- Es domingo un día en el que cualquier estudiante normal estaría comiendo helado, irían a la playa con sus amigos, estarían en una piscinada, o esas cosas, pero yo por otra parte, solo estoy vestida de sirvienta trabajando en la casa de los Alcot.
*Oye, Alice – Llegue aburrida a molestar a la pobre Alice quien leía tranquilamente una revista de cocina – ¿Dónde está Jey?
*Se reunió con unos amigos en el parque para hacer un trabajo
*Oye, Alice... ¿No estas aburrida?
*Si no estuviera leyendo, claro que lo estaría – Respondió sin siquiera verme –
*Oye, Alic– – Justo cuando iba a seguir molestando a la pobre, la puerta se abrió de golpe llamando nuestra atención –
*¡Jessica! – Quien había entrado era la joven Ashley con sus usuales coletas – ¡Necesito que me ayudes a ir de compras! – Pidió egoístamente –
*¡Claro! – Pero mis ganas de matar el aburrimiento no me permitieron negarme – ¿Cuándo vamos?
*¡Ahora mismo! Así que ponte algo decente – Se fue cerrando la puerta de golpe –
- Fui a cambiarme lo más rápido que pude, salí a la entrada principal y vi al bonito auto, al subirme me encontré con dos hermanos algo apurados...
*¡¿Qué?! ¡No me dijiste que también vendría! – Replicamos en coro Andrew y yo –
*No es para que hagan tanto escándalo – Le rubia se había tapado los oídos al escuchar aquel estruendoso grito –
*¿No se suponía que estaba Alice? – Como el auto ya estaba en movimiento, no podía hacer nada más que quejarse – ¿Por qué tuviste que traer a ella?
*Si me hubieras dicho que "Andrevil" iría, hubiera rechazado la oferta
*Espera, ¿Andrevil? – Pregunto el peli-ébano –
*Así es, Andrew y Devil, así me refiero a ti – Lo mire molesta –
*¿Ah sí? – Me miro con tiranía – Veo que alguien pronto tendrá otro castigo
- Luego de peleas tras peleas, llegamos al centro comercial, allí entramos a muchas pero MUCHAS tiendas donde Ashley compraba por lo menos un conjunto...
*Hermano ¿Qué tal me queda este vestido? – Pregunto en una tienda de ropa – ¿Y estas zapatillas? – En una zapatería – ¿Y estos aretes? – En una joyería –
*Todo te queda muy bien – El hermano por una extraña pero inquietante razón asentía con una sonrisa sincera –
*¡Lo sé!, Ten Jessica – Me entrego las bolsas – Llévalo al auto y te esperamos aquí
*E-Esta bien – Fui con cuidado y cuando volví me acerque a Andrew quien estaba solo en una tienda –
*Oye Jessica – Sonrió sádicamente mientras miraba al frente – ¿Cuál crees que me quede mejor?
*¿Cuál? – Cuando voltee vi pura ropa interior para hombres, mi cara se puso toda roja a punto de estallar y solo podía oír las risas de Andrew – ¡T-Tu puedes elegir eso solo! – Intente salir lo más rápido de allí –
*Jajaja... – Reía y reía a carcajadas burlándose de mi reacción – Es fácil burlarse de ti
*C-Cállate – Sentada en un banco aún estaba apenada –
*¡Aquí están los jugos! – Llego la rubia con dos vasos de limonada – ¡Oh, lo siento Jessica! – Me mostro una semi-sonrisa de las usuales – Había olvidado por completo que estabas con nosotros – Le entrego el otro de los vasos a su hermanos –
*No te preocupes – La mire con sarcasmo – De todas formas no tengo sed
- Seguimos y seguimos con las compras, y en todo momento Ashley hacia una parada comprar algo de tomar o comer para ella y su hermano, ahora los hermanos entraron a una cabina de fotos mientras yo me senté frente a una tienda y observaba anhelante un hermoso prendedor de cabello en la vidriera, fue entonces cuando Andrew salió de la cabina y me observaba inconscientemente.
*¡Ten! – Se acercó y me entrego un jugo y un sándwich de la tienda de al lado – Debes tener hambre ¿No?
*Gracias – Le sonreí ampliamente por su consideración –
*N-No es nada... – Al verme de esa manera, el peli-ébano se sonrojo sin darse cuenta –
*Muy bien... – Llego la rubia interrumpiendo el momento – ¡Sigamos con las compras!
*¡¿Qué?! – Exclame con mis últimos alientos –
- Al término de una oposición fallida, continuamos con las compras, horas y horas caminando, horas y horas comprando, horas y horas cargando todo lo que los hermanos compraban y nada era para mí, veía tantas cosas que deseaba comprar pero no tenía ni un centavo, y luego de tantas suplicas, los hermanos por fin decidieron volver a casa. Alice nos recibió con una sonrisa para luego ayudarme a llevar las habitaciones de los hermanos, terminando con eso preparamos la cena, y cuando por fin podíamos descansar, rápidamente me lance hacia el mueble toda exhausta.
*¿Qué le sucedió a Jessica? – Pregunto Jey quien acaba de llegar –
*H-Hola Jey – No tenía siquiera fuerzas para hablar –
*Fue de compras con Andrew y Ashley – Contesto Alice quien estaba sentada en el otro mueble leyendo –
*Debió ser agotador ¿Cierto? – Comento el peli-rojo quien ya tenía experiencia en la situación –
*¿De qué tanto se quejan? – Llego la rubia con su mirada de tirana –
*D-De nada... – Con mis pocas fuerzas logre sentarme –
*Más te vale – Entro el peli-ébano con la misma expresión –
*¿Qué necesitan ustedes dos de nosotros? – Me atreví a preguntar –
*Han hecho un buen trabajo – Se acercó la rubia hacia Jey y Alice – Esta es su recompensa – Les entregó un cheque con una gran cantidad de dinero escrita –
*¡Muchas gracias! – Los dos sirvientes se emocionaron, ¿Quién no? Después de todo es dinero –
*Tú también has trabajado duro – Se me acerco el azabache y me entrego un cheque – Y como bonus por acompañarnos hoy... – Coloco en mis manos... –
*E-Esto es... – Era un hermoso prendedor rosa –
*V-Vi que lo observabas mucho en el centro comercial – Se sintió apenado al decir eso – Cuídalo con tu vida, después de todo es difícil que yo gaste mi dinero por otra persona
*¡Claro, lo hare! – Sonreí más que nunca al ver el regalo que me dio el azabache –
*Eso espero... – Al verme no pudo evitar sonreír con dulzura – Cuídalo como si fuera parte de ti, como lo más importante en tu vida
*¡Muchas gracias! ¡Andrew!
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Te amo sin importar quien seas... [EDITANDO]
Teen FictionLa principal meta de Jessica es lograr que su amor platónico de hace 3 años Andrew, conozca la existencia de sus sentimientos; pero ahora se ve obligada a hacerlo rápido ya que su abuelo la enviara a vivir a casa de uno de sus viejos amigos, al lle...