te quiero solo para mi

capitulo 1

Unos mechones de cabello azabache se asomaban debajo de las sabanas, los rayos del sol entraban directamente por la ventana despertando así al joven ojiverde, un pequeño gruñido escapo de sus labios

- ¿Por qué me olvide de cerrar las persianas anoche? - gruño con desgano mientras se sentaba en una de las orillas de la cama, al sentir el frió suelo debajo de sus pies soltó un quejido agudo

Comenzó con su típica rutina de la mañana, siendo aun las siete con treinta minutos bajo al comedor, sus hermanas menores disfrutaban de unos deliciosos panqueques con miel de mofle, su madre se encontraba de espaldas.

- Buen día- saludo de manera perezosa desde las escaleras, su madre casi de inmediato se dio media vuelta para así cruzar las miradas

- Buen día Luis – saludo la madre del chico con una voz dulce y cariñosa, formando una enorme sonrisa de la cual se marcaban un par de hoyuelos a cada lado de sus mejillas - ¿gustas panqueques, querido?

- ¡claro! -contesto casi de inmediato Luis para mirar a sus dos hermanas pequeñas – buen día princesas

- Buen día Luis- sonrieron ala par las hermanas gemelas,

Ambas mostraban la belleza tan delicada de la madre, sus ojos eran de un tono zafiro, con un hermoso y fino cabello rubio que bajaba hasta sus hombros en formas de ondas, los rasgos de su rostro eran bien parecidos pues al ser cinco años menores a Luis, su apariencia cautivaría a cualquiera, mientras que Luis conservaba el cabello azabache y un par de ojos color verde esmeralda rasgos dignos de su padre, mientras que sus facciones eran tan delicadas y definidas pertenecientes a su madre.

Después de desayunar entre platicas y risas Luis regreso a su enorme habitación solo para coger su celular que se encontraba sobre la mesa de noche junto a la lampara y un hermoso retrato familiar el cual admiraba como si fuese uno de los tesoros mas preciados y valorados del mundo. Al bajar del segundo piso se encontró a sus hermanas menores a punto de salir de casa.

- ¿las llevo a la escuela? - pregunto Luis con una sonrisa en el rostro

- ¡Si! - contestaron a coro las gemelas mientras saltaban a la par del chico

- ¿Qué esperamos entonces? - respondió Luis mientras tomaba las llaves del auto y salía de su hogar junto a su par de hermanas menores, pero antes de salir aviso a su madre

Al llegar a la entrada del instituto de sus hermanas bajo del auto, para despedirlas como se debe, pero antes de subir de nuevo al auto una voz lo detuvo en seco, esa voz la reconocería en cualquier parte, fue esa misma voz le rompió el corazón años atrás, sus ojos se humedecieron y en su garganta se formó un enorme nudo.

- Hola Luis, ¿Cómo te va? - pregunto aquella joven de ojos cafés y cabello castaño la cual sonreía con descaro y arrogancia- ¿te comió la lengua el ratón?

- ¿necesitas algo? - pregunto el chico con desagrado y algo de fastidio- ¿no? Entonces mueve tu trasero de aquí ¿quieres?

Su mirada penetrante y cargada de odio dio a parar a los ojos cafés de aquella chica arrogante, la cual de un momento a otro se mostró anudada por la belleza de los ojos de aquel joven

- Te ves bien- y era verdad después de aquella humillación, Luis descargo todo su odio contra los enormes y pesados sacos de boxeo- ¿Por qué no me quede contigo?, ¿me darías otra oportunidad?

- ¿otra oportunidad? - pregunto con asombro el chico- ¡por dios! Andrea, ¿es que acaso no tienes ni una pizca de dignidad?

- ¿¡como te atreves a rechazarme a mí!? ¡sabes cuantos chicos harían cualquier cosa por estar por mí! – su voz se notaba molesta y a decir verdad era muy chillona e incluso insoportable, << ¿Cómo pude enamorarme de ella?>> pensó Luis con decepción de sus gustos tan malos- quiero darte una oportunidad, Luis

- ¿de verdad?, pues no la quiero- contesto casi de inmediato, pues su padre le enseño a no dar segundas oportunidades si no se lo merecían y ella no lo necesitaba- adiós A-N-D-R-E-A

- ¡TE ARREPENTIRÁS DE ESTO! – grito la chica a todo pulmón desahogando su odio hacia el chico

No le tomo la menor importancia ante la amenaza de la chica, ¿Qué podría hacer ese trozo de silicona? <<No hay de que preocuparse no la volveré a ver>>.

Mientras procesaba lo que acababa de pasar encontró una heladería, se detuvo quizá un helado no le vendría mal, ingreso al local y sonó la típica campanita que daba aviso de el ingreso de un nuevo cliente.

Camino a uno de las mesas vacías que daban a una de los enormes ventanales, una chica de no mas de 25 años se le acercó para anotar su orden, pero no de una forma muy decente, su falda "por asares del destino" se encontraba a diez centímetros arriba de la rodilla, y su blusa no era la excepción

- ¿puedo tomar tu orden? - sonrió coqueta la joven pelirroja

- Solo un helado de chocolate- contesto sin cortesía Luis- gracias

La joven se alejo con el pedido y con la seño fruncido al no lograr su objetivo principal, regreso con el dichoso helado de chocolate, pero esta vez no pronuncio ni una sola palabra.

El sonido de la campanita de la puerta, causó que Luis desviara la atención de su delicioso helado hacia la puerta, contuvo el aire al ver un par de ojos color miel mirándolo con asombro y emoción

- ¡LUIS! – grito el chico de cabello castaño y ojos color miel, todo el aire que Luis se había esforzado por contener, salió al ver a aquel desconocido corre hacia él, ¿Quién era ese chico? Y ¿Cómo sabia su nombre?

continuara...

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hola!

este es el primer capitulo de mi hermoso libro, sinceramente lo que mas me agrada de esta historia es el drama, (luis es demasiado dramático), pero bueno, esta historia la estaré actualizando cada ¿semana?... bueno tratare de actualizarla seguido, eso es todo. ¡nos leemos luego!

                                                                                                                              

                                                                                                                                 ❤🍕🍔 Crhis_0025 🍔🍕❤