Destino.

7

Temo estaba en su habitación llorando cuando Ari entró en la habitación.

Aristóteles: no puedes seguir así chico.

Temo: y que se supone que tengo que hacer?

Aristóteles: primero levantarte de tu cama.- Temo hizo lo que Ari le dijo-.

Temo: y lo siguiente?

Aristóteles: tienes en tu habitación algo para escuchar música muy fuerte?

Temo: si.

Aristóteles: genial, donde esta?.- Temo sacó el parlante y Ari lo conecto con su celular y puso musica-.

Temo: y esto como se supone que va a alegrar mi vida?

Aristóteles: ya verás.- comenzó a bailar al rededor de Temo- vamos sigue mis pasos.

Temo: yo no bailo.

Aristóteles: ahora aprenderás.- tomó de las manos a Temo y lo obligó a bailar-.

Temo: esto es ridículo, que vergüenza.- comenzó a reir-.

Aristóteles: te mueves bien Temo, no tienes porque sentir vergüenza.

Después de un tiempo Temo se tiró a su cama cansado y Ari hizo lo mismo, los dos chicos quedaron observandose.

Temo: gracias.

Aristóteles: no tienes porque agradecer hago esto porque quiero verte feliz siempre.- se acercó más al chico de tal forma que podía sentir la respiración de Temo en su cara-.

Temo: yo ya no creo en el amor.

Aristóteles: el primer amor es para darse cuenta de que puedes sentir algo por alguien y nunca lo olvidas pero el segundo amor te hace volver a creer de nuevo y te da fortalezas para seguir amando.-se acercó más a Temo y rozaron sus narices-.

Temo: yo aún amo a Diego.

Aristóteles: yo puedo hacer que lo olvides, sólo tienes que arriesgarte.

Temo: entonces me arriesgar.- los dos chicos se besaron, Aristóteles nunca había sentido esto antes pero era como estar volando y viendo lo más maravillosos del mundo, los labios del chico al cual besaba eran los mejores que había probado y esperaba nunca apartarse de el; Temo al besar a Ari se sintió raro no había besado a otro chico que no fuera Diego pero este besó le gustaba y le hubiera gustado seguir besandolo pero necesitaba respirar por lo que se aparto de el-.

Aristóteles: eso estuvo muy bueno.- dijo sonriendo-.

Temo: bastante.

Aristóteles: quieres otro?, porque yo lo deseo.- Temo sonrió-.

Temo: me encantaría.- los dos chicos se iban a besar pero Sebastián los interrumpió-.

Sebastián: pueden por favor bajar el volumen a su música?

Temo: lo siento, ahora le bajo.

Aristóteles: Sebas porque no te unes a nuestro baile?, a ti te gusta bailar.- Lupita y Julio entraron-.

Julio: necesitamos estudiar y ustedes hacen demasiado ruido.

Aristóteles: ustedes necesitan distraerse están demasiado tensos así que vamos a bailar todos.- comenzó a bailar-.

Julio: eres ridículo chico.

Lupita: Ari tiene razón Julio.- comenzó a bailar con Temo-.

Aristóteles: vamos Julio y Sebas no se nieguen al ritmo.- tomó las manos de los dos-.

Axel al llegar a la casa escucho la música que provenía de la habitación de Temo al subir vió que todos estaban bailando juntos, vio que su hermano estaba muy feliz junto a las calcomanías y eso sí era un milagro.

Axel: son unos ridículos.- grito riendo-.

Aristóteles: ven a bailar estamos en una fiesta.

Axel: sabes muy bien que tengo dos pies izquierdos.

Temo: vamos Axel esto es muy divertido.

Lupita: a una dama no le puedes negar un baile.- le dio la mano a Axel para bailar-.

Pancho y Susana al llegar a la casa vieron la escena de sus hijos bailando felices y eso les encantó nunca se comportaban así, no se toleraban pero   por ese instante estaban todos juntos como la familia que debían ser.

Pancho: el único que sabe bailar de ustedes es Aristóteles.- dijo riendo, al verlo todos dejaron de bailar y Temo bajo el volumen de la música-.

Susana: por qué pararon?, se veían muy bien todos juntos.

Axel: yo debo ir a descansar porque mañana tengo mucho trabajo.- se fue de la habitación-.

Julio: Lupita y yo debemos ir a estudiar.

Sebastián: yo también tengo que estudiar.- los tres chicos se fueron-.

Pancho: todos se van porque saben que yo bailo mejor que ellos y no querían quedar en vergüenza.

Temo: exacto.

Pancho: Temo supe lo que pasó con Diego así que si necesitas conversar yo estoy aquí para ti.

Temo: gracias papancho pero estoy bien.- Pancho y Susana se fueron de la habitación-.

Aristóteles: eso estuvo bueno.

Temo: si.- sonrió a fuerzas-.

Aristóteles: que pasó ahora?.- se acercó a Temo-.

Temo: es Diego.

Aristóteles: ya lo olvidaras.

Temo: y si no lo hago nunca?

Aristóteles: me tienes a mi para olvidarlo, créeme que con suerte después te acordaras de su nombre.- besó a Temo, pero este se aparto de inmediato-.

Temo: no creo que sea correcto, no quiero lastimarte yo sigo sintiendo muchas cosas por el.

Aristóteles: no me importa salir lastimado con tal de sentir tus labios otra vez.- besó nuevamente a Temo- tu me gustas mucho.- mintió al menos eso es lo que creia-.

Temo: tu también  me gustas, me llamaste la atención desde que te vi la primera vez.

Aristóteles: entonces los dos tuvimos esa conexión cuando nos vimos la primera vez.

Temo: yo te vi antes, en una foto que me mostró Sebas.

Aristóteles: te guste en una foto, imagínate como te llegarás a enamorar de mi cuando empiece mi conquista.

Temo: estas loco.

Aristóteles: te gustaría salir a otro lugar?

Temo: como una cita?

Aristóteles: no como una sino que una cita.

Temo: esta bien, voy a cambiarme eso sí, me gusta ir bien a mis citas.

Aristóteles: ya te ves bien así pero si quieres cambiarte no me quejo.

Temo: enserio crees que me veo bien así?, está es mi ropa de tristeza por ende es la más fea que tengo.

Aristóteles: ropa de tristeza?, no sabía que existía ese tipo de ropa.

Temo: es que cuando me siento triste me pongo la ropa fea y lloro por todo.

Aristóteles: ten por seguro que cuando estés conmigo nunca tendrás que ocupar esa la ropa de tristeza.

Temo: eso espero.