Una decicion

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A la mañana siguiente Jack apenado se acerco a Laila quien llevaba un par de libros y libretas en sus brazos, entonces trato de tomar sus libros para ayudarla, pero ella solo se alejo

-Alejare de mi Jack, no te me vuelvas a acercar jamas. Dijo Laila mientras le pasaba por un lado evitándolo.
Llego la tarde de clases y Jack tomo esa decisión por fin. Se levanto y pidió permiso al profesor para salir al baño, el cual le autorizo. Saliendo entonces del aula no dudo y le marco a Joey.

-¡IDIOTA! Estuve marcandote todo el día por que no... Respondió Joey despues de ser interrumpido por Jack.

-Agan el pacto. Contesto Jack frío.

-¿Estas seguro Jack?. Pregunto Joey.

-muy seguro. Respondió Jack.

-Bien, consigue traerla al almacén hoy antes de las 12. Dijo Joey para después colgar.
Fue entonces que llego al salón y lo primero que miro al entrar fue la mirada de Laila, esa mirada tan encendida y llena de dulzura. Llego la hora del receso y Jack se encontraba como al inicio de clases, solo en una esquina del patio, fue entonces que Laila se acerco a el, y con una ha brazo cálido derribo la malteada de Jack.
-La-Laila. Dijo Jack un poco confundido. ¿Qué... Qué pasa?

-Perdoname por lo que dije. Respondió Laila asustada. Pero es que yo no, no yo no quería involucrarme contigo, eres... Un practicante del diablo... Y yo te. En ese momento fue interrumpida por Jack.

-yo voy a cuidarte, voy a protegerte Laila de todo y de todos. Respondió Jack acariciando su mejilla. Por que tu... Me gustas Laila, ¡me gustas!

-Jack... .Dijo Laila respondiendo a Jack. La razón por la que me acerque a ti aquel día fue por que... Tu me gustaste desde el instante en que llegaste al aula, tu me... Fue interrumpida por los labios de Jack.

-te amo Laila. Dijo Jack mirándola a los ojos y juntando sus frentes.
Jack había olvidado completamente lo que había echo antes de que ella se retractara. Al salir del instituto a Jack lo esperaban, su mente lo atormentaba, no encontraba una manera fácil de salir de esa.

-Joey. Dijo Jack asustado. Dejarlo ya ella y yo...

-¿somos novios?.Susurro Laila.

-no... . Le susurro Jack

Laila tomando el brazo derecho de Jack asustada le pidió salir de allí con la voz mas tierna y asustadiza que hay.

-Jack. Dice Laila susurrando. Sacame de aquí, estos tipos... Están asustandome, no quiero problemas jack.

-Joey, basta ella y yo solo somos amigo. Deja la tranquila. Replico Jack mirando a Joey.

-¿Crees qué esto es un juego Jack?. Pregunto Joey molesto, y en un chasqueo de dedos apuntó a Laila, en eso corrienton un par de tipos acercándose a ella. Jack se interpuso evitando que los tipos la tocaran. Inicio una pelea, pero sin darse cuenta Jack, Joey había tomado a Laila, fue entonces que Jack supo que todo había sido planeado, en lo se distraía fácilmente, pero no le quedaba alternativa. Joey con fuerza metía a Laila al auto quien se negaba a entrar e irse con el, mientras Jack peleaba con los dos tipo, Joey al conseguir que Laila estuviese dentro chasqueo tres veces los dedos y los tipos se dispersaron, haciendo que Jack se distrajera unos segundos, fue entonces que Joey arranco el auto tan fuerte como pudo, y Jack mirando como se llevabavan a Laila delante de sus narices.
Jack no se detuvo y corrió como pudo persiguiendo el auto, pero fue inútil, bastaron segundos para que el auto se perdiera entre las calles, se lamentaba entonces preguntándose el como era posible que el se enamorara de una chica en cuestión de segundos, pues no pasa un día en el que Jack no pensara en ella mucho menos horas. Cada cosa que hacia le recordaba a ella, desde vestirse hasta bañarse.
Sin perder la esperanza corrió. Corrió, corrió y corrió, para llegar al almacén donde las juntas semanales de la secta se llevaban a cabo, pero para cuando llego, ya era demasiado tarde. Jack llego derrapando y mirando la misma escena que la de aquel pequeño en su primer asistencia en ese lugar, solo que ella no tenia marcas, ningún rasguño, Jack sin pensarlo dos veces salto para entrar en la estrella, pero fue inútil, el campo de fuerza estaba activado, y la estrella se encontraba en un color negro, un negro obscuro, tan obscuro que el simple echo de mirarala podía dejarte ciego, sin importarle, Jack golpeo el campo con las fuerzas mas seguras que tenia, pero fue inútil, Jack miro el acto y el escenario de todo lo que pasaba, y se lamentaba, se sentía impotente y estúpido al no poder evitar que se la arrebatasen de las manos, lloro, pidió, suplicó pero nadir le tomaba en cuenta.
Laila acostada en medio de la estrella lloraba y miraba los esfuerzos que Jack realizaba para sacarla, no peor es que no podía gritar, pues su boca estaba cubierta con trapo demasiado grueso.

-¡¡¡¡Laila!!!!. Gritaba Jack del otro lado del campo.

Mientras Laila solo le quedaba llorar y esperar lo peor, en ese momento Laila fue levantada, levantada en en aire, laila asustada no dejaba de moverse, hasta que de la nada quedo paralizada en el aire, sus ojos se tornaron blancos, un blanco casi transparente y brillante, fue entonces que Jack se dio cuenta que ella ya no seria la misma...

Entre el cielo y el infiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora