. Una constitución yin no puede entrenarse, y por lo tanto está condenada a estar siempre a merced de los demás. Mi destino fue como el de una mota de polvo flotante, que se disipa fácilmente cuando sopla el viento”.

Jiang Chen se volvió sombrío, perdido en sus pensamientos al pensar en el tratamiento que había sufrido en su vida pasada, y de su padre que había desarrollado la píldora Sol y Luna a un costo tan alto, para que el cuerpo mortal de su hijo pudiera disfrutar de la vida. Tanto como el sol y la luna.

¡Sabía que esta separación entre la vida y la muerte era posiblemente una despedida eterna!

A pesar de que había vivido un millón de años, aunque poseía una gran inteligencia, cuando pensaba en su padre, el Emperador Celestial, cuidaba de él con esmero, con las lágrimas todavía derramándose de sus ojos.