Every Heart

Capítulo 1. Morir y Renovar

Kinmoku diez años después de la guerra con Galaxia..

Cuando la llama del incensiario se extinga y el dulce aroma de las flores de olivo se desvaneca, la vida de las Starlights se extinguirá, junto con todo lo vivo en el planeta. Para renacer, guiados hacia su deseo, dueñas de su propio destino. Aunque el destino es caprichoso, esas fueron las palabras del oráculo del planeta de las flores, cuando su princesa agonizaba.

Sailor Fighter lider de las Starlights, se encontraba a su lado en ese momento, la princesa había solicitado su presencia, quería hablar con la azabache, al pie del lecho de su amada princesa se arrodilló.

- princesa, estoy aquí. - dijo con dulzura la azabache

- sailor Fighter - con la fuerza que le quedaba tomó su mano - perdóname por condenarlas a la muerte, perdóname, porque la lucha contra sailor Galaxia fue en vano, perdóname por morir y condenarlas a seguirme hasta la muerte.

Las lágrimas corrían por las mejillas de la Sailor - no diga eso princesa, usted no es la culpable, el destino es así, impredecible. Además.... Si usted nuestras vidas ya no tendrían sentido, nuestro corazón se irá con usted.

La princesa le sonrio - estás segura que tú corazón entero se irá conmigo?

Fighter agachó la cabeza - claro que sí princesa.

- ya has olvidado a la princesa de la luna, sailor Fighter?

Desvío un poco la mirada - yo... Ya entendí que ella jamás me amará.

- no evadas mi pregunta, dime Sailor Fighter, aún amas a la reina Serenity.

A Fighter le dolía escuchar que ahora la que alguna vez fue su bombón, tenía el título de reina, de reina de alguien más, alguien que no era ella.

- yo... La amo, la amé desde la primera vez en aquel aeropuerto, incluso la amé cuando ella quito de mi corazón toda esperanza de algún día obtener su amor.

*Flashback*

Sailor Fighter se encontraba frente a a la mujer que amaba, viendo como ella se preparaba para el gran día de su boda. Sus amigas sailor, salieron de la habitación, aún había algo que ellas tenían que decirse. Reí fue la que sugirió dejarlos solos, pues comprendía el dolor que estaba sintiendo Fighter.

Ya completamente solas, Fighter confeso sus sentimientos una ves más - Serena, bombón yo... Te amo, por favor no te cases, te lo ruego - dijo con lágrimas en los ojos

Serena miraba con dolor y tristeza a su amiga llorar - por favor Fighter, no llores por mí, no puedo soportarlo, no puedo!

Fighter tomó sus manos - dime que me amas, vayamonos lejos, dónde nadie nos encuentre.

Serena acarició su rostro,sentía que su corazón se partirá en pedazos, por lo que estaba a punto de decir. Pero no tenía otra opción, debía ser sincera está vez.

- escúchame, Fighter perdóname, no puedo irme contigo, no quiero irme contigo. Porqué la persona que amo esta allá afuera, esperando por mí. Y no puedo mentirte, no es justo para tí, yo jamás podré verte como algo más que una amiga, porque Darién es mi pasado, mi presente y mi futuro por toda la eternidad.

Dentro de la azabache algo se rompió, el dolor era tan fuerte, que no pudo mantenerse en pie, Serena se sentó frente a ella y la abrazó con fuerza.

- lo siento, pero tenías que saberlo, te amo como amiga y siempre voy a recordarte, como alguien especial. Pero... No puedo amarte, espero que algún día encuentres a alguien que pueda amarte como te mereces, alguien con el que estés unido para toda la eternidad.