dream person • verkwan

especial.

Narra Seungkwan.

abrí los ojos y la vista ante mi era hermosa.
los árboles estaban cubiertos de nieve. diciembre se acercaba. me hacia feliz. era como si calmaran mis acelerados sentimientos.

camine por el lugar. conozco este lugar. lo que significó y sigue significando.

las canchas de basketball. el aire frío del lugar. era tan relajante, era como si me estuviera diciendo que todo estaría bien. mi vida, mis pensamientos, mis sue...

"¡Seungkwannie!" escuche mi nombre. al voltear vi a un chico de cabello castaño, sonrisa sacada de un comercial de pasta de dientes y esos hermosos ojos color avellana. agitaba su mano saludándome mientras sus ojos se llenaban de brillo. aquel chico salió corriendo a hacia donde estaba yo.

al llegar junto a mi, me abrazo fuerte y me levanto del suelo. dándome vueltas comenzando a girar, sujetándome fuertemente. "¿donde estabas? te busque por todos lados. le pregunté a Seokmin pero estaba ocupado tomando leche de chocolate con..." antes de que pudiera decir algo más, bese a ese chico.

"¿y eso por que fue?" preguntó él.

"porque te amo. porque sigo sin creerme que estás aquí. que eres real, de carne y hueso. no solo parte de mi imaginación y de mis sueños."

"yo tampoco me la creo. pero es la realidad, nuestra realidad. tú no solo eras el chico de mis sueños, eras el de mi vida. eres todo lo que siempre quise. por más..."

"cursi." dije haciendo cara de asco.

"ni digas, Seungkwannie. que te encanta cuando hablo así."

"me encantas tu. así de simple."

"¿ahora quien es el cursi?" hablo Vernon alzando una ceja.

"shudu pú." dije en un puchero.

"es 'shut up', pero como lo dijiste tan tiernamente, lo dejare pasar."

"tonto. pero eres el tonto que más amo en todo el mundo." dije dejando un pequeño beso en los labios del chico de cabello castaño.

en eso, el cielo se tornó rojo. las nubes se acercaban y estas tornándose gris.

"¿Vernon? ¿que está pasando?" pero al bajar la vista hacia el chico vi que no era él. "Seungkwan..." esa mirada, esa sonrisa cínica.

era Mingyu. Mingyu era quien me estaba sujetando. "¿Mingyu? ¿que estás haciendo aquí?" dije intentándome safar del agarre del mayor. "por favor, bájame."

"¿cuando entenderás que eres solamente mío? Seungkwan, eras mi todo. lo dejé todo por ti..." Mingyu me apretaba con más fuerza, lastimándome. "¿por qué me olvidaste tan rápido? ¿por que eres tan cruel...?" sus ojos se tornaban rojos. era como cuando tomaba esas pastillas. 'necesitas que te pateen el trasero. ¿debería decirle a tu mamá con que tipo te metiste?"

"Mingyu, por favor... por favor déjame en paz. eres un monstruo..."

"nadie te va a salvar, Seungkwan. eres mío. ese americano aprendió a la mala que siempre lo fuiste. y no importa en sueños, siempre serás mío."

al decir eso, un rayo cayó al suelo alumbrando todo. dejándome ciego por unos segundos por fin pude ver lo que estaba enfrente mío.

Vernon estaba tirado en el piso, no se movía, no respiraba. grite su nombre con todas mis fuerzas pero el no se movía. sentía más los brazos de Mingyu aprendandome con fuerza lastimándome.

"¡Vernon!"

¿Seungkwannie?

"¡por favor! ¡Vernon!"

¡Seungkwan!

"¡Vernon!"

"¡Seungkwan, despierta!"

abrí los ojos.
estaba sudando, mi respiración y mi corazón latía rápidamente. sentía mi cuerpo temblar. pero al darme la vuelta...

"¿Seungkwan? ¿que pasó?" el chico de cabello castaño estaba acostado al lado mío, esos ojos color avellana aunque cansados pero preocupado me miraban.

"soñé que te perdía." solo pude decir eso.

el castaño suspiró y me abrazo acercándome a él. "solo fue un sueño, Seungkwannie. no son reales."

"¡¿no son reales?! claro que son reales. por ejemplo, tú fuiste uno..."

"fui, seungkwannie. ahora soy real, estoy al lado tuyo. tranquilo. duerme. porque ahora no importa ningún sueño. soy real, somos reales. ¿okay?" habló con tono suave el chico de ojos color avellana.

"tienes razón. perdón. ¿Vernon?"

"¿huh?"

"te amo..."

Vernon sonrió. colocando su mano sobre mi mejilla acercó mi rostro al suyo y beso dulcemente mis labios. "eres el chico de mis sueños, Seungkwannie."

ya no era un sueño. era verdad.

y por primera vez, fue más hermosa la realidad que el sueño en sí.