Hoy 15 de septiembre del año 2018, te escribo esta carta a ti, realmente no sé en qué momento de tu situación la estés leyendo. No sé si te encuentres bien o mal, o en algún punto intermedio... Bueno no importa el día, el lugar o la situación presente a la que te enfrentes.
Solo tengo cosas que quiero contarte y qué no las olvides, quiero hacerte recordar momentos, decirte cosas que quisieras leer, quizá de alguna otra persona, pero quiero que sepas que tu opinión es muy importante para mi, sé que a veces soy muy dura, pero en mi corazón habitas, en él te sientes plenamente...
Cuando estés leyendo esto, la situación debe de ser la de menos cariño, solo siéntate y lee...
Las hojas de los árboles susurran secretos para aquellos viajeros apasionados por el arte y el enigma de la vida. El viento junto a las hojas nuevas y viejas de los árboles, te desnudan el alma, te entregas plenamente, no eres consciente de su poder, no eres capaz de darte cuenta de que estás entregando y solo lo haces cuando una rama inoportuna cae sobre un montón de hojas secas, provocando un ruido estruendoso, sacándote de tus pensamientos, y dándote la oportunidad de que sepas en qué lugar te encuentras ahora.
De que sepas ahora de que tú también tienes un poder... Comienzas a pensar, demoras algunos segundos del reloj, tomando tiempo que quizá te pertenezca o quizá no, pero eso ya no importa ya que tú has tomado la decisión...
Te sientes culpable y vulnerable, ya que el viento atrevido te ha hecho sonrojar y te has quedado sin voz, las palabras saltan de un lado a otro en forma de pensamientos, en tus pupilas, que ya están dilatadas, miles de pensamientos y recuerdos se hacen presentes cambiando de enfoque tu mirada. De pronto el corazón sobresaltado por la emoción, comienza a arrojarle señales al cerebro, el cual se encarga de traducir aquellos latidos precipitados en palabras, las cuales generan sensaciones y se expresan en mi rostro. ¿Mi sorpresa? Bueno, ha surgido una enorme sonrisa, la cual te haría sentir débil si es para ti. Pero tiene un mensaje oculto para el viento y es el siguiente...
Señor viento, usted a tenido el descaro de hacerme sentir de una manera que jamás me habían hecho sentir. Usted señor, ya que me ha susurrado sus sentimientos y me ha hecho sentir amada, como respuesta ahora yo le escribo esta carta diciéndole que yo también tengo el poder de decirle todo lo que he callado, usted me abruma con su encantadora melodía y yo le quitaré el sueño con cada verso que le escriba...
Noche de Luna
