RWBY: El emperador del Rayo [Volumen 2]

Camino a Atlas [Final] + Volumen 6

Era un día hermoso, había niños jugando en un parque que pertenecía a un pequeño pueblo, en una de los tantos hogares que había en ese lugar habían tres personas hablando de manera amigable, una madre y sus dos hijos. La madre se encontraba vendando la mano de su hijo ya que este se había quemado la mano tratando de ayudar a su madre en la cocina, mientras la hermana mayor estaba comiendo un sándwich.

-Con lagrimas deslizandose por sus mejillas- Lo siento mamá, yo solo quería ayudar

-No te preocupes por eso mi vida, al menos no paso nada grave -Terminando de vendar la mano del pequeño, formando un pequeño listón con el amarre de las vendas- Ya esta,¿Mejor?

-Si. Gracias mami -Secando sus lagrimas, con una gran sonrisa hacia su madre

-¡Mira mami!Llego papá, iré con el a divertirme en el parque -Viendo a su hermano, quien estaba recostado en las piernas de su madre- ¿Tu no vienes?

-Nop, me quedare con mamá -Viendo como su hermana se largaba de la casa, haciendo que el sonido de la puerta cerrándose sonará por todo el hogar

El pequeño se había acostado en el sofá, apoyando su cabeza en las piernas de su madre, mientras ella veía por la ventana el hermoso prado que había fuera. El pequeño decidió romper todo el silencio con una sola palabra, tratando de no sonar muy brusco.

-Hey, mamá -Apretando su puño. Mordiendo su labio inferior y cerrando sus ojos- Tuve un sueño

-¿Y de que trataba? -Acariciando el cabello plateado del chico, compartiendo el mismo color que su madre

-Yo estaba en una escuela para cazadores, Dina estaba allí también. Estábamos en el mismo equipo -Dando una sonrisa algo nostálgica

-Suena como un agradable sueño -Dando una sonrisa sincera hacia su hijo

-Yup. Mi compañero era algo molesto y era fácil de enfadar al principio, pero cuando ya lo conocías era una de las personas mas agradables y también hacia muchas bromas- Dando una pequeña sonrisa, recordando a cierto chico de cabello rojizo- ¡Y también!También estaba la compañera de Dina, era realmente inteligente y cool y cuidaba de todos como una hermana mayor

-Dando una gran risa que contagio a su hijo. Aun acariciando su cabello y con un rostro lleno de alegría- Debieron ser muy buenas personas y amigos

-¡Así es!Pero a veces es difícil, pero cada día es muy divertido. Y no te conté la mejor parte de todo¡Tenia una novia! -Levantando sus manos y comenzando a reír como un niño pequeño- Era una chica increíblemente tierna, todo lo que hacia era por sus amigos y seres queridos aunque algunas veces era un poco cabezahueca. Pero aun así era la mejor y era muy bonita

-¿Mas bonita que yo? -Con una voz algo burlona, causando un sonido de asombro por parte de su hijo

-Claro que no, ella es muy bonita pero tu lo eres más. Siempre había diversión con ellos pero... -Dijo el pequeño. Con un rostro algo triste y a la vez al borde del llanto

-¿Pero? -Dijo la madre. Indagando por que el freno tan repentino del sueño

-Cada vez que me daba la vuelta, tu no estabas allí -Causando que su madre diera un sobresalto pero enseguida siguera acariciando el cabello del menor- ¿Mamá?¿Si me doy la vuelta ahora, tu estarás allí, cierto?

-Dan -Colocando su mano en el hombro del chico- ¿Fue un buen día hoy? -Viendo como su hijo asentía con la cabeza- ¿Te gustaron los sándwiches que preparó mamá? -Recibiendo la misma respuesta que antes- ¿Te divertiste jugando con Dina hoy?

-Claro que si -Restregando sus delicados ojos con sus pequeños dedos

-Entonces. Cuando pases un buen día con tus amigos, cuándo comas con las personas que te importan de verdad. Cuando recuerdes días como esos, yo estaré justo a tu lado -Acariciando el cabello de su hijo, escuchando como su hijo luchaba por no llorar- Inclusive si no puedes verme. Estaré justo allí, en tu corazón, haciéndote recordar cuanto te amo