Estudio cual estratega la mierda entre tu estética de uñas.
Secas. Magulladas.
Irritadas. Hinchadas.
Sangrantes. InexistentesAnalizo tal que conservador el carmín barato que deplorable aumenta tus labios.
Insolentes. Ostentosos
Agrietados. Mojados
Pegajosos. Fracturados.Examino como elitista la distorsión realista que trazan tu ojos sobre una raya.
Torcida. Corrida.
Empañada. Borrada.
Desganada. Arrastrada.Indago así fuera confesor las satánicas señas condenando tu cuello.
Pavorosas. Entumecidas.
Mordidas. Arañadas.
Abultadas. Levantadas.Escudriño mismo al ajeno los jirones nihilistas mentalizados en enfriar tu cuerpo.
Quemados. Manchados.
Inservibles. Hirientes.
Testigos. Perdidos.Tanteo siendo manca tu ser bajo mi mirada, revisando minuciosa tu silueta desbordada.
Temblorosa. Escuálida.
Histérica. Pálida.
Flaqueante. Babeante.Pero no hubo palabras. No hubo juicio. No hubo sentencia.
Todos morimos esa noche.Tu pureza feneció robaba y torturada.
Su nobleza se extinguió engullando tu fe.
La libertad expiró tras el baile del demonio.
Tu voz pereció eterna posterior a un ''no''.
Mi yo era un destrozo ahora consecuente del peor exponente. Estaba claro; no era un violador y un violado, era mi podrido acto el convicto del pecado.Cuarto fragmento localizado del poemario.
__________________________
ESTÁS LEYENDO
Los poemas que perdí en aquel Boulevard
Poetry''No consiste en escribir lo que uno siente, sino sentir lo que uno escribe'' - Zophia Menz, 2018 En el mayor de los sinsentidos, reside la coherencia. Aunque la oración no resulte del todo lógica, sirve para introducir el concepto al que vas a enfr...