Necesito mucho más de ti.

Capítulo 1

-Pabli, no te ayudaré con él. - Respondí

- ¿Pero porque eres tan mala? - suspiro indignado - Li cariño, en serio me gusta y juro que será la última vez que te pido que me ayudes con alguno de tus conocidos, pero es que solo míralo es un churro delicioso.

- Lo sé, pero no me voy a arriesgar a que dentro de un par de semanas ya te hayas aburrido y encuentres otra nueva "mitad" como cada mes. - Dije

- Leath no seas dura, lo amaré, lo cuidaré y solo suplicaré que me dé duro por mi...

- ¡Para asqueroso! No quiero saber más, está bien te ayudaré pero sabes que te va a costar mucho eso. - Él soltó un grito en ese momento y empezó a dar saltitos como niño con nuevo juguete.

- ¡Paulino para! Me estás mareando - el me miró con carita burlona se acercó a mí y me dió un beso en mi mejilla
- Eres la mejor- dijo - pero su gesto cambio y me dió una mirada desafiante, había caído en cuenta de como lo llamé y odiaba que dijera su nombre, yo solo reí.

Ese chico era mi mejor amigo, lo conocía desde que tenía más o menos 12 años, todos lo molestaban en la escuela por su preferencia sexual, cosa que a mí no me importaba, yo siempre había sido de carácter fuerte y sabía cómo defenderme gracias al tío Bob que me enseñó unas buenas llaves, desde entonces Pabli y yo no nos habíamos vuelto a separar, el tiempo corrió de manera rápida y en un abrir y cerrar de ojos ya habían pasado 12 años más, vivía con amigo en un apartamento bien acondicionado donde ambos éramos muy felices.

Mi estado sentimental actualmente no era el mejor, tenía aproximadamente 6 meses de haber dejado a mi ex pareja ya que era una relación demasiado tóxica, gracias a todos los santos logré darla por terminada, de lo contrario no se qué sería de mi. Estuve con Adrián más o menos dos años los cuales viví engañada toda la relación al tiempo me enteré que mientras estábamos el recorría a mil viejas más. No es nada lindo enterarse que eres el juguete después que todo el mundo ya lo supo y sí, a mí me pasó.

*Flashback*

- Amor, ¿te gustaría salir esta noche?- dije, pero Adrián me respondió con una expresión desanimada, como si con el solo preguntar ya le habría arruinado la noche.

- No bebé, pensé que saldríamos separados, tú con tus amigos y yo con los míos.

- Nene, pero si nunca me dedicas el tiempo suficiente y las veces que salimos tiene que ser a las afueras de la ciudad, de verdad que me está cansando este tema - respondí pero él me miró de mala manera.

- ¡Ya quedé con mis amigos Leath, deja el maldito show! - se alteró a lo que yo asentí. No me gustaba pelear con el, de veras estaba enamorada, desbloquee el móvil y le marqué a Pabli quien después de dos tonos respondió.

- ¡Amorrrr! Ya voy en camino para la casa, ¿Que necesitas? - dijo tras descolgar

- Quería saber si tenías planes para hoy,  es decir... no se yo... quiero salir- dije sin ganas, y tartamudeando 

- ¿Y Adrián? No, déjame adivinar, ¡se va con los amigos! Como siempre. - En mi cara se notaba lo triste que era el escuchar eso pues mi amigo tenía mucha razón, di gracias a Dios porque él no estaba de frente para ver lo mucho que me había afectado, a lo que él siguió - No te mereces a un cabrón así, pero no te preocupes iremos a club's Hawai, ya te  llego hermosa, bye.- colgué.

***
- No pensé que este club estaría cerrado hoy pero no te preocupes eso no arruinará nada, vamos a Jon Ron, siempre hay buen ambiente allí. - yo asentí sinceramente no estaba de todo ánimo pero tampoco quería que mi mejor amigo se sintiera mal.

Al entrar había buen ambiente y nos encaminamos a una mesa donde estaban algunos amigos más, saludamos y pedimos varios tragos, de repente mis ojos se enfocan en la pista, y ahí está el, Adrián, besando a una chica salvajemente como si estuvieran justo en privado, tocaba su tracero de manera brutal y si que me ardió la sangre, Pabli miró hacia donde yo lo hacía, quedé en shock, me pare y le toque el hombro a Adrián quien solo hizo una mueca de espera y al voltear por mi incistenca le planto la cachetada de su vida, el no lo puede creer, yo solo cojo a mi mejor amigo de la mano y nos vamos a la casa, Miles de llamadas de Adrián, treinta textos que no pensé revisar, yo tirada en el sofá en los brazos de mi mi guapo amigo, llorando. 
En ese instante el timbre de la puerta sonó y Pabli se encaminó abrir, Adrián estaba allí.

- Mi amor perdón, tenemos que hablar. - dijo, ¡Ja! Tan cínico.

-No idiota, me tengo que morir, no hablar contigo,¡ largate!. - salió de mi boca esas palabras con un dolor fuerte en mi pecho.

- Déjame explicarte, las cosas no son así.- salió de su boca y yo reí a carcajadas

 - ¡ENTONCES COMO SON! ¡Oh! No me digas ¿TE SEDUJO? No me hagas reír y largate maldito mentiroso. - Noté rabia en su mirada y acto seguido el levanto su mano hacia mi para cachetearme y yo solo cerré los ojos esperando el impacto, al no sentir nada abro mis ojos de golpe y encuentro a Adrián con la nariz rota, ¡Pabli le había pegado!.

*Fin del flashback*