Casado Con Un Chico

Capítulo 30 - Sorpresas, sorpresas y más sorpresas

POV Ezequiel

"¡¿Qué le está pasando?" Anna gritó preocupada mientras todos veíamos frenéticamente cuando Darren comenzó a gritar y tirar de su cabello como lo hizo esta mañana.

"¿Dónde está el doctor?" La voz de Jason resonó dentro de la habitación y ni un minuto más tarde, la puerta se abrió de par en par, revelando a las enfermeras y al médico. Nos obligaron a todos a marcharnos y salimos vacilantes de la habitación, pero no antes de que echara un último vistazo al cuerpo inconsciente de Darren.

"¿Qué demonios pasó allí?" Jason preguntó, su voz levantándose en preocupación. Mierda, estoy preocupado por él. Sentí que me agarraban el cuello, lo que me sacó de mi trance y miré a un Jason furioso. "¿Qué demonios está pasando?" Preguntó de nuevo. Volví mi mirada de él a los demás y todos me miraban con furia, esperando cualquier palabra que saliera de mi boca.

"Pensé que te dije la razón antes. ¿Lo habéis olvidado?" Las miradas que me lanzaron se intensificaron y el agarre que Jason tenía en mi cuello se apretó.

"¿Crees que esto es gracioso? ¡¿Crees que es una broma?" Gritó con puro enojo, apretando aún más el agarre en mi cuello.

"¿Crees que bromearía sobre algo como esto? ¿Crees que bromearé cuando mi puto esposo está allí dentro, sufriendo un trauma de cabeza? ¡Bueno, jódete, Thompson!" Espeté, soltando su agarre en mi cuello "¡Me preocupo por Darren! Pensé que dije todo eso, pero supongo que sus mentes estrechas no podrían procesarlo, ¿verdad? Entiendo que me culpan por todo lo que le está sucediendo a Darren, ¿y sabes qué? Yo también me culpo a mí mismo. Me odio por lastimarlo, por dejarlo! No me importa si me odiarás o no, pero dejemos de lado nuestras diferencias por ahora y sé civilizado por el bien de Darren. No quiero causarle más problemas". Dije con seriedad pura, mirándolos directamente a los ojos.

Un silencio tenso nos envolvió mientras esperábamos fuera de la habitación de Darren "Está despierto". El médico dijo después de unos minutos, creo. Miré mi reloj y vi que ya eran las 5 de la tarde. No me sorprende que mi estómago se quejara, ya era tarde y además no he comido nada desde esta mañana, pero no tengo ganas de comer.

Me levanté del banco y abrí la puerta de Darren lentamente, teniendo dudas sobre entrar y enfrentarlo o huir como lo hice la última vez. Cuando la puerta se abrió con un chirrido, me preparé para lo que fuera que pasaría cuando lo volviera a ver después de su segundo episodio. Alcancé y lo vi mirándome, su rostro carente de cualquier emoción que diera paso a lo que sea que estuviera pensando.

"Oye", saludé y forcé una sonrisa mientras caminaba lentamente hacia su cama, con los ojos fijos en él. "¿Estás bien?" Le pregunté cuando llegué a la silla al lado de su cama, tragando el bulto que se formó en mi garganta. Me estaba incomodando con la forma en que me estaba mirando. Era como si él fuera cauteloso conmigo, y al mismo tiempo sentía curiosidad por lo que haría. Es como si él ... pudiera ser?

"Uhm ..." dije torpemente, rascándome la nuca a pesar de que no me pica.

"No lo hagas".

Una palabra. Dijo una palabra y sé que reconocen ese tono de voz. Era el mismo que usaba cuando me dijo que iría a la escapada que habían planeado. Mis ojos se abrieron ante esa repentina realización. ¿Podría?

"¿D-te acuerdas?" Tomé el coraje de preguntarle y vi que entrecerró los ojos ante eso.

"No mucho", fue todo lo que dijo y el silencio tenso nos envolvió de nuevo.

"¿T-tienes hambre?" Le pregunté después de unos minutos de silencio. Volvió su mirada hacia mí, pero la apartó como si me mirara con repulsión y no lo culpo y no lo culparé si se siente así, incluso si duele.