Multifestejo Navideño NaruSaku'18 [✓]

NaruSaku [+18] - Una Sakura-chan de regalo

Aquel Uzumaki estaba en graves problemas, vivía solo, no tenía un brazo y para su mala suerte era el derecho ¿Qué haría ahora?
Estaba en las vísperas de Navidad y solo no podía hacer muchas cosas

La oji-jade de su amiga se había ido de viaje desde hace un año y aparte se sentía desanimado por no estar con ella, Sasuke la había rechazado y ella decidió no seguirlo más, conservaría la poca dignidad que le quedaba pero en el camino dejó a su amigo

El moreno con su suéter naranja con el cuello negro caminada por la calle llamando la atención de todos, ahora no podía pasar desapercibido pensando que lo único que quería para navidad, no eran los regalos de alguna chica interesada en su nombre más que en él, era volver a ver a Sakura, él quería; una Sakura-chan de regalo

De pronto sintió a alguien tapando sus ojos

—¡Kiba! Déjate de estupideces— exclamó dándose la vuelta

Los ojos azules de él Uzumaki se abrieron con sorpresa con los cuales vió a una Sakura enojada con una mano en la cintura, aún con su pequeño y estilizado cuerpo cubierto por una capa rosa y blanca y con su cabello tomado en la parte de su frente con un pequeño broche

—¿A quién llamás Kiba?— cuestionó enojada

El moreno no pudo con la emoción y la abrazó con fuerza dándole unas cuantas vueltas en su eje

—¡Sakura-chan!— gritó con júbilo —¡Estás aquí!— exclamó y se dió cuenta de lo que había hecho, se sonrojo y soltó a la peli-rosa junto con una sonrisa nerviosa

La oji-jade miró a otro lado hacía abajo enojada y un tanto sonrojada

—Así es Naruto, regresé para ponerte el brazo que te falta— explicó aún avergonzada al igual que el Uzumaki

—¡Frentona!— gritó alegre la rubia y así llegaron los demás chicos

Naruto y Sakura se sonrieron mutuamente entre toda aquella gente que recibió a ella

[...]

Los dos estaban caminando hacía ningún lado, ellos ya ni estaban prestando atención por la tensión que había entre ellos

—Así que regresaste por mí— dijo en voz baja el rubio

—Sí— afirmó para luego soltar un poco de color carmesí debajo de sus ojos —Que diga...— tartamudeo —... Porque Sasuke-kun no quiere un nuevo brazo, por eso, idiota—

—¿Tienes a alguien para compartir esta navidad?— preguntó un poco tímido el Uzumaki pues sabía que los padres de la peli-rosa se había ido al país del hierro a pasar una blanca Navidad porque no creían que su hija regresaría para esas fechas

—Bueno, ya les hablé a mis padres pero al parecer solo podrán llegar para las 2 de la tarde del 25 de diciembre—

—Lo siento— expresó con incomodidad

—Pensé pasar la navidad contigo y Kakashi-sensei— expresó con una sonrisa

—Kakashi-sensei está muy ocupado y me dijo que no podía pasar la navidad conmigo— explicó el rubio

La peli-rosa se desanimó un poco y sonrió de nuevo —Entonces seremos nosotros solos—

El oji-azul se sonrojo y se paró

—¿Estas segura?— preguntó incrédulo

—Sí, siempre y cuando tú pongas la casa, perdí las llaves de mi casa hace mucho— dijo con las mejillas rojas

—Siempre deseé eso...— susurró mirando el humo que soltaba su boca por el frío siendo escuchado por Sakura

Ella se quedó callada y siguió su camino hacia el desastre de Naruto que era su casa