Capítulo 4: Temores e Inseguridades

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Narradora:

Una chica rubia de 13 años se encontraba jugando en los alrededores de su casa, usando su magia en transformaciones y apariciones. Para ser tan joven, se veía mayor a su edad, ya que tanto su cuerpo, como su rostro, parecían de 15... ¡No era algo tan extraño, tomando en cuenta de que ella era una semidiosa!. Pero no sólo era su cuerpo, sino también su grado de madurez. Entendía a la perfección, muchas cosas que una simple niña de su edad, no podría llegar a comprender a plenitud... ¡Y Loki se sentía orgulloso de eso!...

Sin embargo, eso también traería otras consecuencias...

-¿Porqué no puedo acompañarte a Midgard, papá?- Preguntó nuevamente, la chica.

-¡Ya te lo dije, es peligroso para ti, Liliana!- Volvió a recalcar, el oji-verde.

-¿Y entonces, si es tan peligroso, porque tú vas, cada vez que quieres?...- Razonó, la rubia de ojos azules.

-¡Porqué yo tengo experiencia en ese lugar, y sé cómo defenderme!, ¡En cambio, tú no podrías hacerlo!- Le contestó, tratando de convencerla.

-¿Pero no que la experiencia se adquiere con la práctica?... ¡Eso es lo que siempre me has dicho, papá!... ¡¿Cómo voy a aprender a defenderme, si no me das la oportunidad?!... ¡¿O porqué no mejor me acompañas, y me enseñas a hacerlo?!- Habló, con percepción e inteligencia.

El pelinegro se quedó callado durante varios segundos, tratando de maquinar una respuesta coherente... ¡Debía admitir que las palabras de ella, lo habían dejado sin habla!... ¡¿Qué se suponía que debía responder?!, ¡¿Qué excusa debía dar ahora?!...

Su hija seguía observando, atenta y expectante, a que él le diera una respuesta satisfactoria...

-¡Porqué aún no estás preparada!...- Afirmó, con seguridad.

La niña lo observó, asombrada y sin entender...

-¿Porqué no, papá?...- Cuestionó, dudosa.

-¡Escúchame, hija!... ¡Sé que llegará el día, en el que te tendrás que defender sola!... ¡Llegará el día en el que quieras hacer tu propia vida!...- Frunció un poco, el entrecejo- ¡Pero, aún no!... ¡Créeme, mi niña... Te falta mucho por aprender, y sin esos conocimientos, no estarás preparada para enfrentarte a ese mundo!... ¡Lo siento, aún no estás lista!- Aseguró, de forma convincente.

La niña bajó la mirada, muy dubitativa...

-¡Pero, cuando lo esté!... ¿Me lo dirás, y me permitirás ir a aprender cómo se hace?...- Le preguntó, de manera muy sonriente.

El corazón del azabache dio un vuelco completo... ¡Casi nunca le negaba nada a su pequeña, sobre todo, cuando le observaba con esa sonrisa!...

¡Había aprendido muchos de sus gestos y tácticas de persuasión!... ¡Y eso que nunca se lo enseñó!... ¡No por nada, era su hija!...

Ese último pensamiento, le hizo sonreír de manera inconsciente...

Ella le seguía viendo de esa manera, con sus ojitos suplicantes...

-¡Está bien!...- Asintió.

-¿Me das tu palabra?...- Le preguntó, emocionada.

Loki la observó, y sonrió casi de manera traviesa...

-¡Sí, prometido!...- Mintió, de manera convincente.

''¡Nunca confíes en el dios de las mentiras!'' Pensó, mientras meditaba la situación y sus posibilidades... ¡Ya después, se le ocurriría algo para evitar que su amada niña se fuera!.

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⏰ Última actualización: Dec 10, 2018 ⏰

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