La Kat seguía muy encariñada con su novia, pero por otro lado... Parecía que esa chica no le prestaba mucha atención, la dejaba de lado, y la Kat solo se quedaba de pie a un lado mientras oía una conversación en la que sabía que no era invitada. Y eso hacía al Marco sentir responsable, porque la Kat estaba con alguien que definitivamente no sentía nada por ella, y seguía creándose falsas ilusiones que él sabía que se romperían, y terminarían rompiéndola a ella.
Odiaba muchísimo ver a la Kat luchando por algo que ya estaba perdido.