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Mia se permitió llorar por un rato. Por primera vez en muchos años sentía que no podía contener más como se derrumbaban sus emociones. Gritaba con furia y dolor, estaba tan cansada...

La cama temblaba y el suelo se estremecía con cada grito; sin embargo ,sumida en su dolor, Mia no lo notó.

Al cabo de unas horas, se desplomó en su cama, débil por todo el llanto.

***

Ethan no logró dormir bien, solo podía oír los gritos de Mia sabiendo que no podría hacer nada para ayudarla.

No lograba imaginar la desesperación que ella sentía, pero muy en su interior ansiaba quitarle ese dolor. Quería eso más que ninguna otra cosa.

Por la mañana recibió una llamada de Shane.

-Quiero que la traigas.

-¿Qué haremos ahora? - preguntó Ethan.

-Hoy solo serán unas pruebas, tráela rápido - dijo y colgó.

Ethan suspiró, no deseaba esa vida. Nunca la había deseado. Cambiaría todas las comodidades que le daban en la base solo por volver a casa.

Caminó a la habitación en la que estaba Mia, sintiendo demasiado silencio alrededor. Temió que fuera una trampa suya y abrió la puerta con cuidado, pero no esperaba lo que se encontró.

Mia estaba aovillada en la cama, con la respiración pausada. Esperaba encontrarla lista para pelear, como había sido desde que la conoció.

La observo sin hacer ruido por unos minutos. De esa manera, con los ojos hincahdos, la veía tan pequeña y débil que le dolió el corazón.

Observo con cuidado sus facciones, la nariz respingada y los labios rosados, se quedó tanto tiempo hipnotizado con ellos que no notó cuando Mia abrió los ojos.

-Puedo darte una foto, te durará más- le dijo.

Ethan dio un respingo, no quería encontrarse en esa situación. Odiaba mostrar debilidad frente a los prisioneros, porque de eso modo aumentaba su dolor al saber que alguien quería ayudarlos pero no podría.

-Acabo de entrar, no sé de que hablas - le respondió.

-Tus entradas triunfales son muy lentas, has estado viéndome por diez minutos al menos.

Maldición, ¿acaso había fingido estar dormida todo ese tiempo?

-Solo sígueme, tenemos cosas que hacer.

Ella soltó una risa, suave y real. No como su usual sarcasmo. Ethan apenas contuvo su sonrisa al oírla.

Mia se puso de pie, sin protestar y sin intentos de huida. A él le dolió ver como se perdía su determinación

Le dolió tanto que no pudo cerrar su bocota.

-¿No vas a pelear hoy?

Ella río.

-He pensado mucho y la verdad es que hoy estoy cansada. Me vendría sin cuidado si decidieras matarme ahora.

Sus palabras le molestaron. ¿Porqué de repente había perdido la fuerza que parecía siempre haber estado ahí?

No dijo nada y la esposó. La guió hacía fuera del complejo, hacía los laboratorios.

***

Mia conocía muy bien aquellos laboratorios, después de haber pasado ahí casi toda su niñez. Incluso llegó a sentirse algo cómoda en ese ambiente tan familiar, donde lo único que podría causarle dolor era una aguja, un dolor tan conocido...

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⏰ Última actualización: Dec 22, 2018 ⏰

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