Tres Meses

Capítulo 1

La ubicación era perfecta. Eso fue lo primero que notó Jane cuando aparcó y miró hacia la casa. Quizás no sea el mejor vecindario, o la parte más interesante de la ciudad, pero estaba a una milla del hospital. La casa en sí también era linda, a su manera. Era de estilo artesano, probablemente construida en los años 30, y pintada de un amarillo pálido. Sí, la pintura se estaba pelando aquí y allá, y el pequeño patio podía usar algo de agua, y tal vez era necesario reemplazar algunas tejas. Pero en general se veía acogedora. Se veía amada.

Comprobando la hora, Jane salió del coche. Después de alisar su blusa y tomar su bolso, caminó hacia la casa. Había un flamenco rosado solitario en el patio y un gnomo de jardín que probablemente había visto días mejores. Las escaleras de madera crujieron y el escalofrío parecía que podía dar una mala señal. Un par de sillas de camping estaban en el gran porche. Había un cenicero en una esquina y un par de latas de cerveza, pero alguien había puesto delicadamente tres macetas de petunias cerca de la puerta. A diferencia del patio, parecían ser regadas regularmente.

Unos segundos después de que ella tocó el timbre de la puerta, la puerta principal con pintura roja se abrió y una chica radiante la abrazó. Jane se sobresaltó , pero le devolvió el abrazo antes de retirarse.

“Tu debes de ser Jane.” La chica seguía sonriendo ampliamente. Ella era muy linda; Su rostro estaba lleno de líneas afiladas y bordes enmarcados por el cabello oscuro.

“Sí, y supongo que eres Rachel Blake no?”

La chica, Rachel, asintió. “Sí, entra, te mostraré los alrededores y luego podremos hablar de alquiler.”

Rachel era mucho más joven de lo que Jane había esperado. Cuando leyó el anuncio, había imaginado a alguien más cercano a su edad, tal vez incluso mayor, pero Rachel no podía tener más de 20 años.

“Está es la sala de estar, me disculpo por la horrenda alfombra. Estaba aquí cuando mi madre consiguió la casa en los años 90. Mi hermano me prometió hace años que la tiraría, pero aún no lo ha hecho.”

Jane le sonrió. “Oh, no. Creo que es genial. Sin duda le agrega carácter al lugar.”

Rachel puso los ojos en blanco y se echó a reír. “No tienes que aspirarme para obtener la habitación, está bien admitir que está alfombra es asquerosa.”

“Aquí está la sala de televisión, allá está lo que a mi hermano le gusta llamar el comedor, pero en realidad es solo una parte de la sala de estar con una mesa. Eso es el patio trasero; El baño es la puerta al lado del vidrio corredizo. Te muestro arriba y la habitación que sería tuya.”

“Sigues mencionando a un hermano, ¿Vive aquí?”

“Oh no,” Rachel agitó su mano como si le dijera que no se preocupará, antes de detenerse en la escalera. “Bueno, quiero decir que no lo está ahora, pero lo estará en seis meses. Lo siento, probablemente debería haber-”

“Oh, no te preocupes por eso. Probablemente encontraré un nuevo lugar para entonces. Realmente estoy buscando un lugar para quedarme mientras me instalo en la ciudad.”

Rachel asintió y le envió una sonrisa tímida antes de señalar algunas fotos de la pared. “Ese es él.”

Jane subió las escaleras hacia donde estaba Rachel, inclinándose para mirar la imagen enmarcada. Un hombre alto, bastante guapo, tenía su brazo alrededor del hombro de Rachel. Su pelo oscuro era corto y llevaba un uniforme militar. Un brazo sostenía una bolsa del ejército por encima del hombro mientras le sonreía a su hermana.

“Mi amigo Brian tomó eso cuando se fue a su gira más reciente. Está en Iraq en este momento.” Su voz era tranquila, pero orgullosa.

“Parece un buen chico,” le sonrió a Rachel. “Debe ser muy valiente.”

Rachel se echó a reír y siguió subiendo las escaleras. “Oh confía en mí, ese imbécil me crió. Tiene que ser valiente.” Jane no pudo evitar sonreír ante la cariñosa chica de pelo oscuro que hablaba de su hermano.

