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Senti que todo pasaba en cámara lenta, ví como Aaron intentaba levantarse para salvar al pequeño y gritaba su nombre, ví al niño que estaba aterrorizado y creía que iba a morir.

Mi cuerpo reaccionó instintivamente y corrió, cuando estaba cerca del niño me lancé antes de que la piedra lo lastimara, había tenido los ojos cerrados en ese momento y cuando los volví a abrir estaba a unos metros del monstruo con el pequeño en mis brazos, el cual se aferraba con fuerza, acaricie su cabeza para tranquilizarlo.

El monstruo noto que lo había salvado y se enojó, así que volvió a tirar piedras pero estas eran afiladas como cuchillos y yo no tuve más remedio que esquivarlas, pero como nunca había echo esto me era difícil, hasta incluso una de esas piedras me lastimó la pierna derecha y caí por el dolor, pero aún sin soltar al niño.

Jadeaba por el dolor, el monstruo sonrió y se acercó mientras transformaba su mano en una afilada, el niño vio eso y se aferró a mi de miedo, lo sentí temblar.

Mi mirada se fue hacia los protagonistas que aún estaban lastimados y apenas podían caminar, no nos salvarían a tiempo, a menos que yo haga algo pero ¿que? No tengo magia para defenderme y mucho menos el niño, lo único que tengo es una flauta...............¡Dios! Claro como no me acordé antes, si hay una manera de hacer algo sin tener que usar magia.

Me levanté (como pude) y puse al niño detrás de mí, saque la flauta que estaba en mi bolsillo y luego la lleve a mis labios, para luego comenzar a tocar una melodía dulce, el monstruo se quedó quieto y escuchó la melodía, no fue el unico también los protagonistas estaban sorprendidos en especial Santiago.

La melodía era hermoso te dejaba hechizado, aunque ese era el truco, la melodía te dejaba tonto como la canción de una sirena, cuando el monstruo se relajo, suspire y luego volví a tocar pero esta vez de manera más agresiva, de la tierra comenzaron a salir cadenas que envolvieron al monstruo el cual aún seguía hechizado y no sentía nada, después hice una última melodía y las cadenas apretaron al monstruo hasta que esté se destruyó por completo.

Después de hacerlo por fin caí rendido, mi pierna apenas pudo soportar, está seguía sangrando y se había hinchado y puesto morada, Aaron y Gabriel se acercaron mientras Santiago inspeccionaba al monstruo para ver si estaba muerto, Aaron se acercó al niño y le pregunto...

-¿Estas bien?

-Si, gracias a que el me salvó- dice mientras me apunta, sentí escalofríos al sentir la mirada de Aaron en mi

-N-no hice la gran cosa - dije con una sonrisa nerviosa

-........ gracias

-Eh?

-Por salvar a mi sobrino, no lo repetiré otra vez

¡¿Su sobrino?! ¡No sabía que era el sobrino de Aaron!

-N-no hay de que, cualquiera pudo hacerlo

Este no dijo nada y sólo asintió, después vio mi pierna la cual aún sangraba, este grito a un sirviente que buscarán a un médico, este obedeció y se fue, Gabriel se acercó y pregunto....

-¿Puedes caminar o necesitas ayuda?

Derepente las imágenes de cómo Gabriel me llevaba de diferentes maneras, una de ellas fue de arrastras, otra me tiraba a su espalda como un saco de papas, y llegaron más pero las ignore, ¡Ni loco voy a dejar que este hombre me lleve! Prefiero hacerlo solo.

-No está bien puedo hacerlo solo, no estoy tan lastimado- dije mientras me levantaba

Pero al hacerlo mi pierna trono y casi caigo, si no es por que Gabriel me agarró de la cintura, ¡Cuerpo me traicionaste!, Pero antes de que tocara el suelo y dijo molesto...

Soy un simple maestro que reencarno ¡CANCELADA!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora