GORDA ADOLESCENTE [EDITANDO]

-Capítulo 2-

Mierda, ¡sí se burló de mí!

Mientras mantenía la sonrisa burlona se levantó y se fue del lugar. Mi dignidad se fue del suelo al infierno, la razón por la que sentía mi cuerpo arder de la vergüenza, me levanté como si no tuviera alma e hice como si nada hubiera pasado, volteé a todos lados y el chico había desaparecido.

Chico odioso.

Me senté en la banca y me aguanté las ganas de gritar de vergüenza.

Estuve haciendo ejercicios lentos de respiración y recibí un mensaje de mi mamá avisándome que la reunión había terminado. Eso fue tan rápido.

Me dirigí a dónde vi por última vez a mi mamá y de nuevo estaba ella con la señora de antes platicando y vi como ambas intercambiaban sus celulares para escribir sus números.

Entonces observo que al lado de la señora estaba un chico, ambos estaban de espaldas.

Esperen... creo que lo he visto.

Camino un poco y finalmente reconozco al chico.

¡Es el odioso!

Abrí aún más mis ojos, sorprendida y un poco avergonzada.

-Ven -habló mi mamá mirándome.

Niego avergonzada pero ya es tarde porque la señora Marie y el chico guapodioso voltearon y me miraron.

¡Otra vez está sonriendo y burlándose de mi!

De nuevo noté que el chico sonreía de una manera sutil dándome a entender que se estaba burlando al acordarse de mi caída.

Me acerco con un poco de vergüenza.

-Mira, él es el hijo de Marie, Axel parece que será tu compañero -me dice mi mamá presentándome al chico.

¡¿Compañero?! ¡¿Qué?!

-Hey... -saludo tratando de parecer casual.

Mi mamá me dio una mirada extrañada. Lo sé soy una chica rara.

El chico sólo levantó su hermosa cara en forma de saludo, quiero corregir; su maldita cara.

-Ella es mi hija Brooklyn, por si necesitas cualquier cosa puedes preguntar -dice mi mamá.

¿Con permiso de quién?

-Gracias -responde Axel.

¡Pero qué hermosa voz!

Quiero decir; que voz tan castrosa.

-Bueno, Marie, ya tiene mi número hay que ponernos de acuerdo para salir un día a tomar un café-Dijo mi mamá tan sonriente.

Bien, no hay nada de malo ya que se consiguió una nueva amiga, espero que no sea tan unida porque tendré que soportar ver al chico guapo, quiero decir feo.

-Claro y usted tiene el mío, nos vemos pronto ya que tenemos unas cosas pendientes por hacer -dijo despidiéndose de beso en la mejilla de mi mamá y de mí, Axel sólo movió su mano en despedida.

Adiós, te irá mejor lejos de mí. Mocoso guapodioso.

Lo observo alejarse.

Wow que espalda...

Aunque lo quería ver más no podía quedarme por más tiempo, mi madre y yo salimos de la escuela.

Ya cuando estábamos en el auto, me puse el cinturón de seguridad.

-No puedo creer, Marie tiene los mismos gustos que yo -dijo mi mamá, emocionada.