Sombras del pasado

Capitulo VI

1 año después… 16 de Noviembre de 2008 Los Angeles California…

Jen y yo ya habían formalizado su relación, viviendo en unión libre, un anillo de promesa llevaban en sus dedos, de esa manera se recordarían que la vida les habia dado un nuevo giro y que ahora con sus dos pequeños tendrían que hacer lo mejor para ellos, aradhya tiene 1 año 5 meses, su hermano Chris de 3 meses y 8 días de edad ahora con los ojos de su madre, cabello rubio con rizos, si así es, Jennifer habia quedado embarazada, no quiso abortar de nuevo, si no lo hizo con aradhya, ¿Por qué iba a hacerlo con su segundo hijo? Ellos no tienen la culpa y ambos llegaron en el momento correcto, su familia, si así es su familia, la que tanto añoraba finalmente estaba haciendo presencia de manera correcta en su vida, sus hermanos la visitan más seguido, los padres de josh de igual manera, sus tíos van por temporadas a ayudarlos ya que ahora son dos y Jennifer y josh abrieron un nuevo restaurante, esta vez en la parte baja de Los Angeles, para niños que habían sido sufrido violencia, abusos y toda la mierda que ella también habia pasado, ella se dedica a ese lugar y ahora con un trabajo, necesita que le cuiden a sus pequeños, no los deja en guardería así que tuvieron que contratar una niñera, Rita les ayuda con los dos y los atiende, mientras Jen se ocupa del comedor comunitario, ella sabe lo que se siente estar en la posición de todas aquellas personas, comparten sus experiencias y les dan una mejor vida, se asean, se cuidan y se protegen entre ellos, algunos hasta llegaron a encontrar el amor en ese lugar, su objetivo es ese, que las personas recuerden las cosas bellas y la razón de porque están aquí, que las sombras del pasado no los atormenten más y que vivan en sana paz, que sientan la libertad y que aprendan a disfrutar cada momento feliz, así como ella con su familia, con sus hijos…

Hoy va a salir a cenar con Josh, la noche anterior habían hablado y ella ya está lista para entregarse completamente al hombre que la ayudo, al hombre al que le debe su felicidad y su vida, así que esta noche la celebrarían especialmente por un nuevo futuro y progreso, desde hace 1 mes está haciendo uso de métodos antifecundativos, para no quedar embarazada, ya con dos pequeños de menos de dos años, es bastante atareado y un tercero, no vendría mal pero no es el momento, quieren disfrutar más de sus hijos y ya luego decidirán tener otro, aunque aún no lo saben si llegará ese momento, ya que con sus hijos están felices, Jennifer usa un vestido especial que le regalo él el día de su cumpleaños 18 y si apenas tiene 18 años, 2 hijos y todo esto, sucedió a tan corta edad, debido a las circunstancias, ambos se preparan y se van a otro restaurant, la cena pasa con tranquilidad, hablando de temas triviales, como la alimentación de Chris, como les fue en su día, el clima, en fin, cuando llega el momento de irse, no se dirigen a su casa, la lleva a una casa de campo a las afueras de la ciudad y ella no tenía ni la menor idea, así que la toma por sorpresa y llegan al lugar, entran y se quitan sus abrigos, los dejan en el perchero y rápidamente Josh toma a Jen por la cintura, lo haría de la manera en que ella se lo permitiese…

-me dices si algo te incomoda, para detenerme –no pudo articular una palabra, un escalofrió recorrió su columna vertebral y llegó hasta su vulva, sus pezones se erectaron y el vestido comenzó a molestarle, josh le bajo el cierre con tanta lentitud que sintió que solo con el roce de sus manos se estaba sintiendo más excitada y deseaba más, le desabotono la camisa a josh y la aventó fuera, llegaron al cuarto y tenía unas cuantas velas, rosas, las favoritas de josh y ahora sus favoritas, la espalda marcada de josh hizo que se mojara, sus pectorales, sus brazos, todo de él la hacía excitarse más y más, conforme se fueron quitando las prendas, josh besaba cada parte del cuerpo, la hacía sentirse deseada y no una basura, la hacía sentirse amada y eso la hacía estremecerse más, josh puso dos dedos en su vulva y comenzó a masajear su clítoris, sintió oleadas de placer llegando hasta el más mínimo vello en su cuerpo y se erizo, levanto las caderas para que josh la hiciera estremecerse más, dejo de hacerlo y ahora ella lo torturaría, beso cada parte de su cuerpo y cuando llego a su pene, vio lo erecto y excitado que estaba, pequeñas gotas de líquido preseminal comenzaban a salir de él y después ella se subió encima de josh, fue entrando poco a poco a su vagina, fue moviendo sus caderas poco a poco y tuvo un orgasmo, no quiso que josh lo tuviera todavía, así que se detuvo y ahora él estaba encima de ella, la penetró y con rapidez llegó a su segundo orgasmo, en el tercero ambos llegaron al orgasmo, sintió una oleada de calor dentro de sí, se habia venido dentro y no le preocupaba, estaba con el implante y no pasaría nada, esa noche lo hicieron, no una, ni dos, ni tres, cuatro veces, hasta saciarse completamente el uno del otro, tuvieron otro encuentro cuando se bañaron y un último antes de volver a casa con sus hijos, no le habia hecho daño y eso la hacía sonreír, josh lo hacía con tanta pasión, pero al mismo tiempo respetando los límites de ella y lo que toleraba, así que eso la hizo sentir aún más cómoda estando con él, ese día fue tan estupendo que cuando llegaron a casa, encontraron a Rita dormida en el sillón junto con los niños, el bebé dormía en su porta bebé y lo cargó, abrió sus ojos y observo a su mamá, ahora tiene un brillo, una luz, así que le sonrió y después hizo pucheros…