— Por ese motivo el profesor no volverá — termina de decir el director señalando la muerte del querido profesor.
— Mi más sentido pesame director — digo inocentemente triste.
— Muchas gracias señorita, bueno como sabrán vendrá un suplente — señala el director — el vendra mañana.
¡Aww una nueva víctima! ¡Que lindo!
Mi inocente mente hace muchas ideas de cómo torturar al suplente.
Cortarle un brazo o una pierna.
Sacarle los ojos con cucharas como dicen por ahí.
Hacer dibujos en su piel con una cuchilla.
Jugar a la ruleta rusa con el.
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Bloody Desadaptada | Resubiendo
Conto"La lluvia cae por que la nube ya no puede soportar el peso. Las lágrimas caen por que el corazón no puede soportar el dolor"
