Capítulo 5

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Jimin 

Acabo de bajar de el auto y sinceramente ya me quiero ira a casa, esta cosa que llevo dentro del culo se siente genial, pero seria muy vergonzoso si alguien me llegara a descubrir, aparte de eso, llevarlo es incomodo, no solo por que es un intruso vibrador en mi entrada, sino que también por que por la estimulación estoy muy húmedo tanto en mi parte trasera como en la delantera, pues ya me corrí antes de bajar del auto.

-Hey Jimin, por acá!- dice uno de mis amigos de la universidad. BamBam, bueno, ese es su apoda ya que su nombre es muy complicado de pronunciar-

Me dirigí lentamente donde ellos, sintiendo el vibrador moverse en mi interior a cada movimiento- Ho la chi cos-no podía pronunciar correctamente las palabras y eso era un problema-

-¿Que tienes amigo, acaso estas enfermo? suenas extraño-dijo BamBam con preocupación impregnada en su voz y su expresión-

-Concuerdo con Bambi ¿te sientes bien Jimin?-Dijo mi otro amigo. Mark-

-si, estoy perfectamente -trate de hablar lo mejor que pude, pero mi vos sonaba ahogada y un poco, muy forzada-

-esta bien-dijo Bambi inseguro- vamos entonces culón-me dio una nalgada y yo no pude evitar soltar un pequeño gemido un tanto agudo-

-ahg, no ha gas eso mng-ya mi voz sonaba muy distorsionada, ya valí-

-Ya basta Jimin, tu no estas bien y nos vas a decir que es lo que te sucede enano culón-dijo Mark tomándome cual bulto de papa, yo intentaba forcejear con el y le rogaba que me bajara, pues en esa pose, el vibrador entro mas profundo en mi culo haciéndome delirar. Deje de forcejear ya que cada vez que no golpeaba el me daba una nalgada-

El transcurso de la entrada a a azotea todos me miraban muy extraño, pero ya que. Ya me había corrido dos veces básicamente encima del hombro de uno de mis mejores amigos, que vergüenza.

-Que mierda Jimin, a caso ¿tienes algo en el culo? por que cada vez que te nalgueo, gimes y creo que y hasta te corriste- dijo sin pudor alguno una vez entramos a la azotea, pero me negué a responder-

-Mark, suéltalo, lo descubriremos a las buenas o a las malas- demando BamBam mientras cerraba con seguro la puerta de la azotea y mientras eso, Mark, me bajo de su hombro acostándome boca abajo, mientras me sujetaba ara que no me fuera a levantar-

-No por fa vor- suplique entre sollozos que posiblemente eran de placer, ya que el objeto en mi culo, no había dejado de vibrar-

-Bien, entonces... ¿nos dirás por que estas así?-Pregunto Mark pero nuevamente me mantuve renuente a contestar lo que me estaba preguntando, así que sin dudarlo dos veces BamBam me dio una fuerte nalgada, la cual desato mi 5to orgasmo del día-

-AHHH-gemí agudamente, ya sin pudor alguno con mis amigos-

-Acaso... ¿te acabas de correr?-pregunto BamBam con asombro-

-Eso parece-concordó Mark-

Mark de repente me tomo mejor de las manos acomodándolas sin hacerme daño detrás de mi espalda y me ponía en posición de perrito. Al instante en el que me puse en esa posición, empecé a jadear, ya me valía madres, estaba muy excitado  y mas aun que el juguete estaba vibrando justo en mi próstata con demasiada potencia.

sabor caramelo (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora