Capítulo 7

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                        Capítulo 7

Me senté un momento para recuperarme, aún no podía creer lo que había ocurrido. ¡Dios, parecía tan real!
Minutos más tarde llamé a Sarah, nos encontramos en su oficina y nos despedimos.

Ya habíamos despegado hace un par de horas, a juzgar por la vista, ya íbamos sobre el amazonas. Nos servimos un poco de whisky, fumábamos y reíamos, hasta que de pronto le dije a Hernán:

- ¡Te tengo una sorpresa, cómo en los viejos tiempos! -

En ese momento las dos azafatas comenzaron a bailar y quitarse una por una las prendas de su ropa.
Al instante que ambos levantábamos nuestros vasos y brindábamos a la salud.
Y mientras Hernán se carcajeaba de risa,
se nos acercó una chica a cada uno, nos comenzaron a bailar, se nos sentaban en las piernas, Maura, la sexi y puta azafata que me bailaba a mí, restregaba su trasero en mí ya, erecto miembro.
Hernán seguía riendo y entre trago y cigarrillo, solo gritaba:

- ¡QUÉ TIEMPOS AQUELLOS! -

Pero repentinamente algo en mí cambió, es como si otra persona se apoderara de mis sentidos.
Entre risa y risa, le dije a Hernán:

- Desde hace más de diez años que me follo a tu zorra -

Hernán me miró sorprendido, y me respondió:

- Andrés, sabes muy bien que nunca me importó que te acostaras con mi secretaria. -

Yo solo lo miré, y le dije:

- Hablo de la otra zorra, de tu mujer, Vinka -

Hernán me miró, se levantó y me dio una fuerte patada en el pecho, y mientras eso hacía me gritó:

- ¡AHORA SÍ QUÉ TE MATO HIJO DE PUTA! -

Con el golpe llegó a botarme del asiento. En ese momento las azafatas comenzaron a gritar que nos detuviéramos.
Cómo pude me levanté, Hernán ya me estaba lanzando un golpe de puño, pero logré esquivarlo, mientras yo le encestaba otro en su quijada, retrocedió un par de pasos, me lanzó otra patada que iba directo a la boca. Logré moverme un poco, y terminó golpeando mi clavícula izquierda, otra vez caí, y muy adolorido. Hernán se acercó a patearme mientras yo estaba en el suelo...

Mientras no paraba de gritar:
- ¡TE VOY A MATAR MALDITO! -

Y yo entre carcajadas solo le respondía:
- ¡AUN ASÍ, ME LA COGÍ! -

...En una de sus patadas, logré afirmarle la pierna, y tirarlo al suelo, las chicas seguían gritando como locas, y yo solo les decía:

- ¡CÁLLENSE ZORRAS, YA ME LAS VOY A COGER A USTEDES! -

Me levanté rápidamente, le dí una fuerte patada en el rostro, la sangre saltó a borbotones de su nariz y su boca, me fui hasta un pequeño compartimiento en el cual guardaba objetos personales, saqué una pistola 9 Mm. Las chicas estaban tan histéricas atendiendo a Hernán, que no lo notaron, me acerqué hasta la pequeña mesa, serví dos vasos más de whisky, me tomé uno al seco, agarré el otro vaso, me acerqué hasta donde Hernán, que para ese entonces las azafatas ya lo tenían de pie, pretendían encerrarlo en la cabina del capitán, para que ya no le hiciera más daño. Caminé rápidamente,, me paré frente a ellos, al tiempo que le lanzaba el whisky en la cara, le grité:

- ¡ESTE ES TU ÚLTIMO BRINDIS, MALDITO! -

Luego de eso, le di un tiro en la frente.
Antes que las azafatas comenzaran a gritar, hice lo mismo con ellas. Un único y limpio tiro en la cabeza a cada una.
Fui por otro vaso de alcohol, algo debía hacer, ya que al momento de aterrizar los de la cabina intentarían algo contra mí.
Me senté y prendí un cigarrillo, tomé un par más de copas, me levanté, llené un bolso con provisiones y implementos para sobrevivir, me fui hasta la cabina del capitán, golpeé, la puerta, se abrió, me paré al lado de ellos y les dije:

- ¡Señores, gracias por sus servicios. Este será su último viaje! -

Dicho esto, le di un tiro a cada uno, el avión comenzó a desestabilizarse y caer, fui por el bolso, me puse un paracaídas, abrí la escotilla y me lancé al vacío.

_______Sarah, dos días después_______

Estaba muy preocupada, no había sabido nada de Andrés, y había quedado de comunicarse conmigo apenas se instalara en el poblado, tal y como siempre lo había hecho.
Me senté a desayunar, Jaime apareció con la habitual bandeja de plata. En eso entró Félix con los periódicos en la mano, se paró frente a mí, y me dejó uno de ellos sobre la mesa, al momento que me decía:

- Lo siento, madame. -

Yo lo miré sorprendida, no sé de que hablaba, y con un movimiento de cabeza me indicó que leyera la portada.

"CINCO MUERTOS EN ACCIDENTE AÉREO"
El avión pertenecía al magnate de la tecnología, Andrés Meyer.

En horas de la madrugada fueron encontrados los restos del fuselaje del avión, perteneciente al magnate de nacionalidad chilena.
Los cuerpos de las víctimas aún no han sido identificados...

En ese preciso instante reventé en llanto, Félix se acercó a abrazarme y a consolarme. Luego de diez minutos de llanto desconsolado, sonó mi teléfono, como pude respondí, era el teniente Miguel Schwarz:

- ¡Sarah, no sé si estés enterada... -

No terminaba de decirme aquello, cuando exploté en llanto una vez más. Cómo pude balbucee un:
- Acabo de enterarme por el periódico. -

A lo que él respondió:

- !No hablo de eso, Sarah! -
- Y sé que no es el momento indicado, pero esto es grave.
Encontramos el puñal con el cual asesinaron a Pedro Abad, las pericias indicaron que las huellas que el arma tenía, pertenecen al hijo de puta de Andrés. Él es el asesino. -

En ese momento, mi mundo terminó de derrumbarse, mi visión se hizo borrosa, y de pronto, todo fue silencio...

Continuará...

Autor: David Véliz Laroze.
Libro: "Perversiones" (próximo lanzamiento)
© Derechos reservados, 2018.

¡Guarda silencio!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora