Capítulo 4: Charlando por horas. Liam por minutos.

254 8 8
                                    

CAPÍTULO 4

Al bajar de la furgoneta y entrar a la casa, Niall me acompañó hasta la sala de estar para que me estirara en el sofá y así descansara.

Seguidamente, Niall se fue a la cocina a alegando que tenía que comer alguna cosa para subirme el azúcar.

La verdad es que la casa era reconfortante y el sofá muy cómodo. Estuve contemplando el salón estirada mientras esperaba que Niall volviera.

Fue entonces cuando empecé a escuchar unas voces que venían de la cocina. ¿Había alguien más allí? ¿Quién era?

Intenté escuchar algo de la conversación pero lo único que pude escuchar fue a un chico decir "¿has traído a una chica que acabas de encontrarte a casa?" y de ahí no quise escuchar más ya que me sentí avergonzada al entender que "esa chica" a la que se referían era yo. Estaban hablando de mí.

Al cabo de unos minutos Niall volvió a aparecer con una bandeja llena de comida. Demasiada comida diría yo.

—Una pregunta... ¿hay alguien más aparte en esta casa que tú y yo? —pregunto con la intención de saber quién era el chico con quien hablaba Niall.

—Sí. —responde.— Liam está aqui...— ¿Liam? Es otro de sus compañeros, ¿no? La verdad es que sabía los nombres de los componentes del grupo pero no les sabía poner cara.

—Oh, ya. —digo.

—¡¡¡Liam!!! ¡Asómate a la sala de estar, por favor!— gritó. Estaba claro que eso no me lo estaba diciedo a mí, sino al chico que estaba con él en la cocina.

Después de unos segundos de que Niall callase, un chico alto con el pelo castaño entró caminando tranquilamente a la sala de estar.

—¡Hola! —dijo, sonriente. Parecía simpático.— Soy Liam. ¿Te gusta la comida? La he preparado yo. Pero si no te gusta te puedo preparar otra, o si te gusta dejarla como está. Oh, te estoy agobiando ¿verdad?. Perdón, lo siento mucho... Oh, qué bocazas soy. Mejor me callo.— y seguidamente baja la cabeza avergonzado

— No, no pasa nada. Está bien, la comida me gusta mucho, gracias.— le digo devolviéndole una sonrisa. Al instante vuelve a subir la cabeza y sonríe.

— Bien, yo me tendría que ir ya... Danielle, mi novia, me espera. Espero verte pronto de nuevo —me dice. Y se vuelve a ir por la misma puerta por donde ha entrado.

Ahora sólo estamos Niall y yo en la sala. Solos.

—Niall, ¿quieres un poco? Hay demasiada, además veo como miras la comida. —le digo ofreciéndole un poco de manjar de la bandeja. 

—Oh, gracias. —me responde.

Empezamos a comer y, mientras comemos, entablamos una conversación que cada vez va cogiendo más confianza.

Van pasando las horas, y, sin darnos cuenta va anocheciendo. Aún así nosotros seguimos hablando. Parece mentira que nos hayamos conocido esa misma mañana. De verdad que, quien nos viera, diría que nos conocemos de hace muchísimos años, pero que por razones no nos volvimos  a ver más y este ha sido nuestro rencuentro.

Las carcajadas van volando en la sala, y allí se puede notar el buen ambiente que hay. Se ha creado una buena confianza y los dos estamos muy agusto respecto al otro. De verdad que eso me agrada.

Pero, tarde o temprano, nuestra conversación y nuestro bonito día de encuentro tenía que acabar.

—Niall, siento interrumpirte pero, me debería ir a casa. Ya está anocheciendo. —digo un poco incómoda por haberle interrumpido mientras hablaba. 

—Oh, ya, ni me había dado cuenta. Pero, ¿estás segura que podrás irte a tu casa y quedarte sola después de haberte desmayado? —me pregunta preocupado. Se nota que es de aquél tipo de personas que se preocupan por los demás muchísimo y eso le hace encantador.

—Sí, creo que sí —respondo. 

A Niall de repente se le dibuja una sonrisa enorme en la cara. Me parece que tiene una idea.

—¿Qué te parece si... bueno, pasas la noche aqui? Hay una habitación libre. Normalmente duerme Zayn allí pero ahora él no está. Por favor dime que sí, me sabe mal dejarte ir después de que te desmayaras. Además por mi culpa.... Por favor....

—Bueno, de acuerdo... —digo, simulando pereza. Digo simulando, porque de verdad me apetece mucho quedarme un poco más con él.

—¡Genial! Además, mañana vendrán los chicos. ¡Así te los puedo presentar! —me dice entusiasmado. 

—Oh, ¡de acuerdo! —respondo sonriendo.

Después de esto nos quedamos un rato más hablando de lo que haríamos mañana, y luego ya, me dirijo hasta el cuarto que Niall me dijo que podría dormir y me estiro en la cama.

Un montón de pensamientos se me empiezan a cruzar por mi cabeza.... ¡Vaya día! ¿Quién lo diría?

Ahora me viene la imagen de mis amigas a la mente. ¿Las debería llamar y contarles lo que ha pasado hoy? Quizás no es necesario. Tampoco tengo mucho que contar... ¿Qué les diría, que Niall y yo nos hemos hecho amigos? No sería del todo cierto ya que, no lo conozco del todo bien y solo he pasado un día con él.

Decidido. No las voy a llamar para contarles eso. Sus reacciones serían enfadarse conmigo y luego contarlo a los cuatro vientos. Así que prefiero que ése sea mi pequeño secreto.

Ahora pienso en Niall. La verdad es que me empieza a atraer este chico...

Narra Niall

Estoy estirado en mi propia cama. Empiezo a pensar. Qué raro lo que ha sucedido hoy, ¿no?

Carla... Vaya chica. Sólo la conozco de un día pero ya creo que seremos buenos amigos en un futuro. Y espero que así sea. Es muy agradable.

Espero que a los chicos les caiga bien. Pero no debo preocuparme, seguro que sí.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 22, 2012 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Hasta el último de mis días (One direction)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora