— Maldita sea.Ésa expresión fué la que salió de los bonitos labios de Claire mientras arrastraba sus pies hacia la sala de castigos.
Ella no sabe qué tuvo de malo defenderse de un profesor.
Pero la castigaron.
Y ahora sólo quiere lanzarse de un barranco sin piedad.
— Toc toc. —Dijo aburrida,en el marco de la puerta.
— Pase señorita Adams. —Hace un gesto con la mano,sin verla.— Tome asiento,saque su cuaderno y un lápiz. 300 veces "Debo comportarme con mis superiores."
— Que te follen. —Murmuró.
— ¿Disculpe? —Alzó una ceja,bajando su libro por unos momentos.
— Que qué divertido. —Rodó los ojos,tirando su mochila sin cuidado y sentándose abruptamente en una silla pegada a la ventana.
No le importó el castigo puesto que sabe que sus padres le ayudarán,así que tomó su lápiz grafito y comenzó a garabatear en su cuaderno.
Es horrible para ella estar en castigo,puesto que generalmente se la pasa sola en ésa aula.
Entonces,¿con quién hablaría?
Está a punto de ponerse a hablar sola de la aburrición,mientras hace música golpeando la goma de su lápiz con la esquina de el escritorio.
Su mundo gira en una vida llena de conversaciones orales,y se siente sin vida al estar sola.
No es dependiente de las personas,pero simplemente siempre quiere hablar.
Hablar,hablar,hablar.
Hablar.
Y,hablar.
Lo haría con ésa fea señora que "cuida" a los mal portados,pero es una amargada que sólo le encuentra gracia a sus libros eróticos.
Le miró con asco,viendo como ésta se mordía el labio obscenamente moviendo sus piernas entre sí ansiosa.
— Está bueno el coito.
El rostro de la vieja cambió de colores,en cuestión de segundos.
— Señorita Claire,¿a-a qué se refiere? Estoy leyendo sobre la naturaleza humana.
— Claro. Si "Tócame y sabrás." es sobre la naturaleza humana,me gustaría que me prima pequeña la leyese.
— ¡C-claro q—
— Que la leyese para ir entrenando como actriz porno.
La señora suspiró nerviosa,riendo cínicamente.
— Sólo me lo prestaron,yo no leo éso. Pfff. —Lo botó en una esquina del escritorio.
Claire se rió.
— Como digas,no es como si fuera a contarle a alguien. Sé que las señoras como usted sufren de una frustración sexual inmesa.
La señora la miró indignada ya a punto de insultarla. Claire sólo rió otra vez.
— Siga leyendo,ándele. Mire que es gracioso ver sus expresiones.
— Olvídelo. Mandaré a traer libros en la Biblioteca que sí me gustan. —Le miró frunciendo el ceño,tomando su celular.— Buenas. Porfavor,mándeme a un alumno para que me traiga 10 libros de la Biblioteca a el aula de castigos porfavor. Que sean de terror.
— Así como usted al leer ésas cochinadas. —Dice bajito.
— ¿Usted siempre es tan imprudente? —Dice bloqueando su celular.
— No soy imprudente,soy directa. —Se encogió de hombros,con una sonrisa.— Por éso a toooodo el mundo le caigo mal. —Asintió alzando ambas cejas.— Pero esque Señora Kang,en imprudencia sería otra que lée puercadas en un área de trabajo. Déjelo para casita,allí hasta se toca si quiere. Pero porfavor,no nos desgracie... —Mira a sus alrededores y se corrige.— No,no me desgracie a mí,con sus gestos repugnantes.
La Señora Kang estaba a punto de lanzarle un zapato,si no fuera porque un chico entró a el aula ajetreado con muchos libros apilados en sus brazos.
Dichos libros que se cayeron.
Y cuando se cayeron el chico por tratar de recorgerlos en el aire se terminó tropezando a punto de caerse.
— Oh Park... —Sonrió enternecida la señora.— ¿Porqué te mandaron a tí? —Se puso de pié ayudándolo a recoger los libros.— Si eres un pequeño distraído,lo—
— Dígale mejor que es torpe y tiene brazos de fideo,listo.
Y ésa señoras y señores,fué Claire Adams.
El chico sólo se acomodó los lentes,viéndola un momento con el ceño fruncido para así después sólo mirar a la Señora Kang preguntándole con la mirada si ya se podía ir.
— Ya cumpliste tu misión JiMin,gracias. —Le acarició la cabeza,y éste sólo sonrió algo forzado.—
— Oh Dios,asco. —Fingió arcadas.— Yo que tú,JiMin.. —Entre cerró los ojos,preguntándose si así se pronunciaba su nombre.— Me lavo el cabello. Ni te imaginas en dónde han pasado ésas manos.
JiMin le miró con una cara de “Ni lo digas” y Claire rió,porque su rostro de espanto significa que también sabe a qué se refiere.
Después él se fué,no sin antes devolverle el gesto de despedida con las manos a Claire.
— Muy guapo.
— ¿Disculpe,Señorita Claire?
— Quite las formalidades Kang,llámeme Claire.
— ¿Disculpe,Claire? —Le hizo caso,repitiendo.
— Esque no entiendo cómo nunca miré a "JiMin". ¡Está guapo! —Exclamó inocente.
— Así es...
— Y también está torpe,pero es lo de menos. —Hizo un mohín.— ¿Es mudo?
— Nunca me ha dirigido la palabra,pero cuando le pregunto si es mudo el sólo niega o me ignora. Pasa en sus propio mundo,no parece interesado en nada ni nadie. Ni siquiera lo he visto hacer sonidos con su garganta,aveces parece autista aunque no lo sea. Es más inteligente que todos los profesores juntos,y más sano que cualquiera.
— ¿Y tiene amigos o es el nerd?
— No lo he visto mucho en los recreos,pero por lo que veo pasa solo leyendo. No le agradan mucho las cercanías y ni habla así que lo terminan dejando solo como tanto quiere.
— Así como a mí pero de tanto hablar...
— Algo así. —Comenzó a leer,ignorando a la rubia que se encontraba pensando.
— Interesante... —Sonrió.
Ya sabe a quién molestar.
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Con molestar se refirió a hablar y hablar.
Bye.
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𝐒𝐢𝐥𝐞𝐧𝐜𝐞.
Fiksi PenggemarPark JiMin, el chico más callado de la Universidad. Claire, la chica más hablona de la Universidad. ¿Cómo crees que funcionarían estando juntos en el mismo lugar? Éso mismo se lo preguntó la chica al darse cuenta que gracias a un error que cometió l...