1

8 0 0
                                    

El día está nublado, no es nada que sorprenda en ese pequeño pueblo al norte de Europa. Los pájaros no cantan y el clima suele ser frío y cruel.

Jazmín se prepara como todas las mañanas para ir a su primer día de clases después de unas largas vacaciones de verano donde no hizo más que dormir, comer, ir al baño y visitar a su novio Daniel.

Baja a comer como de costumbre y se detiene en el umbral de la puerta al notar que su madre lleva puesto los lentes y una expresión de concentración total mientras escribe en su portátil, su padre prepara café con una expresión molesta y eso implica que ambos volvieron a discutir por el poco respeto que le tiene su madre a la fecha límite.

Decide pasar por un lado de ambos y prepararse unas tostadas tan comunes como el agua. Se sienta frente a su madre con el plato de tostadas untadas con mantequilla mientras su padre sirve el café.

-Buenos días Jazmín- dice su padre dejando una gran taza de café junto al plato del joven de piel acanalada.

-Buenos días- responde con una sonrisa mientras da un mordisco a su tostada.

-Me contaron que entraste en el equipo de fútbol del instituto, acaso ¿piensas reducir tu inteligencia a la de un troglodita prehistórico?- dice su madre sin apartar la vista de su portátil.

A pesar de que la señora Christian era un poco distraída e impuntual, pero siempre buscaba una forma de comunicarse con su pequeño Jazmín, él cual solo callo al escuchar aquella pregunta.

Jazmín término su desayuno y camino tranquilamente a su instituto que solo quedaba a unas cuadras de su casa por lo cual no usaba su auto para ir.

Llegó al instituto y vio a su novio Daniel junto a sus amigos, se acercó trotando hasta ellos y plantó un beso en los labios de su novio.

○●○●○●○●○●○●○●

Charlie se levantó con el décimo tintineo de su alarma y porque su hermana le grito en la entrada del oído para que se levantará.

Se alistó tan rápido como pudo y bajo a desayunar con su familia. Todos los miembros hicieron una oración agradeciendo lo que comerían y al terminar Charlie trago sin masticar.

Se despidió de sus padres y entro rápidamente en su auto, el instituto le quedaba a unos 15 minutos en auto y si suma los 15 minutos de retraso que llevaba no llegaría a tiempo a su primera clase.

Piso el acelerador a toda potencia y rogaba al creador no tener un accidente y que no lo detuvieran por ir a esa velocidad.

Llegó justamente cuando la campanilla sonó indicando el inicio de las clases. Entró rápidamente y vio lo que más odiaba. Jazmín besaba a Daniel.

Entró rápidamente tratando de ignorar aquella escena tan anormal y fue a su clase, donde no podría concentrarse ya que todas las compartía con Jazmín y en algunas se les unía Daniel los cuales no dudaban en dar una prueba pública de su "amor".

El profesor estaba en la puerta esperando que todos sus alumnos entrarán. Al estar todos en el aula empezó la clase donde no hacían más que hablar de cualquier cosa.

Como si nada raro sucediera, las clases pasaron hasta llegar a la última del día: Autoestima.

Jazmín y Charlie se encontraban ya sentados a metros de distancia del otro, uno por miedo a contagiarse de una enfermedad inexistente y el otro por simple apatía.

-Buenos días mis queridos alumnos- dice la profesora Smith con un tono de alegría mientras entras al aula.

Todos prestaron gran atención, era la clase favorita de todos, la profesora estaba un poco loca pero eso la volvía la clase más entretenida.

-Bueno antes de que suene la campanilla que ensordecedora que hay en este lugar les mandare una linda tarea- dice y todos abuchean esa idea, en el primer día de clase no es lo que te esperas-, no me importa si no les agrada pero aquí en este lindo escritorio dejaré una hoja con las parejas que se formarán para hacerla, me deben entregar a finales del siclo y vale el 70% de su nota- dice y sale a paso apresurado del aula.

La campanilla suena en cuanto la profesora pasa el umbral, todos se paran rápidamente exceptuando al enigmático Jazmín que espera en su asiento a que la multitud disminuya.

Charlie se acerca rápidamente al escritorio y busca su nombre, lo encuentra y no es lo que esperaba:

Jazmín Adams/Charlie Baker: La sociedad LGBT+ y los fetiches sexuales.

El joven Charlie no sabia que era lo que más le desagradaba, si el tema que le tocaba o la persona con la que haría el trabajo.

El día de clases acabo y podía ir a su casa a pensar con detalle lo que estaba pasando.

Jazmín veía como todos salían del aula y se levantó para ver que trabajo le tocaba.

Al leer lo que decía la hoja, solo tubo un problema, le tocó el mejor tema con la persona más casta que conoce.

-Esperaba que me tocará con tigo- dijo un poco triste mirando a Daniel que se dedicó a buscar en la hoja.

-En mi lugar te toco el ser más maravilloso del universo- dijo en tono de burla mientras salían del aula.

Ambos reían mientras salían tomados de la mano.

No es una enfermedadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora