capítulo 27 (+ 18)

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Pov rugge's

Al tenerla entre mis brazos jadeando por aire y apoyada entre la dura y fría pared, dispuesta a mi, me pone, me pone mucho.

Vamos.....a..la...habitacion amor - dijo entre jadeos.

La tomé firmemente de los muslos para poder subir las escaleras.
Con mi dientes, bajé ambos breteles de aquel vestido que resaltaba tan bien el enorme y hermoso culo que tiene.
Ella entre movimientos torpes desabrochó el brasier que llevaba puesto, mis pies se movían en busca de la habitación de mi princesa, mi boca le hizo un favor, succioné con fuerza uno de sus pezones ya erectos, sus gemidos inundaron todo el pasillo.
Luego repetí la misma acción con el otro, lo mordí y chupe como si fuera un bebé.

Cuando llegamos a la habitación abrí rápido la puerta y me adentré a ella con Karol aún en mi cintura. Cuándo tuve la cama frente mis pies apoye a Karol en ella, y mis dientes otra vez se divertían jugando con estas tetas grandes y hermosas. Sus manos se enredaban en mis rulos y tiraban de ellos de vez en cuándo, sus gritos eran fuertes y ahogados. Sus labios estaban marcados por mordeduras que ella misma se provocó en busca de calmar gemidos.

Subí a su boca para devorarla nuevamente, con sus pequeñas manos desabrochó torpemente mis botones, yo me encargue de bajar el cierre de su vestido.

Saque mi jean, y retire el vestido de ella. Quedándonos ambos en ropa interior.

En un ágil movimiento Karol se encontraba encima mio, sus manos vagaban por todo mi abdomen, se acercó a mi cuello y dejó besos húmedos, como me pone. Con mis manos acaricié sus nalgas mientras ella mordisqueaba mi cuello.

Bajó sus manos lentamente hasta posarse sobre mi erección, quién ya apretaba por salir de mi boxer. Bajo el elástico suavemente hasta mis rodillas donde esté calló solo. Mordió uno de sus labios al ver mi gran polla, la tomo entre sus pequeñas manos y comenzó a moverse arriba y abajo yo apreté sus nalgas ante la oleada de placer que cubría cada extremidad de mi ser. Esto era lo que ambos nesecitabamos,
Lo que queríamos. Soltó mi erección, solté un gruñido en desaprobación, pero no tarde mucho en notar que mi polla se encontraba entre sus labios. Grite con fuerza mientas ella sacaba y metía mi masculinidad de su boca en un precioso Vaivén. Sus manos acariciaban mis testículos y apretaban como si fuese un pedazo de pan.
Siento mi punto aproximarse, intento decirle que pare. No creo que quiera esto.
Acelera sus movimientos, mete y saca mi pene de su boca. Juega con mis testículos y los aprieta.

Poso mis manos en su cabeza y alzó las caderas en busca de más, estoy a punto de venirme en su preciosa boquita.

Karol......ah... amor...... Quier... Venirme contigo Reyna - dije dificultosamente a causa del placer que está niña me está provocando.

Hasta que en un dos por tres, ella se llena de todos mis liquidos, solté un grito fuerte y sonoro que retumbó en toda la habitación.

Oh no nena, tu también vas a gozar ....

te quiero solo para mí (ruggarol) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora