Tu Muñeca

3.8

        Pasaron los días de prisa, no hubo un buenos días, ni siquiera aparecía para saludar, solo veía en su whatsapp fotos con su nueva chica; morena hermosa y con cara de malicia, Victoria realmente dejo de importarle que Marcus hacia o no con su vida, seguía la misma rutina, al atardecer salia de casa muy bien vestida "siempre tuvo gustos sofisticados" y eso hacia que en su oficio la llamaran "niña de papi" tomaba él metro, y llegaba temprano al bar nocturno donde trabajaba, pasaba directo al vestíbulo donde se cambiaba de niña buena a chica de la vida alegre, subía sus medias pantys negras un bracier negro, y una mini falta que le había regalado su amiga Amanda.. Soltaba su cabello y los maquilladores le hacían un gran trabajo, ella salia dispuesta a lo que sea y a su vez quería morir, se sentó en una mesa solitaria mirando al infinito, las chicas poco a poco iban llegando y con ellas la clientela, esa noche fue muy movida, gente salia y entraba, victoria bailaba en su pole, tratando de olvidar lo que hacia perdiéndose en la música, y borrando todo de su memoria; un hombre alto piel blanca cabello rubio y ojos castaños la invito a tomar asiento, ella se bajo del escenario con él dinero q había recibido y lo abordó -hola mi nombre es maria... Él sonrió y le dijo: me llamo alberto, mucho gusto.. Pasó un rato de prisa hasta que la invito a levantarse de la mesa e ir directo a la barra, donde a un extremo estaba la caja registradora.. -Cuanto por la noche con ella? Victoria volvió si rostro y él sonrío. Saco su tarjeta de crédito pago y la tomó del brazo -vamos... Ella solo obedeció con un poco de miedo y ganas de salir corriendo pero ya era tarde. Subió a un auto lujoso él de piloto y ella de copiloto, salieron del estacionamiento tomando la avenida principal, luego entraron a la autopista dirección este, rodaron casi media hora hasta que entraron en una urbanización gigante con casas de sueño y jardines enormes, ella pensaba en todo lo que estaba pasando y que aquel lugar le hacia extrañar su hogar; llegaron a una casa casi al final de la colina, con hermoso estacionamiento y él jardín cubierto, la entrada era gigante con luces blancas de led y una puerta victoriana muy chic, amablemente le abrió la puerta y se bajo del auto condiciendose a la puerta principal, saco sus llaves y abrió, todo estaba en absoluta oscuridad y al encender las luces pudo ver una enorme sala casi vacía, con obras de arte por doquier y una alfombra en él suelo voy a morir pensó enseguida, él la llevó a la cocina enorme con tope de granito pulido en blanco, cocina de ultima generación y nevera dos puertas, de la alacena saco una botella de vino tinto, tomo dos copas y sin preguntar sirvió... La invito a subir a su habitación donde se suponia tendrían sexo, ella entro a aquella suit con una cama enorme para ocho personas, televisor 42 pulgadas y todo lo demás parecía traído de otra galaxia, él se sentó en la cama y ella repitió la acción esperando a que él cobrase su deuda, cuando la miro fijamente y le dijo -soy Gay.. Victoria no pudo esconder su cara de asombro pero prefirió callar - Mis padres quieren que me case, que tenga una familia, realmente no quisiera decepcionarlos pero no puedo complacerlos, no es tan sencillo.. - que piensas hacer? Dice victoria algo apenada..
-Casate conmigo, te elegí por que se que no eres como ellas, tu manera de hablar actuar y reír hace denotar tu clase, inteligencia y mas que todo mucho glamour... Victoria no sabia que responder a lo que le dijo. - No puedo hacerlo. -Por que?. agacho la cabeza y con una lágrima en los ojos respondió. - Estoy esperando un hijo.. Lágrimas rodaron por sus sonrojadas mejillas y Alberto le dio un abrazo - Se que te acabo de conocer pero es perfecto... Charlaron toda la noche, victoria contó lo que sucedía con Marcus la abrazaba y sonreía, la invito a dormir le acomodo un espacio en su cama y allí quedaron ambos, no hubo sexo ni amor solo se escucharon uno al otro.
Amaneció con una brisa helada, victoria despertó y no lo vio allí, observo aquel lugar y toco su panza, unos minutos mas tarde entro una señora vestida de uniforme con ropa para ella y le dijo -toma un baño, ponte esto que ya vienen sus futuros suegros.. Ella corrió al baño donde analizo lo que estaba pasando y recordó que él le ofreció aparte de lujos la mitad de su herencia para ella y su bebé, estaba buscando la manera de salir de pobre asi que acepto... Se ducho rápido peino su cabello, se vistió con la ropa que le había dado la servidumbre y salió, parecía una niña de la alta alcurnia, la señora llegado le observo de arriba abajo y enseguida la amó.. Él señor saludo cordialmente mientras Arberto fingía amarla y victoria también...

     Llego la noche: Víctoria exhausta no fue al club y se quedo en casa a dormir, sentía como los latidos de un pequeño corazón saltaban y ella muy feliz acariciaba su vientre, se quedo dormida profundamente, sintió que había echo algo bueno en su vida y eso era ayudar a otro....

           un mes mas tarde..

-Buenos días amor
-buenos días Marcus..
-como amaneces hoy?
-Muy bien...
La pancita de victoria ya había comenzado a crecer se notaba un poco y su figura estaba cambiando, ya estaba a punto de entrar a los cinco meses de gestación...

-Mañana partiré a Londres..
-Cuando regresas?
-Creo que jamás, aquí ya no tengo nada y no te había comentado nada pero estoy embarazada. Mi novio y yo nos casaremos en Londres donde nacerá nuestra hija...
-....... Me estas hablando en serio?
- mas que enserio muy claro... Marcus del otro lado de la linea comenzó a llorar no escribió mas hasta que pudo calmarse.
- Victoria quedate, hagamos una vida juntos y criemos a ese bebé los dos....
-Es muy tarde.. Respondió victoria con los ojos llenos de lágrimas pero prefirió que así pasaran las cosas, apago su celular para no seguir hablando con Marcus, eso le daba rabia y dolor a la vez; debía mantenerse firme, las próximas horas eran decisivas para su futuro...