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Estar todo el día sonriendo, recibiendo y atendiendo es cansado, digo me duele la mandíbula de "sonreír" todo el día y ver hombres elegantes mujeres y niños, de verdad si podría describir el peor día de mi vida sería esté, me duelen los pies de estar parada en recepción recibiendo a cualquier persona con al menos un bolso más costoso qué un riñón y si hablamos de el bolso, éso es lo de menos, todo el maldito hotel olía a fragancia de Carolina Herrera y éso fue el detonante de mi paciencia, nose cómo la gente usa o se coloca demasiada fragancia, tipo si no se bañan no es mi culpa, pero no exageren tanto, uno no tiene porqué oler sus empalagosos perfumes.

Rodeó los ojos por milésima vez y me acomodó mi "uniforme" qué simplemente era unos pantalones, camisa de vestir, corbata y un saco color azul marino al igual qué el pantalón y justo en mi pecho, bueno a lo qué hago llamar "pecho", mi pequeña pero significante placa.

Di un vistazo a mi celular, 10 para las 12, solté un suspiro y caminé por los pasillos del hotel verificando por última vez qué todo estuviera en orden, ya estába exhausta, toda la semana había salido temprano 8 o 9 de la noche incluso 9:30 pero Seok-jin tendría una junta con quién sabe, y no podría cubrir cuándo me fuera, así qué me quedaría hasta las 12:00, ya casi todos en el lugar se habían ido solo quedaba yo y solamente yo, bueno también están aquéllas personas que están en los cuartos del hotel pero si lo veo desde mi punto de vista solo estoy yo.

Bajé de las escaleras con cuidado ya qué me encontraba en el último piso del hotel y me asomé a ver la vista que el hotel ofrecía durante la noche, era realmente hermoso, Busan podría llegar a ser una ciudad estresante durante el día, la gente, la contaminación, el ruido, ya mencioné la gente?, bueno hay demasiada gente pero eso no quita lo hermoso que es Busan de noche, las luces de los edificios y de algunas tiendas le daban el toque especial, cerré los ojos y me recoste en la ventana.

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-Oh Jimin-Ah!, eres el mejor!-dijo la rubia colocándose en el regazo del más alto-.

De verdad?-miró ala "pequeña" rubia en su regazo y soltó una pequeña risa burlona-.

-Sí, oh jimin oppa!, vamos a pasarla bien tu y yo sí?-dijo tratando de sonar "dulce y tierna" dando caricias en su entrepierna para lograr qué el mayor accediera-.

-Ahh-soltó un suspiró espérame aquí, sí?-separó rápido el cuerpo de la menor de su regazo y sé fue dejándola sola, el de verdad solo busca escaparse de aquella mocosa insolente con nombre "Jisoo" y con reconocimiento de puta, zorra y interesada.

-Pero oppa!-interrumpió los pasos del más grande sosteniendolo del brazo tratando que él regresará a ella.

-Hey jisoo, puedes irte con alguien más, no tengo ganas-miró de reojo ala rubia, estaba enfadada con él, lo sabía, cada que se negaba a tener relaciones con ella, se enojaba y ponía una expresión en su rostro de mal humor éso hablaba por si solo.

-¿Qué?, Jimin no puedes andar rechazandome todos los días, algún día tienes que caer, no te hagas el difícil, tu y yo sabemos que quieres lo mismo que yo-lo miró con una cara pícara tratando de no volver a enojarse con el peli negro por haberla rechazado nuevamente-.

-Pff bueno, pero solo un rato, tienes que aprovechar, no todos los días tienes el privilegio de acostarte con alguien como yo-tomó su cintura y la llevó a directo al ascensor, fuera de todo el ruido que emitía el hotel desde su llegada hace unos cuantos minutos junto con más invitados, exacto, el gran Park jimin había "invadido" uno de los tantos hoteles de su madre, chicas y chicos se encontraban en la planta de abajo dándose "muestras de afecto", a el por desgracia se le había pegado Jisoo una de tantas chicas qué  tenía a su merced, Jisoo era una zorra, lo sabía, sí, pero sólo estába jugando con ella, se la pasaba todos los días insistiendo tener relaciones con el pero el todos los días la rechazaba, sabía que jisoo no era tonta y trataba de sacar de él nada más qué dinero, cómo cualquier otra.

¡Affective !|ᴶⁱᵐⁱⁿ ʸ ᴶᵉᵒⁿᵍʸᵉᵒⁿ ♡PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora