Capítulo 2

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- Li. - Pabli me habló - ponte más bella de lo que ya estás, porque esta noche toca ¡FIESTA!- hizo énfasis en esa última palabra con voz chillona.

- Por supuesto amor, pero por favor ya deja de gritar, romperás mis tímpanos un día de estos - el río.

*Pabli*

Leath era mi mejor amiga desde siempre, jamás había tenido una y al conocerla pude ser yo mismo, no necesitaba de tapujos ni nada de eso, su familia me apreciaba mucho aunque realmente no era una familia numerosa, al cabo de terminar los estudios decidimos comprar un apartamento para los dos y, trasladarnos debido al trabajo, ella era fotógrafa profesional de una revista de modas y eventos importantes y yo ejercía en una empresa reconocida a nivel internacional de moda y diseño, de la cuál era propietario, Li siempre fue una trigueña sensacional, pelo largo, cintura pequeña, cuerpo perfecto, y carácter de mierda, ¡Ja! ¿Que más quieres en una mujer? Una tipa demasiado independiente, decidida y con una gran personalidad. Esta mañana la había invitado a un club y lo más impresionante fue que no rechazó mi propuesta, ya que desde que decidió dejar todo quieto con el idiota de Adrián han sido pocas las veces que hemos salido, este siempre fue un bobo con ella, jamás la sacaba y cuando lo hacía andaba escondiéndose del mundo como si le avergonzara y no entendí jamás el porqué, si me gustarán las mujeres obviamente iría por ella como un perro caliente y más si de tratase de alguien como Leath.

***
Leath.

No tenía muchas ganas de salir, sin embargo ya le había hecho muchos desplantes a mi mejor amigo, Adrián ya no merecía mi sufrimiento ni mi luto, y debo decir que me dió muy duro olvidarme de la escoria esa, había decidido que mi vida tomaría nuevo rumbo *Nadie es malo, con el tiempo te conviertes* aún era temprano eran aproximadamente las cinco de la tarde por lo que me encamine a mi cuarto a ver qué ropa usaría esta noche, salí de mis pensamientos cuando mi teléfono vibró, era un mensaje.

De: Perro infiel
Oye, ¿Podemos hablar? No te alcanzas a imaginar la falta que me has hecho,te extraño, soy un idiota, deseo verte.

No respondí y no me sorprendió, desde que lo dejé me escribía constantemente, me recosté en la cama y me quedé profunda. Abrí mis ojos de golpe al escuchar gritos

- ¡LEATH LUGO MARULANDA! ¡QUE HACES DORMIDA AÚN! ¡¿ACASO CREES QUE TE DEMORAS MEDIA HORA EN ARREGLARTE? ¡SON LAS OCHO, PÁRATE! - Golpeaba fuerte, abro la puerta para encontrar a Pabli con cara de pocos amigos, me reí y le saque mi dedo corazón.

-¡No me jodas! ¡Cállate!- El me miró indignado y pasó a mi cuarto. - que tanto alboroto, hombres para gritar y tú, ah olvidaba que tú de lo mencionado, poco.

- Métete a bañar, yo escogeré tu ropa. - le hice caso, siempre confío en el cuando de alistarme se trata, abrí la llave y me adentre no si antes amarrar mi cabello y ponerme un gorro termico ya que lo había alisado en la mañana, me aplique jabón líquido con olor a jazmín y lave bien mi cuerpo, tome una toalla, cepille mis dientes y salí del baño, en mi cama ya estaba el atuendo que usaría.

- Ahí está tu ropa, cambiate y no pongas peros, yo me pondré algo - dijo mi guapura. Había escogido un vestido de encaje color hueso, tenía un escote profundo y sexy en la parte de mis senos y era muy ajustado a mi cuerpo, coloque mi ropa interior, seguido mi vestido, tacones y solté mi cabello y realmente me veía bien, pasé al maquillaje, lo hice sutil, rimel, polvo, un poco de sombra mezclada clara encima de mis ojos y adornando una perfecta línea de gato, en los labios aplique un fuerte y quemado tono rojo, me mire al espejo, PERFECTA, tome mi bolso, mi móvil y ví la hora 10:17 pm hora perfecta para irnos, al salir de la habitación mi amigo me da un repaso.

- ¡Perra que hermosa estás! - sonreí

- ¡Basta!- dije moviendo mi mano en tono de burla - ¡también estás hecho un divo mi amor! Si que conseguirás tipos - dije.

- Solo quiero a uno - yo solo reí - Por ahora- dijo y volvimos a reír.

*Por otro lado, Liam.*
- No pana, no quiero salir hoy - respondí.

- No seas aguafiestas te acabas de enterar que tú vieja te pone los cachos con otro man y tras de eso no le quieres reclamar, no quieres salir, ¡No me jodas bro! - y sí hacia pocos minutos en donde el hermano de mi mejor amigo Cris me había enviado unas fotos de Mariana, la mujer que creí amar entrando con otro a un motel, no sabía qué hacer tenía que pensar con la cabeza fría, no me podía estar sucediendo esto.

- Sabes qué, tienes razón, Cris, no debería respetar a quien no me respeta - jamás le había fallado y nunca le había faltado a nuestro compromiso pero no me quedaría a pensar en cómo se la comia otro, le dije a mi amigo que me esperara y en media hora ya estábamos en camino al club.

Llegamos a la barra y pedimos dos cervezas para empezar, nos sentamos en uno de los bancos y mis ojos se perdieron en la pista, en ella estaba la mujer más hermosa que pude ver, unas curvas perfectas, que se le marcaban por su ajustado vestido, bailaba y meneaba sus caderas al son de la música, Cris fijo la mirada justo donde yo la tenía y mordió su labio.

- Uff que viejas, mira esa rubia.- dijo mi amigo, yo jamás pensé que ese día todo cambiaría, en ese momento solo buscaba quien bajara mi erección.

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⏰ Última actualización: Feb 14, 2021 ⏰

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