Pasaron los días y mi madre seguía empeorando con el paso del tiempo, su situación empezaba a ser critica, pronto tendría que enfrentarse a las primeras transfusiones de sangre, lo cual no era nada fácil.
Ella poco a poco iría perdiendo su habla y su movilidad. Pensar en esto no era muy cómodo y me seguía resignando a que pudiera pasar, pero tarde o temprano la realidad simplemente me afrontaría y me preguntaría, porque le había estado huyendo.
Una noche estaba sentada al lado de mi mama masajeando sus pies muy suavemente y acariciando su cabello como solía hacer literalmente, todo el tiempo, "se había vuelto mi mundo, se había apoderado de mis pensamientos, simplemente era mi todo, mi razón para llegar a casa y no querer despegarme ni por un segundo de esa maravillosa mujer que se aferraba a la vida e iba a ganar esa batalla contra ella".
Mientras ella dormía estuve a su lado, por si tal vez despertaba o me necesitaba. Veía su rostro y simplemente no me cansaba de hacerlo; Ella despertó con un fuerte dolor en su abdomen, el cual poco a poco fue incrementándole de dolor, por lo cual me dijo que le avisara a mi abuela. Mi madre casi que gemía de dolor, la familia actuaba como si ya estuviera acostumbrada a ver estas escenas y más que verlas, vivir estas situaciones. "No es fácil ver como la persona que amas, sufre como si nunca lo hubiese hecho, ver como todos hablan de ella, como si se tratase de un problema que todos tienen que solucionar, como si ya estuvieran cansados de lidiar con esto".
Ella no se aguantaba el dolor, decía que no podía soportarlo, por lo cual decidimos llevarla al hospital.
Llegamos y aunque la sala estaba vacía solo dos personas como máximo podían entrar a esperar, siquiera se podía entrar a verla. Todos afuera comentaban sobre ella mientras yo sentada en el suelo miraba por el vidrio de la puerta, como mi abuela hablaba con mi hermana, con cara de preocupación, mirándome continuamente, como si algo hubiese o fuera a pasar, de lo cual yo no me pudiese enterar.
pasadas las 12:00am mientras la familia estaba un poco más calmada e incluso riendo para romper el hielo, yo seguía ahí sentada esperando a que salieran a dar información, con la esperanza de que tal vez pudiese verla por lo menos por unos minutos.
Mi abuela logro salir de allí y hablar con la doctora para que mi hermano y yo pudiésemos entrar a verla por un corto lapso de tiempo. Yo sin dudarlo me para rápidamente y seguía las ordenes de la doctora quien no decía por dónde debíamos ir. Cuando la vi en la camilla, corrí donde ella casi abalanzándome sobre ella, tenía frió, fue una de las primeras cosas que me dijo, me sentí aliviada solo de verla hablar, Le pedía mi hermano que nos dejara un momento solas, que tenía algo que decirle en privado, le conté algo muy personal a lo cual no me respondió mucho, pero me sentí muy satisfecha al saber que ya se lo había dicho.
Se podría decir que esta fue mi primera y realsensación que viví y sentí que mi madre moriría, estuve al lado suyo todo eltiempo, vi como la situación empeoraba, vi como era sacada de la casa con muchoesfuerzo, debido a su acelerada perdida de movilidad, que cada vez amenazabacon más presión y tanto ella como nosotros, sin saber cómo responder a eso. Pero ahí estaba ella, una vez mas siendo victoriosa en otro batalla, en estos retos tan difíciles que le daba su vida, intentando llevar esa calma que tal vez no duraría mucho.
YOU ARE READING
MI VIDA
Short Storyrelata la vida de una joven que a o largo de la historia cuenta la difícil situación que atraviesa al enterarse de que su madre padece cáncer