El juego de los hombres lobo (Yaoi Furry)

La Primera Noche.

El jardín estaba casi a oscuras, solo iluminado por farolas de aceite que se encontraban cerca de la mansión.
Sigma divisó una silueta en la penumbra, y se acercó corriendo al zorro que no paraba de mirar en todas direcciones en busca de algún rastro. Cuando el gato estuvo lo suficientemente cerca, el invitado se volvió hacia él aunque parecía algo decepcionado.
- Oh... Eres tú -Dijo sin demasiado ilusión-.
- ¿Que haces aquí fuera?
- Perseguir a ese loco. No puede haber ido muy lejos.
- ¿Y piensas hacerlo solo? Al menos lleva contigo algo con lo que poder ver el suelo sobre el que pisas.
- No tenía tiempo, debía ir tras él lo más rápido posible o se escaparía.
- Se fue hace unos 10 minutos... Pudo haber escapado en el tiempo en el que los sirvientes estuvieron liberandonos.
- Sí, tienes razón. Disculpame... No recuerdo tu nombre.
- Soy Sigma, llegué a esta isla casi al mismo tiempo que usted.
- Mi nombre es Alden, me acuerdo de tí.
- Lo sé, has sido un tema de conversación bastante recurrido esta noche.
- Lo suponía, los cotilleos suelen abundar en este tipo de sitios.
- ¿Es cierto que te reuniste con Cassandra?
- Sí, el único motivo de mi visita es que debía hablar urgentemente conmigo. De otra forma, nunca hubiera puesto un pie en esta isla.
- Entiendo como te sientes. Yo también soy un pez fuera del agua en esta isla.
- Asi que tampoco eres noble.
- ¿Tengo pinta de serlo? -Dijo señalando su ojo izquierdo-.
- ¿Por qué estás aquí entonces?
- Lady Boyle me encargó escribir su biografía, asi que de vez en cuando me invita a su isla a escribir.
- ¿Eres escritor?
- Soy periodista. La parte de escritor no es más que un pasatiempo. ¿Y tú, que haces aquí?
- No puedo confiar esa información, Lady Boyle me dijo que lo guardara en secreto. Y soy un hombre de palabra.
- ¿No es de malos modales hacer tantas preguntas y no responder a ninguna?
- Usted es el que vino a hablar conmigo en primer lugar, y siempre tuvo la opción de no contestarme.
- Esta bien, lo dejaré pasar. ¿Ha acabado de investigar Sherlock?
- Si yo fuera Holmes, ya hubiera descubierto al responsable de esto. Pero sí, he acabado de buscar por aquí.
- ¿Que estaba buscando en primer lugar?
- Algún tipo de rastro o pista sobre aquel hombre. Pero de momento no tengo nada.
- Bueno... No tiene sentido seguir investigando en la oscuridad. ¿Por qué no volvemos dentro? Puede volver a intentarlo mañana.
- ¿Sabes? Hay algo que sí me llama la atención. ¿Por qué ha venido a buscarme?
- ¿hmm?
- No nos conocemos, pero usted es el único que fue detrás de mí mientras que los demás se quedaban dentro. ¿Por qué?
- Fue... Algo parecido a un impulso. No le di demasiadas vueltas. Simplemente pensé que lo correcto era correr detrás de usted.
- ...
- Volvamos.
Alden aceptó y ambos volvieron al comedor. Muchos invitados habían abandonado la sala mientras ellos estaban fuera. Solo quedaban Lady y Lord Boyle acompañados por Miss violet.
- ¿Como se encuentra, Cassandra?
- Estoy bien, algo cansada. Me gustaría ir a mis aposentos a descansar.
- ¿Como puedes en una situación así, Madre? -Dijo Lord Lewis ayudando a Cassandra-.
- Es en situaciones críticas cuando hay que mantener la calma y ser racional. Es lo que siempre os he enseñado, Lewis. Toda vuestra vida os he preparado para situaciones como esta, y esto es la prueba final.
- ¿Tiene muchos enemigos, Lady Boyle? -Preguntó Alden sin ningún apuro por interrumpir la conversación-.
- Podríamos tener una conversación sobre todas las personas que querrían hacer esto y sus razones. Pero entonces estariamos despiertos hasta el alba.
- Lord Lewis, llevela a su habitación. Su madre necesita descansar. -Insistió Miss Violet-.
- Gracias querida... Y una cosa mas... Mr Alden.
- ¿Si?
- Lo que hablamos esta tarde... No creo que sea necesario dadas las circunstancias. Voy a morir esta noche después de todo.
- ¿Qué? ¡No diga eso, Cassandra! -Protestó la doctora-.
- No tiene por qué negar lo obvio. Si hay alguien en esta isla que puede ser el objetivo de un asesinato esos somos mis herederos y yo. No estoy asustada de morir, Miss Violet. He vivido una larga vida, el mundo seguirá girando después de mi muerte. Ahora, si me disculpan, voy a retirarme.