Airplanes

Capítulo siete

A la mañana siguiente me desperté más tarde que los últimos dos días porque Alyssa y yo decidimos que hoy no saldríamos a correr, además que ayer nos dormimos a las dos y media de la mañana y estaba cansado.

Salí del cuarto y me dirigí al baño para darme una buena ducha. Aún estaba muerto de sueño y podría seguir durmiendo durante todo el día si me lo propusiese pero rápidamente recordé que era sábado, mi primer sábado el Londres después de tanto tiempo y saldríamos los chicos de fiesta. Eso sí que me hizo animarme y se me paso todo el cansancio de un segundo a otro. Salí del baño, ya vestido silbando una canción y baje las escaleras para ir a la cocina, cuando entré Alyssa y Zayn ya estaban desayunando.

Buenos días – dije entrando.

Buenos días – dijeron los dos hermanos a la vez, pero cuando entré tuve que frotarme varias veces los ojos pensando en si de verdad me había duchado bien o necesitaba otra ducha refrescante. Alyssa estaba con una vestimenta un tanto provocativa, donde enseñaba más carne de la que estaba permitido ver a un mejor amigo de su hermano.

¿No vas a desayunar? – me preguntó Zayn al verme parado en la puerta de la cocina.

Eh… si, si - dije – ya voy –me senté. Desayunamos los tres en silencio. Hasta que Alyssa acabó su desayuno, se levantó y se fue hacía las escaleras, todo ello seguido por mi mirada que no se apartaba ni para pestañear, recorrí todo su cuerpo con mi mirada, pensando en las piernas tan bonitas que tenía… espera ¿Qué? ¿en qué diablos estaba pensando?

¿Tú también piensas que debería comprarse un pijama como es debido? – dijo Zayn mirando hacia donde había desaparecido su hermana.

¿Ehh? – dije saliendo de mi trance – eh sí, si cómprala un... ¿un qué?

Un pijama Harry, un pijama nuevo – me dijo Zayn - ¿Dónde tienes puesta la cabeza?

Donde voy a tener la cabeza, pues aquí Zayn, aquí – le dije – y claro un pijama nuevo estaría bien - dije levantándome de la mesa.

Es que no sé qué afición tiene con dormir con camisetas y pantalones diminutos.

No me había dado cuenta – mentí – pero si quieres cómprala uno – dije saliendo de la cocina

¿A dónde vas? – me preguntó Zayn.

A dar una vuelta – le dije mientras abría la puerta – necesito que me dé un poco el aire – dije para mí en bajo y salí.

Comencé a andar por las calles casi vacías. Pensando en todo y a la vez en nada. Pensando en que si había pensado así en Alyssa era porque era hombre y todo hombre que ve una mujer guapa pensaría así y además si le añadimos que tengo novia, que está a miles de kilómetros y que no puedo estar con ella todo resultaba muy normal. Llegué a la conclusión de que todo estaba como siempre y que lo que necesita era escuchar la voz de mi prometida para calmarme un poco, esto de estar lejos de ella comenzaba a hacerse un poco difícil y eso que solo había pasado una semana de estos tres meses que pasaría aquí de vacaciones. Llegué lo antes posible a mi cuarto y cogí mi móvil para marcar el número de mi novia.

¿Sí? – se oyó desde el otro lado de la línea.

Whitney, amor – la dije.

Harry, cariño ¿cómo estás?

Echándote de menos – la dije y era verdad.

Oh, yo también Harry, ¿qué tal todo por allí?

Genial, aunque a Zayn todavía no le han dado las vacaciones, pero hoy nos vamos los todos los chicos como en los viejos tiempos.

Eso es genial cariño – me dijo – pásalo bien y no bebas mucho

Sabes que no cariño, ¿tú qué tal allí? – pregunté

Bien, pero todo está muy aburrido por aquí sin ti – me dijo – te echo de menos Harry

Y yo a ti, mucho – la dije – tengo que colgar amor, hablamos otro día

Vale, te quiero.

Y yo a ti Whitney – colgué.

El resto del día pasó de lo más normal, Zayn y yo pasamos por fin más tiempo juntos, viendo los deportes, bebiendo cervezas y jugando a la Play. Hasta que llegó la hora de prepararnos para salir. Salí de la ducha y dejé que entrará Zayn en ella. Entré en mi habitación, me cambié y me puse la ropa de salir. Empecé a removerme los rizos frente al espejo cuando llamaron a mi puerta.

Harry, Harry – oí susurros al otro lado de la puerta - ¿Puedo pasar? – seguía diciendo Alyssa en bajo.

Sí, pasa – la dije sin saber porque hablaba así de bajo.

Entró rápidamente cerrando la puerta tras de sí y apoyando su espalda en la puerta. Me quedé sin habla cuando la vi dentro de mi habitación solo con un conjunto de encaje negro.

¿Qué?... ¿Qué?..¿qué haces así? – dije sin dejar de mirarla

Necesito tu ayuda Harry – me dijo – tú que eres hombre, ¿cuál crees que te pondría más? ¿Este que llevo puesto o este otro? – dijo sacando una percha detrás de ella donde descansaba otro conjunto de ropa interior rojo.

¿Por qué me preguntas a mí? – le dije casi suplicando para que no me torturara así.

Ya te lo he dicho Harry, porque eres hombre, de verdad que necesito tu ayuda, necesito sorprender enserio a Matt que estaba un poco enfadado – dijo – y solo te tengo a ti, que quieres ¿Qué se lo pregunté a Zayn? No me dejaría salir de casa hasta que cumpliera los 40.

¡NO! A Zayn no, está claro, a no ser que quieras matarle de un infarto… - dije

¿Y…? – dijo ella – dime ¿Cuál de los dos te pondría más? Es importante para mí Harry, sé sincero.

El... el negro – dije casi sin pensar – si sin duda el negro.

Iiiiiiih gracias Harry – dijo emocionada saliendo de mi cuarto como si nada.

…Dios… - me dejé caer sobre mi cama sin que la imagen de Alyssa en ropa interior se fuera de mi cabeza.

Zayn y yo ya estábamos listos para salir pero decidimos cenar antes de salir de casa. Alyssa estaba como si nada viendo la televisión en el salón con una bata puesta. Sabía perfectamente que debajo de esa bata estaba perfectamente vestida para salir en cuanto saliéramos por esa puerta.

Alys, nos vamos ya – dijo Zayn a su hermana – pórtate bien, llegaremos sobre las 5 o así.

Si – dijo ella sonriéndonos - pasároslo bien.

¿Has oído no? – la dije mientras Zayn iba hacia la puerta – a las 5 de la mañana estamos aquí – la dije para que no se la olvidara la hora en la que llegaríamos a casa.

Si, aquí os espero – me dijo guiñándome el ojo haciéndome saber que lo había pillado

¿Nos vamos Harry? – me dijo Zayn desde la puerta.

Si – dije y los dos salimos dejando dentro a Alyssa, pero no por mucho más tiempo.

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¡¡Hola!! Traigo nuevo capítulo y sé que no tengo escusa, lo sé lo sé. Solo puedo decir que es verano y apenas he parado en casa ni un día y ahora que tengo unos días de relax en casa puedo pasarme y subir. Subiré mañana otro o quizás dos o tres por el retraso y la espera que os he hecho pasar, lo siento mucho.