𝗘𝗟 𝗣𝗟𝗔𝗡 𝗔 ⟋ 𝘕𝘢𝘮𝘑𝘪𝘯 𝘖𝘚

¡no eѕ мι novιo!

Para ser un Lunes por la tarde el día era perfecto, el monótono zumbido de las abejas, buscando su camino entre la hierba sin cortar o describiendo círculos con machacona insistencia, parecía hacer más opresiva la calma. Un cuerpo extendido entre la fresca hierba lloriqueaba cual niño sin su paleta, SeokJin con dificultad llenaba a su mejor amigo de problemas cotidianos.

Él pelimenta observó con pena a su amigo entre las ondas humeantes salientes de su cigarrillo, aunque el castaño no estuviese llorando de verdad igual la preocupación en Min era evidente. Resulta que Seok no podía sacar de su mente a Namjoon, un chulo dos años menor, había convivido con él par desde hace un año y eso para Jin fue suficiente y los encantos del moreno atravesaron el corazón del castaño, mala suerte para él, su peliplata se fijaba en todos menos en su persona.

Yoongi cansado del sufrimiento -tonto pero que de igual forma era sufrimiento- de su mejor amigo, se vio en la obligación de buscar una solución, y un plan increíblemente estúpido, según Min, bloqueo cualquier idea de su mente.

—Se mi novio — La voz seria y fría del piel perlada dejó estático y casi horrorizado a Seok.

Él castaño se levantó en seco que sintió su cabeza dar vueltas, pero eso no le impidió ver a Min con los ojos más abiertos que un plato, buscando alguna expresión en la cara del pálido pero no encontraba más que unos serios y ojos felinos mirándole con simpleza.

—No me malinterpretes MinMin...— La voz del castaño sonó sinceramente apenada - mereces a alguien mejor que yo y la ver-

—Joder Kim no hablo de ser mi novio en serio.

Yoongi rodó los ojos, dejando salir un suspiro que alargó al instante, SeokJin arrancó con extremo cuidado unas lilas del arbusto a su costado.

—¿Estás locamente enamorado de Namjoon, no?— Él castaño asintió lentamente escuchando atento a las palabras de su mejor amigo — pero estás miseramente cansado de verle coquetear con alguien que no eres tu — Nuevamente Jin asintió con desánimo — entonces hay que fingir que estamos en una relación muy prometedora, que se ponga celoso y termine dentro de tu trasero.

—¡Y-Yoongi! — Un carmesí pastel invadió las dos mejillas de Kim.

—No me vas a negar Jin, estoy completamente seguro de que Namjoon siente lo mismo por ti, si es así nuestro, no, mi plan será todo un jodido éxito.

A palabra de su amigo sonaba increíblemente prometedor su futuro con él moreno, pero ¿y si no sentía absolutamente nada?. Él castaño aún tenía, muy en mente, que él peliplata no estaba para nada interesado en él, no se lo había preguntado simplemente lo había deducido.

—¿Y si no? Sabemos que será una completa perdida de tiempo, probablemente Namjoon nos verá como una pareja más e incluso nos felicitará.

—No lo hemos intentado, tu confía en mi, ahora entremos que tus estúpidos problemas me dieron sueño.

Una expresión de ofensa apareció en el rostro del castaño que inmediatamente negó con el ceño ligeramente fruncido.

—Entra tú, me quedaré un rato recostado.

—Bien, luego no te quejes ni vengas a llorarme cuando una araña se meta en tu oído... Otra vez.

La rosada lengua de Jin fue exhibida solo para formar un insulto demasiado infantil dirigido a su amigo, este mismo rió y le dejó solo en el fresco ambiente del jardín.

Las lilas eran constantemente observadas por Kim, sus pensamientos estaban mucho más revueltos que su cabello, una mitad le gritaba ansioso que el grandioso plan de Min funcionaría, completamente ilusionado, pero la otra mitad se negaba rotundamente a seguirlo. Una abeja moteada acudió y giró zumbando alrededor un momento. Entonces empezó a trepar a todos los estrellados globos ovales de las florecillas. Él se sintió mucha más pequeño que esa misma abeja, por lo tanto la inseguridad era dueña de su cuerpo.