Observo el reloj que se encuentra en el escritorio de madera como por vigésima vez; 14:55 pm. Ya ha pasado más de una hora desde que llegué aquí y mi padre todavía no ha salido de aquella reunión, lo cual me parece demasiado sorprendente porque—debido a lo poco que sé—, se encuentra allí dentro desde muy temprano.
El hambre y el sueño están comenzando a agotar mi paciencia, provocando que el mal humor predomine por completo en mí. Ya harta de esperar, decido dirigirme a interrumpir lo que sea que esté haciendo, aunque haya una muy grande posibilidad de que luego se enfade conmigo. No importa, me voy a arriesgar.
Una vez que estoy en frente de una de las salas de grabaciones, apoyo mi oreja contra la puerta para ver si logro oír algo. Nada, ni siquiera una mosca volando.
Escucho voces y risas provenientes de la habitación más cercana, rápidamente me escabullo con sigilo hasta quedar en frente de la puerta. Vuelvo a colocar mi oreja contra la puerta y ésta vez oigo la voz de mi padre.─Genial muchachos, entonces tendrán que empezar con la composición de las canciones, y una vez listas comenzaremos las grabaciones cuando les sea cómodo, mejor si es lo antes posible. También deberán elegir la temática del álbum y bueno, lo demás lo veremos con el tiempo ─me acomodo mejor, ya que no logro oír bien─. Si les parece, ahora firmamos el contrato y pueden volver mañana por la tarde a empezar con... ─la puerta se abre de repente y mi padre deja de hablar. Abro los ojos como platos mientras voy cayendo, y una vez en el suelo siento como la sangre sube a mis mejillas. Por dios, qué vergüenza─... ¿Alice? Oh cariño, ¿qué hacías allí detrás?
Alguien me toma del brazo izquierdo y con algo de esfuerzo me ayuda a ponerme de pie nuevamente. Levanto la vista hacia el muchacho un poco avergonzada, y le modulo un 'Gracias' tímidamente. Él me guiña un ojo y sonríe sin mostrar sus dientes.
Le echo una rápida mirada a la habitación y en ella se encuentran una mujer rubia, Izzy, Axl—quien, para mi mala suerte, me observa con burla—, otros dos muchachos rubios, mi padre y el chico de cabello rizado y alborotado que me ayudó recientemente. Esto no puede ser más penoso.
─Hija, ¿te encuentras bien? ¿qué haces aquí? ─cuestiona mi padre. Me giro hacia él un tanto aturdida.
─Te... te estoy esperando desde la una ─le digo con dificultad, sintiendo todas las miradas encima de mí. Mierda, esto es tan incómodo─. Venía a pedirte que me prestes las llaves de casa.
─Sí claro ─comienza a buscar en sus bolsillos con rapidez. Muerdo mi labio inferior mientras desvío la vista fugazmente hacia los demás, chocando nuevamente con los claros ojos del pelirrojo. Su mirada es tan intensa e insistente que me veo obligada a apartarla─. Aquí tienes, pero ¿qué pasó con las tuyas?
─Es que... bueno, me las olvidé en casa ─murmuro apenada. Escucho las risitas de los demás y ruedo los ojos mientras suelto un bufido─, bueno eso era todo, no te robaré más tiempo, ya me voy.
─Aguarda, no puedes irte así sin más, no seas grosera Alice ─me agarra por los hombros justo antes de que pueda cruzar por la puerta, colocándome frente a los chicos. Lo observo con molestia. ¿Grosera yo? ¡Sólo quiero irme!
─Tranquilo Chris, es normal que reaccione así, déjala que lo asimile de a poco ─dice la mujer rubia sonriéndome con dulzura.
¿Eh? ¿De qué rayos habla?
Frunzo el ceño mirándola confundida, sin entender absolutamente nada.─Perdón pero, ¿asimilar qué? No entiendo a qué te refieres ─aclaro.
Justo antes de que la mujer pueda responderme, Axl la interrumpe.
─Ella no nos conoce, Vicky. ─dice de brazos cruzados, dándome una espectacular vista de sus grandes músculos contraídos. Muerdo mi labio inferior casi por inercia.
─Claro que sí los conoce ─interviene mi padre. Rápidamente giro hacia él mirándolo desconcertada y con mucha más confusión que antes. Estoy completamente segura que jamás los he visto antes, pondría mis manos al fuego─. Ellos son los Guns N' Roses, los que cantan tu canción favorita, Sweet Child O' Mine. ─concluye.
─Aah... ─musito, asintiendo lentamente─... ¿¡en serio!?
─Me agrada esta chica ─admite el muchacho que hace un momento me levantó del suelo. Se acerca hacia mí y cruza su brazo sobre mis hombros. Los dos rubios, mi padre y la mujer ríen, mientras que Izzy y Axl permanecen viendo la escena con seriedad.
Podría haberme ahorrado quedar como una idiota si mi padre me hubiese dicho antes que la misteriosa banda eran los Guns.
✰✰✰
Perdón pero es lo mejor que pude hacer, no me maten D:
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november rain─⋆ axl rose; slash
Short StoryAlice, una joven de 19 años, se ve atrapada en un triángulo amoroso entre Axl y Slash. Ambos hombres intentarán conquistar el corazón de la joven aunque su amistad, y todo lo que han logrado con el tiempo, acabe con ello. ...