CAPITULO 13

7 1 0
                                    

-Manuel.

Se escuchaba por los pasillos una voz y me separé de él. En unos pocos minutos la puerta se abrió por completo y apareció su hermanita.

-Hola! ¿Cómo estas?-Le pregunte amablemente a la pequeña la cual estaba sin moverse de la puerta-

-Excelente, debido a que estas aquí-Dijo con mucha alegría y una amplia sonrisa apareció en su rostro.

Ximena era una pequeña de 15 años, lose, quizás no es muy pequeña pero si lo es para Manuel. Como la mayoría del tiempo sus padres no están en casa, Ximena sembró su plena confianza en Manuel su hermano mayor. El la consiente realmente en todo, y aunque su rostro demuestra que esta enojado por interrumpirnos, se simplemente que Ximena, es la niña de sus ojos.

-¿Se “va” por mucho tiempo?-Pregunto Ximena, mirándome con cara extrañada.

-No tranquila, solo con un pequeño salpicón de agua fría como el chavo del 8 y esta como nueva-Bromeo Manuel.

-Ni se te ocurra Manuel, que te dejo sin hijos como Pedro Medina.

-Mejor házmelos como Alejandro y Monserrat-Me guiño el ojo y yo rodee los ojos.

-Dios! ¿Acaso no pueden dejar las “frases románticas” de las novelas para otra ocasión?-Dijo Ximena fastidiada provocando que Manuel y yo estalláramos en carcajadas.

-Bueno ya! ¿Qué se te ofrece, hermanita?-Le pregunto Manuel.

-Hasta la pregunta ofende, hermano mayor! Quiero un selfie con ______ para presumírselas a mis amigas-Dijo emociona sacando su iPhone de su bolsillo.

-Oh no no! _____ esta conmigo!-Me abrazo.

-Oye! comparte a esta celebridad, Manuel-Me solté de su agarre y me coloque al lado de Ximena.

-Gracias-Sonrío victoriosa.

-¿Vamos a tu habitación o quieres la foto aquí?

-Vamos a mi habitación!-Dijo emocionada.

Ximena tomo mi mano y me llevo corriendo a su habitación, dejando a Manuel solo en su habitación.

No tuvimos que correr mucho ya que las habitaciones estaban pegadas. Ximena saco una llave de su bolsillo, la inserto en la perilla de la puerta y la giro, provocando que sonara un “click” el cual nos hacia entender que el seguro estaba quitado.

-Cuidado, lastimas mi braz…

He visto habitaciones con pósters de los chicos pero realmente el cuarto de Ximena parecía un verdadero museo Directioner. Pósters por un lado, las figuras de cartón de los chicos, todos los libros en una vitrina de la esquina, los perfumes, playeras colgadas en su armario, edredón personalizado, cojines con la cara de los chicos, una guitarra autografiada por cada uno de ellos e incluso por los de la banda.

Yo soy de las pocas chicas que no tiene tapizada su habitación con artículos sobre los chicos, solamente tengo a la vista un pequeño mural que papá me hizo y en el están fotografías de los chicos y algunas notas de las canciones que más me gustan, lo se, soy extraña, pero no tengo pegados pósters porque me avergüence ser Directioner, nada que ver, simplemente no me gustaría que mis pósters se maltrataran con la humedad que fluyen en las paredes debido a el clima de la cuidad, yo solo cuido las cosas que me importan.

-Te estoy hablando!-Dijo Ximena.

-Perdón. ¿Qué decías?

-¿Qué que te gusta hacer? Ya sabes, bailar, cantar, hacer ejercicio…

-¿Hacer ejercicio? Ja! ____ no haría ejercicio ni aunque le pagaran 1 millón de dólares-Dijo Manuel entrando por la puerta.

-¿Qué? ¿De que estas hablando Manuel? A mi me gusta hacer ejercicio!

Un Sueño Casi Imposible (Spanglish)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora