~Sorry, Pero Solo Hay Una _____~ (*Magcon*)

Capitulo 3

-¡Despierta ya de una maldita vez _____! –Me grito Cam- Esta es la séptima vez que vengo a llamarte y aun no te levantas, será mejor que te levantes ya o si no yo mismo entrare y te echaré una cubeta con agua fría, y no estoy hablando en broma. –Me seguía hablando detrás de la puerta, hasta que 3 segundos después escucho sus pasos alejarse. Hay madre mia de seguro fue a buscar la cubeta con el agua fría, mejor me levanto ya. Aunque … No estaría mal jugarle una pequeña broma-

Me levante rápido de la cama y acomode todas las almohadas en ella para que pareciese como si aun durmiese, y cuando escucho sus pasos acercándose, me escondo en el baño. Este abrió la puerta y se acerco a mi cama.

-Lo siento pero te lo advertí peque. –Vacio la cubeta encima de mi cama, pero al ver que yo no me movía decidió quitar la sabana, y fue ahí cuando se dio cuenta de que yo no estaba ahí- ¡¿Pero que demon… ¡_____! –Me grito y fue ahí cuando yo salí del baño-

-¡¿¡¿Oye Cam, pero que mierda haz hecho!?!? –Le pregunte fingiendo enfado, pero no aguante la risa y fue ahí cuando el descubrió de que todo fue una broma-

-Pequeña demonia me vengare por esta, pero será para después. Ahora mejor vístete si no quieres llegar tarde a tu primer día de clases. Te estaré esperando abajo. –Finalizo y se fue-

Rayos es cierto, ahora tengo que apurarme si quiero verme bien. ¡SER BELLA NO ES FACIL! Hahaha lo sé, lo sé, Ego y Orgullo son mis otros mejores amigos, y luego vendría Señor Sarcasmo. Bla bla bla bla mejor dejo de pensar tonterías y me baño. Ya pasados 15 minutos, yo me encontraba en mi gran armario en busca del atuendo perfecto. Me decidí por unos jeans de color negro, camisa de cuello alto con margas largas las cuales me enrolle hasta los codos de color rosa, y unos supras del mismo color. Mi cabello lo deje surto y le hice algunas ondas. Me puse un poco de maquillaje, ya que es de día y no quiero exagerar (Polvo/Base, mascara para pestañas, rubor, delineador y brillo labial), agarre mi mochila y baje.

-Hola chicos –Les salude- ¿Qué vamos a desayunar?

-Holaa _____, vamos a desayunar panqueques hechos por mí, pegue según Cam ‘el no sabe cocinar’ –Dijo Aaron-

-Reí- Eso es cierto. –Afirme-

-Ja ja, ¿Se olvidaron de que aun sigo presente o qué? ¿Saben qué? Mejor comamos antes de que se enfríen. –Dijo mi hermano y luego nosotros reímos y acto seguido nos pusimos a comer-

(…)

-¿Aquí es? –Pregunte algo fascinada, ya que el instituto era inmenso-

-Sí, aquí es. Ahora bájense y vamos a la Dirección para buscar sus nuevos horarios. –Dicho eso Aaron y yo nos bajamos del auto y lo seguimos. Mientras caminábamos por los pasillos de este, todos se nos quedaban viendo, algunos sorprendidos por mi presencia ya que ahora soy ‘la chica nueva’, otros o mejor dicho OTRAS con envidia, la cual se les notaba a leguas, porque tal vez pensaron de que soy la novia de Cam, otros susurraban entre sí, y otros simplemente nos miraban embobados.-

-Ya llegamos –Aviso Cameron- Ahora deben de entrar solo ustedes dos. Adiós. –Se despidió y se fue.-

-Vamos Aaron. –Dije y este asintió. Cuando entramos por la puerta que decía ‘Dirección’ estaba una ¿Secretaria? Si, secretaria.- Hola señorita, somos los chicos nuevos. Venimos a buscar nuestros horarios.

-Hola, claro señorita. Pasen a la oficina del director. –Dijo y nos señalo una puerta-

-Ok, gracias –Dije y nos dirigimos hacia esa puerta- ¿Qué, ahora eres mudo? –Le pregunte burlonamente a mi amigo, pero no le dio tiempo de responderme ya que estábamos cruzando por la puerta.-

-Buenos días, ¿Qué se les ofrece? –Pregunto amable el director-

-Venimos por nuestros horarios. –Le respondió el chico al que creía mudo digo Aaron-

-¿Ustedes son los nuevos?

-Sí, señor. –Se me adelanto nuevamente este.-

-Ah, pues bienvenidos. Aquí están sus horarios. –Dijo este entregándonos unos papeles.-

-Gracias. –Dijimos Aaron y yo al unisonó.-

-Muy bien ahora vállense que llegaran tarde a sus clases. –Dicho eso Aaron y yo salimos de la Dirección.-

-¿Qué te toca primero Aaron?

-Biología, ¿Y a ti?

-Química. Bueno suerte, nos vemos en la hora libre. –Dije y me fui al igual que él, pero no sin antes darnos un abrazo de ‘buena suerte’.-

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