Pequeña amiga, mi compañera, no te imaginas cuánto tengo guardado para ti.
Cada momento de mi vida, los pequeños y los grandes, son todos tuyos.
Cada sonrisa, cada lágrima, las comparto contigo.
Cada vez que vuelvo a casa, o siempre que me voy, pienso en cómo estarás sin mí.Porque, mi pequeña amiga, mi compañera, este trocito de corazón ya te pertenece desde que pude tenerte entre mis brazos por primera vez. Y sé que nadie lo cuidará mejor que tú, Maggie.

ESTÁS LEYENDO
Las Cosas Que Vi Para Callar
PoesíaTodas las cosas que me gustaría haber dicho en algún momento y que, por miedo, desgana o prudencia, no dije. Ver, oír y callar.