[•cap.1•]

5 1 0
                                    

Un día normal mi mamá me está llevando al jardín, y yo por más que se lo pedí ella igual me va a dejar. A mí me gustaría ir al jardín si tan solo no estuviera ahí Lucas y sus perros falderos que al parecer los llama amigos, aghh me cae muy mal, y lo pero es que ni siquiera me conoce bien como para que me actitud o mi manera de pensar no le agrade a tal modo de molestarme, pero no, no me conoce para nada, apenas y hablamos, y esas veces son solo cuando se acerca a mi a molestarme. Ya les he dicho a las cuidadoras de que él me molesta, pero momento creen por que Lucas es un estudiante ejemplar, ejemplar mis pelotas inexistentes, bueno, igual ellas no saben quien es estudiante ejemplar o no, ya que nunca de los nuncas nos prestan atención, pero hay una cuidadora que es mi favorita, no me se su nombre por que nunca lo dicen, solo me sé su apodo que es cookie, es muy tierno, y va mucho con su personalidad, pero a los demás niños no les gusta estar con ella, al parecer le tienen miedo, realmente no sé por que, pero mejor para mí, por que así no se acercan a mi.

Ay no, ya llegué ahhh voy a llorar, y más encima tengo sueño.

-natalia, mi niña, tienes que bajar, y llegamos- me dijo mi mamá con una sonrisa.

-mamaaaaa, no quiero ir, por favorrr- le pedí por última vez.

-ya hablamos, no vas a faltar solo por un capricho tuyo.

-pero mamá, no es un capricho, realmente no quiero ir, ya le conté que me molesta Lucas.

-natalia, pero si todas las cuidadoras dicen que es un estudiante ejemplar, que no hay que preocuparse con el.

-aghhh, no te das cuenta de que no siquiera nos cuidan?

-ya, nada más de reclamos, vas a entrar y vas a jugar con tus compañeros!!

-ahh, está bien, iré, pero no voy a jugar con esos animales -dije con una mueca de desagrado al pensar que tendría que jugar con ellos.

-ya, ya, ya, ve, entra.

Al salir del auto me dirijo a la entrada y de repente escucho un grito y al mirar hacía me doy cuenta de que es mi mamá que sacó la mitad de su cuerpo por la ventana.

-adiós, mi niña hermosa, preciosa, chau!! -grita mientras me tira besos, al darme cuenta que algunas personas están mirando, agachó la cabeza y voy caminando rápido hasta entras al infierno con muchos colores.

Iba caminando por los pasillos, hacía mi salón, mientras voy viendo si por algún lugar está la tía cookie, pero no estaba por ningún lado.

-mi día podría ser peor?- dije para mí misma mientras entraba a mi sala, cuando abrí la puerta, siento que choca con algo, impidiéndome pasar, entonces con más fuerza voy empujándola hasta que pude abrirla, no pude creer lo que estaba viendo, era Lucas que estaba haciendo la invertida en la puerta y cuando la abrí se calló de boca, haciendo que sangrara su labio. Que quede quieta un momento, viendo como todo pasaba, Lucas sangrando, sus perros falderos ayudándolo, todos quedándome viendo, al percatarme que Lucas les decía que me siguieran, tire mi mochila a no sé dónde y salí corriendo como si no hubiera un mañana, mientras que los perros de Lucas me seguían- mi día es horrible, fuera malditos imbéciles!!- al decir eso veo como empiezan a correr más rápido- ay no, perdón, perdón, no quise decir eso perdón... Vámonos a la verga we!!!!!!

Querida mamá tú sabes que te quiero mucho, pero por que me tuviste que venir a dejar, y no dejarme que me quedara en casa, en estos momentos te odio con todo mi ser mamá
Atte:tu hija que va a llegar a casa con muchas heridas y moretones

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 24, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

[•cuatro paredes•]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora