Eldarya- La llegada de la Esperanza

Especial

(Incluyendo Navidad)

Pasaron aproximadamente dos semanas, Evelyn se había ganado un poco de confianza, solo que aunque ella no se diera cuenta, por las noches hacía bastante frío, era obvio… ese clima provenía de algún poder. Un poder que se había desaparecido hace años y ese poder estaba en ella.

Miiko estaba platicando con Leiftan, kero y Ykhar, el tema a discutir era el saber que era esa joven, por obvias razones necesitaban tenerla vigilada, esa tarea fue otorgada a Nevra desde el día en el que se manifestó aquel frío.

Por otro lado la joven Evelyn se encontraba en uno de los jardínes platicando con Karenn.

—Dime, ¿por qué tan decaída Evelyn? — preguntó la vampiresa sentada al lado de la pelinegra.

—Pues extraño la alegría de las fiestas de donde yo vengo— mencionó dando una suave sonrisa mirando al cielo. —La Navidad es lo más cercano, una época hermosa en mi opinión, el frío se hace presente en el invierno, todos decorando, la nieve cayendo, la gente por las calles cantanto villancicos… — ella suspira levemente pensativa dejándose caer en el césped, lo que no sabía era que eso le había dado una gran idea a su acompañante.
¿Por que no festejar la Navidad?, eso puso a pensar a Karenn, iría más tarde a comentarle de aquello a su hermano, tal vez así lograr algo.

—Bueno, no te deprimas, ¿por qué no vas con Ykhar, de seguro ella tiene algún libro con el cual puedas entretenerte— mencionó con alegría Karenn formulando un plan.

Era una gran idea, así que Evelyn le sonrió y se levantó de donde estaba agradeciendo, fue a la biblioteca y al no encontrar a la chica conejo pues empezó a buscarla.

Karenn enseguida salió disparada como un rayo a buscar a su hermano mayor, el cual estaba en la cantina hablando con los demás chicos.

—¡Nevra!—
Gritó para llamar su atención llegando a su lado con una amplia sonrisa.

—festejemos Navidad—
Se notaba alegre ante la idea de hacer eso, hasta que escuchó a los tres casi ahogándose con lo que estaban bebiendo.

—¿Qué es Navidad?— preguntó Nevra sin entender la petición de su hermana menor.

—Navidad es algo que Evelyn me contó, seguro habrá libros en la biblioteca de eso- dijo la joven con alegría.

—¿Por qué celebrar algo que hacen los humanos? — preguntó el peliazul sin comprender al igual que los otros dos.

—Yo me imaginé que sería algo lindo para Evelyn, ha estado aquí con nosotros todo el tiempo, siempre trata de ayudar aunque ustedes no se den cuenta porque la ignoran. Aparte tambien se notaba triste al saber que no celebraría Navidad…— mencionó Karenn.

El hermano mayor de la vampiresa suspira tapándose un poco más con la bufanda, últimamente el había estado viendo de lejos a la chica que era desconocida hace un tiempo, el no la ignoraba, más bien admiraba el bondadoso corazón de la chica, algo en el se había desarrollado, unos sentimientos confusos para él. —Está bien, yo ayudo—

Eso tomó por sorpresa a los demás, los cuales le miran impactados.

—¿Enserio?— preguntó ilusionada la menor que al ver a su hermano asentir gritó de emoción.

Al final no fue tan difícil, logró convencer a los tres chicos de ayudar y así también llegó la historia hasta los demás de la guardia para también ayudar.

Kero y Ykhar encontraron villancicos en libros, los cuales trataron de aprederse, no solo eso, también investigaron cada parte de la tradición para darle un lindo día y noche a la chica que tanto les trataba de ayudar aunque no fuera bienvenida completamente ahí.

Nevra en especial se quería disculpar, en un momento cuando ella era nueva por completo los de su guardia le habían tratado mal menos su hermana menor y el como jefe debía pedirle perdón.

Por otro lado la joven pelinegra se encontraba en la biblioteca sentada en una esquina leyendo, Yhkar le había dado permiso de estar ahí leyendo para así entretenerla aún más. Aquel libro que leía era uno sobre criaturas mitológicas de la tierra, también había anotaciones de la pelinaranja de cuales criaturas están en realidad extintas en Eldarya. Pasando cada hoja con delicadeza hasta detenerse en una parte de mitología japonesa.

—Yuki-onna…— susurró la chica más para ella misma, leyendo la descripción de la criatura en voz alta.

—la mujer de la nieve es un espíritu o yōkai encontrado en el folclore japonés.— pensativa observa la imagen del libro con la nota de Yhkar que decía que se habían extinguido.

—la Yuki-onna es representada como una mujer alta, hermosa, de largos cabellos, que se manifiesta en una noche nevada. Su piel es pálida o aún transparente o incluso de color morado, podría decirse que casi inhumana.— se observa curiosa la piel notando aquella palidez típica en ella y como sus venas se ven en sus brazos, pensando tal vez que era solo una coincidencia.

—Su color hace que se la confunda en paisajes nevados. A veces usa un kimono blanco, pero otras leyendas dicen que aparece desnuda recostada en la nieve. A pesar de su belleza inhumana, sus ojos pueden causar terror en los mortales.—

Permanecía ahí sentada sin dejar de leer, hasta que se hizo de noche, levantándose y guardando el libro donde se le había indicado. Caminando por la guardia se da cuenta de que nadie andaba por ahí, aunque escucha ruidos en la cantina, parada observa pensando si ir hasta que siente que alguien toca su hombro.

—Te estaba buscando Evelyn— ella volteó a ver encontrándose con la mirada del vampiro de la guardia sombra.

—¿Qué es lo que pasa Nevra— preguntó la pelinegra en calma, su mirada estaba fijada a la del chico, lo que provoca un ligero sonrojo.

—Principalmente… te quiero pedir perdón, por todo, pero bueno, ven. Todos te estamos esperando para cenar— mencionó el chico extendiendo su mano a la chica que sin entender mucho le tomó de la mano para seguirle a la cantina.

—¿Esperándome? — preguntó con curiosidad hasta ver que la cantina estaba decorada como si fuera aquella Navidad familiar que toda persona desea. Leiftan, Kero, Yhkar, Miiko, Karenn, muchos de los conocidos de Evelyn estaban ahí sonriéndole con tanta paz. —Chicos…—

—Fué idea de Karenn— dijo el vampiro sonriéndole a la joven la cual le volteó a ver con un brillo en los ojos soltando su mano. —Feliz Navidad Evelyn—

La pelinegra alegre abrazó al chico unos segundos para luego ir con los demás y abrazarles alegremente, se sentía como en casa.  La fiesta fue tranquila y linda para ser la primera vez de todos haciendo algo así, cantando y comiendo aunque fuera muy poco. Ver la sonrisa en el rostro de la chica lo valía, o eso pensaba aquel vampiro que le observaba de lejos con una tierna sonrisa, sabiendo que seguramente ella esta feliz.

Pasaron las horas y se fueron a dormir todos, en la madrugada el frío azotó a la guardia. Para la mañana siguiente había nieve por doquier, algo que emocionó a todos.

Cada niño jugando con la nieve al igual que los adultos, aunque era extraño ya que el día pasado hacía bastante calor, pero que más da ¿no?, la alegría les brinda esperanza.

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Perdón por la tardanza, entre que revisaba que quedara bien y todo el tiempo se fue y aún así siento que no quedó como esperaba. Por favor dénle mucho amor a esta historia que la hago con el corazón. ❤