“Así que,está es mi habitación, esa puerta de ahí era la habitación de mi madre, pero moví las cosas de Max allí hace un par de semanas para poder alquilar su antigua habitación.”

“¿Está de acuerdo con eso?”

“Oh, sí. No te preocupes por eso. Estaría más molesto si descubriera que alquile la habitación de mamá. Estará bien.”

“¿Así que no lo sabe?”

“Como dije, Jane, no te preocupes. Es tranquilo. Además, dijiste que probablemente estarías en otro lugar para cuando regrese, ¿No? Su gira es especialmente larga esta vez por algún motivo. Está sería tu habitación, aquí te la mostraré.”

Jane siguió a Rachel por el pasillo, un poco incómoda por alquilar una habitación sin que el dueño se enterara. “¿No es está su primera gira?”

“Oh, no, está es la tercera de Max. Me prometió que sería la última. Sin embargo, su buen amigo, Miller fue dado de alta honrosamente hace un año y se convirtió en policía. Dijo que hay un lugar para Max si lo quiere cuando llegue de vuelta, todo lo que necesitaba hacer es el entramiento.” Abrió la puerta y dejó que Jane entrara primero.

La habitación era de buen tamaño, pintaba de ázul pálido y tenía una ventana grande en una pared. Rachel le mostró el pequeño armario y le mostró cómo abrir la ventana. Ella sonrió con cariño al corte irregular de un niño del nombre 'Max' en el alféizar.

Luego, Rachel llevó a Jane al baño de arriva y luego al pequeño patio trasero. Había un pequeño pozo de fuego con más sillas de camping alrededor. Las latas de cerveza ensucian el suelo, pero al igual que en el frente, las macetas de flores se colocaban con amor alrededor del patio. Rachel se sentó en una de las sillas e hizo un gesto a Jane para que hiciera lo mismo.

“Siento el desastre, algunos amigos vinieron anoche y tuve un turno temprano está mañana.”

Jane negó con la cabeza. “No te preocupes por eso, para ser honesta, no soy la persona más limpia.”

“Me resulta difícil de creer,” se rió Rachel. “Mírate, estás tan... tan arreglada!”

Era cierto, la falda tubo y la blusa de Jane parecían un poco demasiado en comparación con los cortes y la camiseta sin mangas de Rachel. Ella se sonrojo “Te lo prometo, no suelo lucir tan bien. La mayoría de las veces estoy en sudadera o en bata.”

Rachel volvió a reír y Jane señalo las macetas “¿Te gusta jardinar?”

“Sí, supongo que sí. A mi madre siempre le encantaron las flores, algunos de mis primeros recuerdos de ella involucran las macetas.” Ella sonrió con cariño. “Después de que ella muriera, pensé que debía tratar de mantenerlas con vida.”

“Lo siento.”

“No lo sientes. Nos pada a los mejores de nosotros.” Un pesado silenció cayó entre ellas.

“Mi padre falleció hace un par de años. Sé que es duro.”

Rachel dirigió una pequeña sonrisa y la miró por un momento. “Me gustas, Jane Griffin. ¿Quieres la habitación?”

Jane pensó por un minuto y luego asintió. “Sí, me encantaría. Está es una exlente ubicación; Prácticamente puedo caminar hasta el hospital. ¿Cuánto cuesta el alquiler?” Pasaron la siguiente hora discutiendo el alquiler, cuánto tiempo planeaba quedarse Jane y sus hábitos de vida. Pronto la conversación se centró en otras cosas, en qué tipo de doctora se estaba convirtiendo Jane, en el trabajo de Rachel en la oficina del veterinario, en sus películas y libros favoritos.

Cuando Jane regresó  a su auto de alquiler para regresar al hotel, decidió que realmente le gustaba Rachel. No era exactamente lo que Jane había esperado, pero vivir con ella, por breve que fuera, sería divertido. La chica seguramente parecía tener mucha personalidad. Además, su madre estaría furiosa cuando descubriera en qué vecindario había elegido vivir Jane.