Capitulo 2.2

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Flash Back

Sentía que su cabeza explotaría si no apagaba el sol , tenía una sensación parecida a martillazos sobre su cabeza. Juraba que no volvería a tomar así. Abrió los ojos lentamente y vio confusa , no recordaba haberse quedado dormida en casa. Fue ahí que cayó en la cuenta de lo que había hecho. Todo se le vino a la mente como breves lapsos de lucidez.

El imbécil de Yukio , la conversación que tuvieron

La confesión.

El golpe que le dio

El bar y el... No , ay no.

Giro lentamente y el aún estaba ahí , a su lado. Tenía el torso descubierto y únicamente lo cubría uno de los manteles de las mesas del local.

Estúpida y mil veces estúpida. Ella no era igual a Yukio , no engañaba, aunque él se lo mereciera.

Con sumo cuidado y tratando de mantener el silencio se levantó , cubrió sus pechos con parte del mantel. Busco su ropa con la mirada , encontró su vestido bajo una de las mesas, sus zapatos desperdigados en diferentes direcciones , pero algo faltaba , no encontraba sus bragas, maldita sea.

Se colocó el sujetados y el vestido como pudo, los zapatos fueron lo último. Busco su cartera y vio que su teléfono estaba sin batería , rogaba porque no fuera tan tarde, debía de estar en su trabajo a primera hora . Se acercaba una fecha importante para ella y su marca, tenía que supervisar arreglos y diseños nuevos.

Era imprudente de su parte quedarse ahí y buscar lo que le faltaba. Se acomodó como pudo, tenía restos de rímel bajo los ojos y el labial corrido. Con un paño húmedo de su cartera logro acomodar todo en su lugar. Sujeto su cabello en una cola baja y tomó su abrigo , estaba lista. De no ser por el impertinente peliblanco que se le ocurría despertar justo cuando tomaba su bolso para irse.

-¿Huiras como rata? – pregunto el mientras se colocaba de pie , sin sujetar el mantel que cubría su... bueno , ya me entienden. –

-¡Tapate! –sus ojos fueron inmediatamente a esa parte de su anatomía

-No lo hare, ya me viste así. Borracha o sobria da igual- genial , el chico tenia complejo de nudista. Ella trataba de apartar la vista , así que prefirió dirigir la mirada a su rostro. Amala idea , a pesar de acabar de levantarse lucia endemoniadamente genial.

-¡Oh no , aléjate o no respondo!- el peliblanco trataba de alcanzarla , tenían que hablar. Aunque no lo pareciera , no era de las personas que se acostaba con una persona y la dejaba en el olvido, se sentía responsable o quizá era culpa. Aun no descifraba ese sentimiento.

-Es enserio , no puedo creer que te hayas aprovechado de lo ebria que estaba para...

-¿Perdón? – el peliblanco la vio perplejo- ¿Qué me aproveche? Eso no decías ayer cuando...-

-¡Oh por favor! No puedo justificar eso , estaba ebria , intoxicaba hasta la última célula con alcohol y ¡Tapate de una maldita vez! – desvió la vista, quería acabar de discutir , pero con esa imagen le era imposible. Y el continuaba tratando de acercarse- Si das un paso mas no me responsabilizo de nada.

-No te puedes ir sin aclarar esto . Pensé que estabas enfadada por lo que hizo tu esposo , lo único que necesitabas era enfocar esa ira en otra cosa-

-¿Y te parece esa la mejor solución?

-No negaras que lo disfrutaste-

-Yo-o .., eso fue ¡Aléjate!- esta vez el si estaba justo en frente de ella y tal como lo advirtió , no se responsabilizaría de las consecuencias. El golpe no se hizo esperar, una patada en la espinilla y un golpe directo a su rostro fue lo que recibió.

Tres veces te engañe (Hitsukarin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora