Steve gimió; Su cabeza entera se sentía como si estuviera en llamas. Lo último que pudo recordar fue poner a Toni en su cama y luego sentarse en la silla junto a ella. Ahora que realmente lo pensó, supuso que debía haberse quedado dormido allí. Sin embargo, eso no explicaba por qué ahora se encontraba tirado en el suelo de piedra de lo que parecía ser una celda.
"Steve, ¿estás despierto?" Llamó una voz desde su derecha.
Se volvió hacia la voz, parpadeando sus ojos en un intento de deshacerse de lo que se le había dado para mantenerlo bajo. Por lo general, las drogas no funcionaban en él, así que, fuera lo que fuera, era fuerte.
"Clint?" él susurró.
La voz suspiró de alivio.
"Sí, jefe", respondió, "Estuviste fuera de control por un tiempo. ¿Estás conmigo ahora?"
Steve miró a su alrededor, notando que estaba solo en la celda.
"¿Están los otros contigo?" preguntó, su voz un poco áspera.
Clint se quedó en silencio por un momento.
"Bruce está en la celda a mi izquierda. Puedo escuchar sus ronquidos desde aquí. Lo que sea que le hayan dado realmente lo mantiene bajo control".
"¿Thor? ¿Natasha? ¿Toni?" Llamó, más que un poco preocupado por Toni. ¿Y si le hubieran hecho daño?
"Por aquí", vino una distante voz de su izquierda.
"Nat?" él llamó.
"Sí, tengo a Toni aquí conmigo".
"Thor?" Preguntó Clint.
"No, pero creo que está entre nuestra celda y la de Steve, todavía está dormido si mi audición es correcta".
"Así que mantienen a nuestros dos grandes bateadores fríos todo el tiempo que puedan", expresó Steve, "¿cómo está Toni?"
"Dormido. Por suerte, la colocaron aquí conmigo. Odiaría que se despertara sola si el proceso de envejecimiento tenía un efecto secundario negativo en ella".
"¿Como perder más de sus recuerdos?" preguntó Clint.
"Exactamente, lo que según Banner puede ser el caso. Parecía pensar que podía recuperar sus recuerdos, pero cada vez que envejece, los pierde de nuevo, más algunos".
"Así que volviendo al punto uno ..." Steve susurró, enojado.
Nadie dijo nada por un momento antes de que Natasha finalmente rompiera el silencio.
"Ella conoce a Steve, ya sea consciente o no. Incluso su yo de veintiún años que parecía odiarte, se enamoró de ti, por lo que sabe muy dentro de sí misma, que la amas".
Steve sonrió. "Gracias, Nat. No dejaré de decírselo, no importa cuántas veces cambie. Ella siempre será mi Toni".
Los otros sonrieron ante sus palabras mientras Natasha caminaba hacia su joven amiga, observando su cara de bebé y sus rasgos pálidos. Curarían esto, de alguna manera, ayudarían a que su amigo volviera a la normalidad.
"Oh, para con la mierda emocional", fue una respuesta enojada desde el otro lado del pasillo.
Natasha, Steve y Clint se pusieron de pie, tratando de encontrar el sonido de la voz. Sin embargo, Nat fue quien realmente pudo ver al hombre que había hablado y lo que ella vio, le hizo hervir la sangre.
"Justin Hammer", susurró ella.
El hombre en cuestión se volvió hacia ella, sonriendo.
"Srta. Romanoff", respondió con una sonrisa falsa, "es un placer verte de nuevo".
ESTÁS LEYENDO
Desde el principio Steve Rogers y femTony Stark
RomanceToni había estado trabajando en su laboratorio como siempre lo hacía, pero cuando un experimento sale mal, encuentra las consecuencias muy diferentes de lo que originalmente pensó que serían. Ahora, con un cuerpo cada vez más joven, ¿debe encontrar...
