Sherlock y Watson están trabajando en un nuevo caso. Una mujer ha aparecido asesinada y hay tres posibles sospechosos. Un caso que a simple vista parecía simple pero cada vez se ha complicado más, hasta el punto de hacer peligrar sus vidas. Pero ent...
Cuando llegamos a la dirección indicada, Sherlock estaba notablemente nervioso e impaciente esperando en la puerta, al parecer a su taxi no le había pillado el mismo atasco que al nuestro y había sido mucho más rápido.
- Llevo 10 min esperándoos, ¿se puede saber que estabais haciendo?
- Estábamos en un atasco, nuestro taxi era el gafe se ve.
- Seguramente porque estaba ella dentro, no has elegido el adecuado. – ella lo miró dolida, y aunque quisiese parecer indignada yo me di cuenta, y Sherlock también pues le cambió totalmente la cara, se había dado cuenta de que se estaba pasando, pero conociéndolo no tendría ninguna intención de disculparse.
- Que pena que el tuyo no chocase o algo, o mira, que te hubiese tocado un conductor borracho por ejemplo, ese taxista habría sido mi héroe, y probablemente le habría hecho un favor al mundo. – ahora era Sherlock el que parecía dolido, pero lo supo disimular limitándose a reír.
- Sherlock, ¿podemos hablar? – miré a Nora- en privado.
Ella asintió y se dirigió hacia la puerta.
- Empezaré con las preguntas yo, si no os molesta. – Sherlock iba a reponer algo pero le eché una mirada fulminante y asintió. Nora llamó a la puerta y nosotros nos retiramos. Holmes me miraba expectante.
- ¿Y bien? ¿Qué puede ser tan importante?
- Deja de jugar a este juego, porque nos conocemos y vas a acabar perdiendo tú. Mira que por lo general casi nunca te entiendo pero es que ahora mismo no te entiendo en absoluto, ¿qué estás haciendo? ¿Por qué te comportas de esa manera con ella? Sherlock, aunque no quieras aceptarlo nos salvó la vida, le debemos mínimamente un trato decente y respetuoso, y no este tira y afloja que os lleváis. ¿Me puedes dar alguna explicación de todo esto?
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- No tengo por qué darte explicaciones, empezó ella, además.
- No me digas que ahora tienes cinco años, ¿empezó ella? ¿con qué? ¿Diciendo la verdad? Fuiste tú quien la retó a deducirte, ¿y qué culpa tiene ella de haber sido capaz de hacerlo? Deberías estar poniéndola en un altar de hecho ,y no pisándola. ¿O es lo que haces cuando ves que alguien está a la misma altura que tú? ¿Pisarla?... ¿De qué tienes miedo, Sherlock?
- No lo sé, John, no lo sé.- gritó estallando.- Dejemos esto por favor, tenemos asuntos más importantes que tratar.
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