Un días más para ser héroe

Capítulo 2

El detective suspiró y finalizó saliendo de la sala, allí Jessica se mantuvo quieta, dado que se encontraba esposada, tenía su rostro postrado junto a la mesa sobre ambas manos, aún tenía en su mente la escena de aquel asesinato, la cual le recordó sucesos de su pasado, secuelas que aún se mantenían firme y aunque intentara olvidarlas se mantenían firmes. Se mantuvo así unos 30 minutos aproximadamente hasta sentir como la puerta se abría nuevamente, allí entraron un par de policías junto a Jeryn, la cual no tenía un rostro muy alegré, tomó asiento en la silla que estaba a mi frente.

Jeryn:¡Muy bien Jessica!, sales de una y entras en otra -dijo abriendo una carpeta para luego ver a los policías- necesito privacidad con mi cliente.
Jessica:-ve a los policías dejar la sala y alza la vista hasta Jeri- es parte del oficio, qué te digo.
Jeryn:Tú oficio te encerrará de por vida tras unas rejas o te matará, y sabes qué, no estaré ahí para ver suceder eso.
Jessica:¿Vienes a sacarme de esta pocilga o darme sermones?, porqué si así lo es; los pondré en donde no me importa, es decir tu maldito trasero, Jeryn -dijo con una leve sonrisa sarcástica y disgustada-.
Jeryn:-se pone de pies apoyando sus manos sobre el escritorio-Jessica no soy tu maldita esclava, la cual llamas cuando te pones en líos y pretendes que siempre este a tu maldito servicio, tengo asuntos importantes.
Jessica:Toma tus malditos asuntos y vayansen a la mierda. ¿Mucho mejor?.
Jeryn:-suspiro tomando la carpeta para comenzar a salir hasta la salida- Veamos si algún incompetente del Estado sea capaz de sacarte de este lío -sale de la sala-.
Jessica:-golpea el piso con sus pies- ¡imbécil!.

Después que salió el silencio había reinado toda la sala nuevamente hasta volver a sentir el ruido de la puerta que le incorporó, allí oyó la voz irritante de alguien conocido y que no esperaba reencontrarse nuevamente tras lo que había sucedido entre ellos y los demás. Alzó la vista para verificar el dueño de aquella voz y para su mala suerte era la de Matt Murdock, ella suspiro, mientras el mismo se adentraba a la sala con su bastón hasta que llegó al escritorio, se le notó algo nervioso, sacó sus gafas dejándolas sobre el escritorio y junto a ellas su bastón el cual acababa de doblegar, para finalmente sentarse y abrir su carpeta.

Jessica:Todos los que abren la misma carpeta salen disgustados de la sala.
Matt:-río alzando su cabeza-Jones, yo no soy "todos".
Jessica:Quién diría que el ciego con orejas nocturnas tenga ego.
Matt:-ríe tras su comentario-¿Me puedes decir qué sucedió?.
Jessica:--Puedes leerlo, lo dice en esa carpeta y ya se lo he dicho a todo maldito que pasa por esa estúpida puerta.
Matt:-hace un gesto por su comentario-aún no llego a leer.
Jessica:Pe...rdón, me olvido.
Matt:Tranquila.
Jessica:Pues los imbéciles y malnacidos que se creen justicieros y que ayudan esta mierda de sociedad -dice viendo a las cámaras de seguridad de la sala- creen que yo asesiné a esas dos personas.
Matt:No tienen evidencia suficiente para retenerte -dice haciendo una seña con su manos para que ambos policías les saquen sus esposas- gracias.
Jessica:¿Así de fácil?.
Matt:-ríe- deberás mantenerte en la ciudad, y tendrás a los agentes en tus pies.
Jessica:Dejame ver si no tengo un viaje planeado a las afueras -hace gesto pensativo- por el momento no...Estoy acostumbrada tener esa clasea de moscas metidas en mi mierda y jodiendo mi maldito trasero.